19 de marzo, 2019
Estaba muy cansada, pero aún así debía asistir a clases. Era el segundo día, no podía darme el lujo de faltar los primeros días de clases, pero tenía que cambiar mis horarios porque acostarse a la 4 de la madrugada por estar viendo TV, sabiendo que debía despertarme 6:30 am, no era bueno.
-Ya te despertaste? -Pregunta mi madre gritando desde abajo por la escalera.
-Si! Ya bajo en un rato. -Respondí de la misma forma que ella.
Me vestí, me puse un poco de máscara de pestañas para no parecer un zombie, me cepille el cabello y bajé a desayunar. Me gustaba desayunar, lo disfrutaba porque era el único momento de paz y silencio en todo el día.
Una vez que terminé, recogí mi mochila y me puse perfume. Mi madre ya estaba lista también, así que abrió la puerta y subimos a su auto. Ella siempre que puede me lleva a la escuela, pero aveces no llega con el tiempo y debo tomarme el bus.
Generalmente en la mañana no hablaba mucho, pero mi madre intentaba sacar charla hasta llegar porque no nos veíamos en todo el día y las únicas veces que cruzábamos palabras era en la mañana y al cenar.
-Aún no me contaste como fue tu primer día.-Habló la mujer de rulos y pelo castaño.
-Pues, fue un buen día, apenas hicimos cosas.-musité sin saber que decir.
-Conociste a alguien? te hiciste amigos?-pregunta de forma insistente.-Intenta hacer amigos, Lay.-agregó.
Ella sabía que me costaba relacionarme, tengo muy pocos amigos por culpa de mi timidez e inseguridad y mi madre siempre dice que debo intentar ser más sociable y reducirlo por mi bien para cuando tenga que comenzar la universidad. Tiene razón y sí es un buen punto pero me cuesta, aunque lo intento diariamente.
-No, quiero decir...si pero -comencé a titubear y dudaba si decirle que conocí a Luke, porque la conozco y se que en el momento que diga su nombre, me va a molestar por el resto de los días con él, diciéndome que lo debería invitar a casa. -no somos amigos aún, solo cruzamos dos palabras. -Agregué.
-Esta bien, recuerda ser buena y educada con los que recién conoces.-Dijo mientras frenaba el auto para dejarme en la puerta de la escuela.-Te quiero, cuídate si?-finalizó con un beso en mi frente.
-Si lo sé. Yo también te quiero, mamá.-Solté mientras salía de allí.
[...]
Ya estaban por ser casi las 2 de la tarde y aún seguía en aquellos malditos pasillos. Estaba esperando a Valeria, habíamos quedado en ir a comer y luego ver una película.
Me dirigía a una de las escaleras para sentarme y pasar el tiempo que faltaba. Me movía con la vista en mi celular sin cuidado porque estaba yo y alguna que otra persona que pasaba por ahí, entonces sabía que no iba a chocarme con nadie hasta que me topé con un chico en frente de mi.
-Lo siento.-dice después de hacer caer mi celular por el choque.
-Deberías tener más cuida-mis ojos se dirigieron hacia su cara y pude ver que era Luke. Me sentí incómoda por casi mandarlo a la mierda, pero intenté salvar la situación. -Hey! otra vez tú, no me había dado cuenta con quien había chocado.
-Si, otra vez yo.-suelta una pequeña risa. -Lamento haberte chocado así, no estaba mirando al frente.
-Ni yo tampoco.-agregue riendo.-No te vi en la clase de Smith, te encuentras bien?
-Si! solo que no había hecho el pequeño trabajo que pidió y no quería que me regañe.-explica nervioso.
-Te lo podría haber pasado, no me molesta.-solté sin dudar, aunque no se por que lo hice, simplemente salió de mi boca sin haberlo pensado 2 veces. Probablemente me molestaría pasárselo a otra persona pero el parecía agradable y quizás mamá tenía razón. Debía hacer amigos y el rubio parecía buena persona.
-No sabia que habíamos llegado a ese punto de confianza....-estira el final de su palabra para que yo de lugar a decir mi nombre, el cual (se supone) ninguno de los 2 sabíamos. Excepto que yo si.
-Layla, mi nombre es Layla. -dije rápidamente.
-Bien Layla, el mío es Luke. -remoja sus labios- Como decía: no sabía que habíamos llegado a ese punto de confianza. -ríe.
pues yo tampoco.
-No te preocupes. -imité su gesto.
-Y que haces aquí sola?-pregunta intrigado, o quizás solo fingía y lo decía para seguir conversando.
-Espero a mi mejor amiga, se supone que iremos a comer y luego al cine cuando salga de clase.-expliqué.
-Al cine un martes?-suelta una risa y a la vez nos movemos para sentarnos en las escaleras.
-Es mi culpa.-rodé los ojos. -No elegí ciencias biológicas a pesar de que me suplicó todo el verano y ahora dijo que como "venganza" debía pagar toda la salida.
-Una salida entera de comida y cine?-dice sorprendido. -Y cuanto llevas en el bolsillo? mil dólares? -señala bromeando.
-Más o menos. -Replique su broma. -Y tu?
-Yo? no, apenas llevo 5 dólares. -saca de su bolsillo unos billetes arrugados.
-Me refiero a que hacias solo tu también. -rei dando una pequeña sonrisa sin separar los labios.
-Pues, en realidad...-suspira y muerde su labio inferior. -No quería volver a casa y preferí quedarme vagando por salones vacíos.
No entendía porque no quería regresar a su casa, pero no era de mi incumbencia y no teníamos la suficiente confianza para hacer semejante pregunta.
-Entiendo. -susurre comprensiva. -Y ahora donde piensas ir?
-No lo sé, siempre cambio mis planes para que no sea como una rutina. -explica.
-podrías acompañarnos si quieres. -mis palabras simplemente salían de mi boca como si mi cerebro estuviera de vacaciones. Por qué dije eso?
-claro que no! no interrumpiré su salida de chicas, además si voy deberas pagar lo mío también.-agrega burloso.
-Tienes razón, me dejarán en quiebra si van ambos!-reí.
-Bien, ya me voy. -se levanta y comienza a caminar. -pero la próxima me acompañaras a vagar conmigo. -habló casi gritando por la distancia que habíamos logrado conseguir.
Habíamos hablado literalmente 2 veces en toda nuestra vida, pero nuestras conversaciones fluían demasiado bien como si nos conociéramos hace años y eso me gustaba. Me agradaba Luke.
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