Capitulo veintisiete

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20 de Julio, 2019
04:23 a.m

Una llamada en el medio de la noche interrumpió mi profundo sueño, maldije por haber olvidado poner mi celular en silencio y lo tome como pude. No mire ni el número, atendi sin más esperando que sea alguno de mis amigos y no alguien random. Probablemente sería luke, el estaba en una fiesta. Seguramente borracho.

-¿Hola? -mi voz sonó un poco ronca.

-Hola, preciosa. -esa voz familiar y ese apodo retumbó en mi cabeza, tenía demasiado sueño.

-Luke, son las 4 de la mañana. -gemi.

-Estoy en una fies-fiesta! Me encantan las fiestas, a ti no? -ebrio, totalmente ebrio.

-Claro, como sea. Estas ebrio, ¿verdad?

-Solo un - whoa! - un poquito, poquito así. -el chico probablemente estaba haciendo una seña con su mano que yo no podía ver, eso demostró el gran grado de ebriedad que tenía. -Casi me caigo, ¿oiste? que graciosa es la vidaaaa.

-Luke, cariño, te encuentras súper borracho. ¿Necesitas que vaya por ti o algo? -sugerí pero realmente no sabía por qué, ni para que me llamaba. El simplemente estaba en otro mundo y quiso hablarme, son esos extraños momentos de ebriedad en los que quieres hablar con alguien y ya.

-Uf, deberías-deberías venir. Ponte ese sexy vestido rojo, se te ve seeexyy. Espera, no. No lo uses. -tropezaba con sus propias palabras. -No lo uses porque si te veo eso puesto, querré follarte. Oye! No. -ríe y la voz de alguien más aparece, una chica. -Layla, me acosan. -carcajeo.

-¿Con quien hablas, hermosura? -una voz femenina se oyó de fondo. -Ven adentro, podemos hacer lo que quieras. -Luke se negaba de manera graciosa debido a su estado.

-¿Así se sienten las mujeres cuando las acosan? -suspiró. -Que gracioso. No! No lo es. Lay, cariño, no me regañes, el acoso a la mujer... ¿cómo era? ah, sí. Es algo serio, lo siento. No te enfades, si recuerdo cuando me has enseñado de eso.

Luke no paraba de hablar un segundo, yo solo lo escuchaba y cada tanto reía. El chico no tenía noción de lo que soltaba por su boca, era como un show televisivo imaginar la forma en la que se encontraba.

-Luke...

-Oye, ¿no vendrás? Esta fiesta está genial, solo faltas tú. Extraño tu boca, y tu cuerpo, hoy un segundo de más y lo hubiéramos estado haciendo en ese sofá!

-Luke!

-Lo siento, estoy ebrio... y caliente. -dio una pausa mientras yo di una pequeña risita. -Que linda tu risa.-exhalo todo su aire. -Podría ir a tu casa ahora, no está tan lejos. Encontré condones que brillan en la oscuridad, habría que probarlos.

-Si vienes, eso será lo último que haremos. -aclaré. A esta altura ya estaba bastante despabilada por como me hacía reír el rubio.

-¿Por fis? -suplicó, lo que hizo que de una carcajada.

-Bien.

-¿En serio?

-Claro que no, iluso.

-Bueno. -gimio. -¿De que hablábamos? No recuerdo ni lo que te he dicho, lo siento. Mañana me arrepentiré de esto seguro, pero ya sabes lo que dicen: Los ebrios son sabios verdaderos. O creo que me lo acabo de inventar, no lo sé.

Before you go| lrh [EDITANDO]Where stories live. Discover now