Capítulo 2

18.3K 1.3K 600
                                    

(Narrador omnisciente)

6 de mayo

-Bien niños, los reuní aquí porque hoy, Cinco-lo apuntó- y ocho- la apuntó- tendrán una competencia- el viejo no se cansaba de hacerlos rivales.

Cinco miró a ocho con una sonrisa burlona, como sabiendo que iba a ganar, y ocho lo miró desafiante.

-Tendrán que ir hacia Griddy's Doughnuts, robar una dona, y volver aquí. El que gane tiene permiso de comerse la dona y demostrará que es mejor que el otro- a _____ no le importaba ser mejor o peor que nadie, pero la idea de la dona la motivaba. A ella le fascinaban las donas. Por otro lado estaba Cinco, a quien le gustaban bastante las donas, pero le importaba más demostrar que era el mejor- al sonido del silbato- dijo Reginald y le hizo una seña a Vanya para que se preparara- 3,2,1- sonó el silbato y ambos salieron disparados.

Iban muy iguales, la tienda de donas no quedaba muy cerca. Iban por distintos caminos, pero muy cerca igualmente. De repente un borracho que manejaba un auto no se dio cuenta de que Cinco estaba en la calle y lo arrolló. _____, al ver la escena, rápidamente salió en su ayuda. Si bien se odiaban mutuamente, no lo podía dejar ahí como si nada. Lo agarró en sus brazos y salió corriendo lo más rápido que pudo. No iba tan rápido como lo solía hacer, ya que, aunque pesara como una pluma, Cinco era un poco más alto que ella, así que la diferencia de altura se le hacía un obstáculo en su velocidad. Corría como las personas normales hacían. En unos minutos llegaron a casa en donde su padre y hermanos los esperaban ansiosos. Al ver a ______ con alguien en brazos supo que algo había pasado y se acercó a paso lento, como si no le importara la salud de su "hijo" si es que así se le podía llamar.

-Ocho déjalo en el suelo- ordenó y ella lo dejó en el suelo- ¿que le hiciste?- esas palabras le dolieron como cuchillos en el corazón. ¿Como su propio padre pudo haber pensado que ella le había hecho algo a su hermano? Realmente era el demonio reencarnado.

-Grace- llamó el mayor- ¡llévalo a enfermería rápido!- ahora parecía un poquito más alterado.

Grace llevó rápidamente al inconsciente a la enfermería mientras que Sir Reginald caminaba tranquilamente hacia dentro de la casa. Realmente era un monstruo de persona. _______ se acercó a sus asombrados hermanos.

-¿Que pasó?- preguntó Allison

-¿Que le hiciste?- preguntó Luther. Ahí estaba de nuevo, el dolor que le llegaba al alma. Una cosa era que su padre pensara eso y otra era que su hermano pensara eso.

-¿Cómo crees que ella haría eso?- dijo Ben exaltado y enojado a la vez mientras se acercaba a ocho, quien permanecía con la cabeza gacha. Ben posó su mano en el hombro de la chica. Ocho quería llorar en ese momento pero no podía dejar que sus hermanos la vieran llorando. No a ella.

-Lo siento- dijo Luther arrepentido de lo que había supuesto.

-Da igual- dijo ocho y se fue como una bala hacia su habitación y cerró la puerta. Y ahí se largó a llorar.

Horas más tarde...

-¿En donde estoy?- pregunta Cinco medio adormilado.

-Ah cariño, veo que ya despertaste- dijo Grace sonriéndole.

-¿En donde estoy? ¿Que pasó con la competencia?- dijo.

-Estás en la enfermería y se canceló la competencia porque estabas inconsciente- dijo Grace con dulzura.

-¿Que? ¿Como quedé inconsciente?- Cinco tenía los ojos como platos. No se acordaba de nada.

-No lo sabemos cariño. Cuando ______ llegó en donde los esperábamos, ella te cargaba en brazos y tú estabas inconsciente- dijo Grace- pero ella no nos ha dicho nada, ni siquiera ha querido almorzar, ha pasado todo el día encerrada en su habitación-

Cinco estaba demasiado impactado. No se acordaba de nada de lo que había pasado. Millones de preguntas le rondaban por la cabeza.

-Ah, y vino a visitarte hace un rato, luego de eso se volvió a encerrar a su pieza- agregó.

-¿Puedo levantarme?- preguntó

-Me temo que todavía no cariño- dijo Grace con su habitual sonrisa.

-Entonces ¿le puedes pedir a ocho que venga?- a Cinco no le gustaba llamarla por su nombre, aunque lo hacía con todos los demás, excepto ella, porque según él, la odiaba.

-Claro, ya vengo- dice y unos minutos más tarde viene con ocho.

Ocho se sienta en una silla en el otro extremo del cuarto.

-Acércate un poco que ni siquiera te veo- le dice Cinco, antipático como siempre.

Ella acerca la silla a un lado de la camilla y Cinco alcanza a verla. Tenía los ojos rojos e inchados de llorar, y también la nariz la tenía más roja que de costumbre. Estaba muy despeinada también.

-¿Estuviste llorando?- preguntó directo.

Ella no le respondió temiendo de que su voz se quebrara cuando empezara a hablar.

-Si no me vas a decir nada entonces te vas- le dice el muy pesado. Ocho rápidamente lo mira mal y las ganas de llorar se le esfuman en un instante.

-Pero si tú me has invitado, no, de hecho me has mandado a llamar, yo no acepté- dijo a la defensiva.

-Entonces te puedes marchar- dice Cinco y al instante se retracta.

-Bien- dice ocho y se para del asiento.

-No espera, era broma- dice Cinco como excusa y ocho vuelve a sentarse suspirando y rodando los ojos.

-¿Que quieres?- le dijo seca. Si él iba a ser así con ella, entonces ella haría lo mismo.

-¿Que me pasó? ¿Por que me quede inconsciente?- _____ dudó un poco y después respondió.

-¿Que? ¿Acaso piensas lo mismo que papá y Luther?- dijo mirando para otro lado y evitando la mirada de Cinco.

-¿De que hablas?- _____ suspira.

-Ellos creen que yo te dejé inconsciente- dice directa.

-¿Y es cierto?- alza una ceja y ocho se indigna.

-¡Por dios! ¡claro que no!- dice alzando la voz.

-¿Entonces?-

-Un conductor de auto te atropelló, pero parece que saliste ileso y que sólo quedaste inconsciente, y yo te tuve que llevar en brazos- dice ocho, restándole importancia.

-Oh, bueno- dijo Cinco y ocho se volvió a indignar.

-¿Ni un Gracias? Enserio que te odio- dijo directa y salió disparada de la enfermería.

Cinco no alcanzó a decirle nada y se quedó pensando.

I used to hate you •Cinco Hargreeves y tú•Where stories live. Discover now