Medianoche

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Aunque los pensamientos de Lyra aún estaban puestos en lo que había sucedido en casa de Gideon, en pequeños momentos se daba el lujo de dedicar su tiempo a recordar como se sentía la mano de Harry tomando la suya y el aroma de su perfume que se había quedado impregnado en su ropa desde aquel último abrazo en la torre de astronomía.

Era extraña la forma en la que estaban sucediendo las cosas. Al parecer, el destino de Harry y el suyo estaban subitamente enlazado y profesaba ser trágico y difícil para ambos. ¿Acaso no podía ser feliz? Cerró los ojos un momento en su cama y suspiró. Lo que él había visto en las cartas estaba directamente atado a todo el asunto de Thackery y su futuro. ¿Sería Harry la persona de ojos verdes que le llevaba de la mano felizmente en la visión de Seferus? Sonrió al imaginarlo. Harry Potter no solo era un chico valiente sino que le hacía reir y era realmente leal. Algo que valoraba infinitamente. Además, a diferencia de los chicos con los que había salido, Harry era realmente amable y comprensivo, no rompía el corazón de otras chicas a propósito, sino que era tiernamente inexperto en sus propias palabras.

¿Pero si con él sería feliz porque sus cartas habían arrojado tal resultado? ¿Debía sufrir para serlo? O quizás Harry no era con quien estaba destinada a ser feliz y por el contrario, era a quien se tenía que enfrentar algún dia. ¿Que podría ser tan grave como para que ella y Harry Potter debieran batirse en duelo hasta la muerte? Tenían los mismos ideales.

De pronto un miedo le inundó. Uno que hacía ya casi un año que no se manifestaba. Sabía que usar magia oscura no la convertía en una bruja malvada, pero siempre había tenido aquel pensamiento terrible donde la magia le consumía hasta convertirla en un ser oscuro capaz de olvidar todo lo bueno que había existido. ¿Que pasaba si era ella quien se convertía en una amenaza y Harry intentaba impedir su ataque?

Nunca lo atacaría. A nadie. Estaba segura de ello. Sentía algo hacia Harry que aún no sabía explicar, era como si de alguna forma estuviera unida a él a través de un halo invisible que ahora le hacía imposible separarse de él.

No podía dormir, así que decidió hacer lo que ya era común para ella desde hacía un tiempo. Tomó su bata y salió sin hacer ruido hacia la habitación de los chicos. Entró con sigilo y se dio cuenta que Harry estaba profundamente dormido, se acercó hasta su cama y se acomodó a un lado cubriéndose con la sabana.

El muchacho se despertó sintiendo la presencia de alguien mas junto a él pero solo pudo ver una masa borrosa a su lado y sonrió aún adormilado. Lyra con un movimiento de su varita cerró las cortinas y se acurrucó hacia el cuerpo del muchacho.

- ¿No puedes dormir? - le preguntó mientras pasaba un brazo a su alrededor y le pegaba mas a él.

- No. Tengo muchas cosas en la cabeza - se sinceró - Desearía poder tener una vida tranquila como la que llevaba antes y habria sido tan genial que estuvieses en ella también, mucho antes de cualquier problema - susurró para luego suspirar - A veces tengo esta loca idea en la que me convierto en una nomaj...y vivo como una. Sin magia, sin problemas.

- ¿Crees que podrías vivir sin magia? - preguntó con el rostro hacia ella y Lyra sintió la respiráción de Harry casi en su cuello.

- No lo se, la magia es una parte importante de mi.

- Yo... no se si podría vivir como un muggle totalmente. ¿Que podría hacer?

- Serías un excelente profesor - le halagó mientras le dejaba un beso en la mejilla - Yo sería diseñadora. Me encanta la moda. Viviría una vida sencilla pero glamorosa.

El castaño sonrió y estuvo en silencio junto a ella mientras acariciaba su rostro.

- ¿Cual es tu color favorito? - le preguntó Harry de pronto y ella suspiró.

Los Merodeadores - Reescribiendo el Futuroजहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें