26.1~ Rumores

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Marissa

Miércoles, 19 de enero

"¡Marissa! ¡Baja de allí, vas a llegar tarde a la escuela!" Papá llamó desde abajo.

Estaba sentada en el árbol del jardín delantero con mis hermanas. Me gustaba trepar y pasar el rato en las ramas cada vez que me levantaba temprano antes de la escuela.

Aunque técnicamente todavía era invierno y todavía había mucha nieve, hoy hacía bastante calor. El clima era lo suficientemente cómodo como para usar unos jeans cortos, que llegaban justo por encima de mis rodillas.

Los había doblado para exponer un poco mis muslos, ya que me gustaba la sensación de la corteza del árbol en mi piel.

Mientras bajaba, de repente sentí una gran picazón en la parte inferior del muslo. La sensación creció hasta que me ardió un poco, lo que me hizo estremecer.

"¿Qué pasa?" preguntó papá, notando mi expresión.

"Me pica la pierna, como... un ardor". Me volví para mirarme el muslo y me congelé cuando vi la causa.

Un gran sarpullido rojo se estaba formando en mi piel, trazando una línea diagonal desde la parte inferior del muslo hasta la articulación de la pierna, debajo de la rodilla. Me agaché para rascarlo, la sensación volviéndose insoportable.

"¡No, no lo rasques!" Papá corrió hacia mí para examinarlo. Tocó ligeramente el sarpullido, provocando que se quemara un poco.

Me estremecí. "¡Ay! ¡No lo toques!"

"Hay una especie de savia aquí... oh." Papá hizo una pausa. "Tienes un poco de savia de árbol en tu pierna. Supongo que eres alérgica a él".

"¡¿Soy alérgica a la savia de árboles?!" exclamé.

"Como nunca antes habías tenido esta reacción, podría ser el tipo de árbol. Este árbol no es de la misma especie que los que teníamos en nuestro antiguo patio trasero".

"¿Qué pasó?" Brenda y Gracie se acercaron a nosotros.

"Marissa tiene una erupción alérgica", dijo papá.

"¡¿Ella qué?!" Mamá salió corriendo hacia nosotros. Murmuró en un inglés preocupado mientras le preguntaba a mi papá qué había pasado y revisaba mi pierna.

"Estoy bien, mamá, de verdad", dije, calmándome. "Solo pica, eso es todo".

"Vamos a buscar el Vicks". Ella me arrastró hasta la casa. "Un poco de Vicks y algunos pantalones suaves".

"No necesito-" No pude terminar mi oración.

Con mamá, Vicks era la medicina universal.

~~~

Johnny

Fui a mi casillero, ingresando mi combinación y abriéndola. Podía ver a Marissa en mi visión periférica, acercándose a su casillero al otro lado del pasillo.

Me di la vuelta, sacando algunos libros mientras le hablaba. "¿Te sientes mejor hoy?"

Ella levantó la vista de su brazo lleno de libros, sonriendo levemente. "Sí, un poco mejor. El baile realmente me ayudó".

"Seguro que sí", suspiré, recordando su hermosa rutina de baile.

Tienes una novia. Para.

"¿Cómo fue?" Ella me miró, cerrando su casillero con una mano mientras su otro brazo sostenía todos sus libros.

Me detuve en seco, dándome cuenta de lo que decía. Ella no sabía que la vi bailar. "Eh... quiero decir... puedo ver que lo hizo. Parece que estás de buen humor".

Una relación amor-odioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora