𝗪𝗛𝗘𝗡?

"Día número veinticinco"

Hoy otra vez no me hicieron nada.
Pero sentía que pronto lo harían.

La razón es porque siempre que me encontraban por los pasillos o la cafetería, todos me miraban con unas sonrisas burlonas.

Trataba de ignorar todo eso, ya que sentía que no se acercaban solo porque ahora tenía amigos... ellos no me dejaban sola ni para ir a los baños.

Quiero decir, Sam y Claire me acompañaban y se quedaban viéndose en el espejo y arreglándose. Todo eso mientras yo hacía mis necesidades.

Pasaba todo el tiempo con ellos.
Estaba feliz, obvio sin dejar de lado la ansiedad que me daba cada que pasaba al lado de Louis o sus amigos.
Aparte que las dos chica ya regresaron a clases otra vez.

Félix y Samantha me acompañaron a casa hoy. Les dije que no quería ser una molestia, pero dijeron que tenían que hacer algo cerca de ahí.

Recuerdo que pasamos por el mismo callejón. A pesar de estar iluminado y de que ahora caminaba más gente por ahí.
No pude evitar sentir nervios y temor.

Volvían las imágenes de aquel día.
Escuchaba los gritos en mi cabeza y las risas de los chicos. Al menos no grabaron o tomaron fotos. Solo se burlaban y me gritaban insultos que prefiero no recordar.

Me comencé a sentir mal.
Y ahí fue cuando todo se volvió negro.

Cuento esto solo porque ahora mismo estoy en mi habitación, en mi cama, junto a un vaso de agua simple y muchas pastillas al lado.
Supongo que algunas de esas ya las tomé desde que llegué.

Más bien, desde que me trajeron.
Mi madre me contó que un chico rubio me traía cargando en sus brazos y una chica castaña tocó la puerta de una forma alterada.

Entonces se dieron cuenta que la chica que iba en los brazos del rubio, era yo, su hija y que estaba desmayada.

Mis amigos estuvieron un rato esperando, pero parecía que yo no despertaría pronto.

Son las nueve de la noche y hace una hora que desperté.
Mi hermana dijo que probablemente no he estado durmiendo bien y que al desmayarme, descansé lo que mi cuerpo estuvo pidiendo durante días.

Wendy