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❝Aunque el tiempo pase, los sentimientos jamás se irán.❞
Paso a paso, Horacio llega a algo muy grande. Pero antes de llegar a la cima, siempre habrán muchos tropiezos, el amor, la amistad y la muerte. Para llegar arr...
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ᵍᵘˢᵗᵃᵇᵒ- ─『Tío, eres un osito.』─Mencionó irritado Gustabo, intentando ayudar a su hermano a caminar.
Horacio no contestó, le dolía demasiado todo como para decir algo coherente, si abría la boca iban a salir sólo quejidos lastimeros. Daba pasos lentos, apoyándose como podía a los hombros de su hermano, un pequeño rastro de sangre quedaba hecho en el suelo, provocado por las gotitas que caían de su nariz probablemente rota, tampoco podía ver muy bien a donde lo llevaban, tenía un ojo morado e hinchado, el otro apenas divisaba algo entre las lágrimas.
ᵍᵘˢᵗᵃᵇᵒ- ─『Listo, descansa aquí que yo voy a ir a buscar a esos hijos de puta.』─
Mencionó el mayor, apoyando con cuidado a su hermano entre las suaves frazadas del refugio en el callejón donde vivían.
Horacio levantó su brazo tembloroso y jaló suavemente el abrigo rojo de Gustabo.─『No. . No vayas. .』─Susurró como pudo, entre un poco de tos.─『Te harán daño también.』─
Gustabo acarició con suavidad la cabeza de su hermano.─『No te preocupes por mí, si son los pesados de siempre me van a comer los huevos.』─Cubrió bien al menor con las frazadas y se levantó, comenzando a caminar hasta la salida del callejón con las manos en los bolsillos. Sus ojos azules habían pasado a ser algo grisáceos con silencioso enojo, sus dedos jugueteaban ansiosamente con la navaja que siempre llevaba consigo.
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ᵍᵘˢᵗᵃᵇᵒ- ─『Horacio, hey, despierta.』─El mayor sacudía a su hermano lentamente, con algo de cuidado.
ʰᵒʳᵃᶜⁱᵒ- ─『Bsbsbangb noo. . Deja mis panes ahí hfhf. .』─Balbuceó el menor entre sueños, mordiendo la tela que lo tapaba.
ᵍᵘˢᵗᵃᵇᵒ- ─『¡Horacio!, ¡ayuda, me secuestran los aliens!』─Gritó Gustabo, sacudiendo a su hermano.
ʰᵒʳᵃᶜⁱᵒ- ─『¡NOO!』─Chilló Horacio, jalando por reflejo el brazo de su hermano, metiéndolo dentro del refugio. Respiraba agitado del susto, soltando leves quejidos por el dolor corporal y el repentino mareo en su cabeza al levantarse tan rápido.
