¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La tensión cada vez era mayor en el lugar, las personas miraban expectantes y curiosas con saber que estaba ocurriendo.
—Mi omega, déjame ayudarte a aliviar el dolor—suplico el alfa.
Jungkook trataba de acercarse lentamente estaba loco por las ganas de querer abrazar a su omega para ayudarlo pero ordenes eran ordenes si no daba su consentimiento él no podría acercarse por más que quisiera.
Taehyung sollozaba de rabia nunca en su vida derramo tantas lagrimas como ahora lo hacía, puesto que no sabía qué hacer es mas no podía dimensionar el por qué le sucedía esto y justo con su cuerpo, jamás se le paso por la mente convertirse en omega.
Ya no tenía más remedio debía aceptar y respetar la decisión de la diosa luna sobre su vida.
— ¿Cómo mierdas crees que podrías ayudarme maldito animal? — cuestiono entre quejidos lastimeros postrándose en el suelo en una posición fetal apretando fuertemente su pecho, panza y entrepierna no sabiendo cual dolor era peor.
—Podre calmar tus dolencias si me permites acercarme prometo por mi vida no hacerte daño mi omega—hablo el alfa usando el mismo tono desbordante de amor.
—Muérete—respondió entre llantos, intentando juntar las piernas y quedar arrodillado mientras con sus manos seguía intentando calmar su zona doliente.
—Por favor mi luna no me hables así, te estuve esperando por tanto tiempo.
Jungkook quiso seguir hablando pero quedo mudo al poder finalmente sentir el aroma de su omega.
Taehyung sin saberlo estaba emanando un fuerte olor que llego a los olfatos de los presentes.
Dio unos pasos más y ya estaba dentro de la enorme habitación donde se encontraba Taehyung, él se posiciono en una de las esquinas encostándose por la pared.
El alfa no aguantaba las ganas de devorar a su luna ya que este emanaba un exquisito aroma a Sándalo, y Pomelo que en si no era un olor normal de un omega era la mezcla de ambas (alfa & omega) una combinación singular, por ello era tan atrayente, tan único tan delirante-mente adictivo y eso lo enloquecía, quería poseer-lo en ese mismo instante sin importar que, pero ese pensamiento retorcido no era el adecuado por ello Jungkook se calmó a sí mismo tratando de estar sereno.
—Vete, y váyanse todos de aquí o absténganse a las consecuencias—pidió con la voz ronca y gruesa, estaba por ser uno solo con el lobo, ya no se podía resistir.
—No te dejare solo yo voy a—no termino de responder al notar la presencia de más personas entrando en la habitación.
El aroma de Taehyung era tan potente que no solo a Jungkook engatusaba, sino a más de uno en ese lugar.
