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El suave viento resoplaba por mi piel, pronto comencé a sentir frio y el parque de repente quedo desolado ninguno de los dos se había percatado lo tarde que se había tornado la noche, y para ser sincero no sentía ganas de caminar tanto.
Escuche la propuesta de Jungkook y la verdad no me pareció mala idea, porque en casa no quería volver. Y sé que Jeon no intentaría nada conmigo por lo poco que lo conozco me dio a entender que el respeto es la base de la confianza jamás se lo confesaría pero confió en el más que en mi propia familia.
—Bien ¡vamos! pero no habría problemas digo ¿hay una habitación para mí solo? —pregunte inseguro.
—Si hay muchas habitaciones—respondió entusiasmado ante la idea de ir a su casa.
—Sera mejor que haya o de lo contrario duermo en el parque no pienso compartir habitación contigo ¿Qué hay de tus padres?
— No habrá ningún inconveniente, mis padres son muy comprensibles y les hable mucho de ti así que te conocen mejor de lo que piensas. Solo hay una cosa ellos no están en casa, viajaron. Espero no te moleste eso—explico con miedo en sus últimas oraciones, podía notar que sus ojos brillaban intensamente.
Casa sola, Jungkook solo conmigo. ¿Qué de malo podría pasar?
—No me molesta. ¿Queda lejos? Estoy cansado mis pies me matan.
Sentía unas enormes ganas de dormir, no me importaba donde o como solo quería descansar aun no me eh recuperado del todo.
Un nuevo amante no me vendría mal, tal vez por una noche sentir las telas delgadas de otra cama me hagan sentir bien.
—Queda a 20 minutos, pero no te preocupes no caminaremos. Aquí tengo mi carro ¡Vamos! — pidió feliz.
— ¿Espera dijiste carro? Yo apenas tengo una bici y tú con carro ¿tendrá mucho dinero tu familia?
Asintió divertido, mientras hacía ruidos con su manojo de llaves.
— ¿Cómo puedes tener carro? ¿Eres millonario? ¿Tu casa es una mansión? —pregunte sin dar paso a mi respiración.
Ahora tal vez piense que soy interesado por que soné como uno, pero tengo la conciencia limpia.
Lo vi sonreír, al final las lágrimas cesaron por un momento me sentí aliviado. No sé si sea bipolar pero por momentos adoro o más bien amo verlo sufrir y por otro no me siento contento al verlo indefenso llorando y era obvio que es por mi rechazo. Pero que puedo hacer nadie puede obligarme a sentir algo que no existe.
—Algo así, mis padres tienen un viñedo y de ese vivimos a decir verdad no les va mal. Pero aun así sigo buscando trabajo pero aquí es difícil de conseguirlo— explico mientras abría la puerta del copiloto haciendo un ademán con las manos para subirme.
