La chica del árbol [JENLISA]

Dónde todo comenzó

6 meses después

— Creo que Lisa me está engañando.

Cuando Jisoo escuchó aquello, dejó caer la comida de su tenedor, miró a la pelinegra completamente perpleja. Su mejor amiga tenía un rostro lleno de preocupación, llevaba un lindo vestido de estampados florales. Dejó los cubiertos en la mesa, se cruzó de brazos suspirando el proceso.

— ¿Tus padres te dejaron caer de la cuna? — Jennie la miró con mala cara mientras soltaba su pregunta — Jamás había escuchado semejante estupidez — Rodó los ojos un tanto irritada, esa mañana, cuando Jennie le había hablado por teléfono y le dijo que tenía algo muy importante que contarle, de verdad creyó que lo era, de igual forma no pudo ser más oportuno, hoy, era un día muy importante.

— Es en serio Jisoo — Se dejó caer en la mesa, cubriendo su rostro con sus propias manos — Ella ha estado muy extraña estos días, se la ha pasado con el celular y además quedó con alguien para ver "algo" — Hizo énfasis en las comillas 

 — Vamos Jennie, debes de estar bromeando.  — Tomó sus manos mirándola directo a los ojos  — Primero creería que los alienígenas vendrían por nosotros con trajes de bailarina antes de creer que Lisa te es infiel.  — Intentó persuadir a su mejor amiga, lo estaba logrando porque Jennie suspiró pesadamente.

 — Es solo que no sé, tienes razón  — Tomó el vaso lleno de jugo de naranja  — No sé qué está pasando, incluso mis suegros están raros conmigo... — Jisoo de verdad tenía muchas ganas de contarle la verdad pero ver a su amiga en ese estado era bastante gracioso.

¿Qué pasó en 6 meses?

Pasaron un par de días después de que Lisa se encontró con el señor Bruschweiler. En repetidas ocasiones había ido a la tumba de sus padres adoptivos junto a Jennie, quizás se sentía un poco mal, ya que pensaba que de alguna forma los estaba sustituyendo, ellos la habían educado muy bien y sin duda alguna le dieron todo el amor que pudieron darle.

Fue un tanto difícil pero al final aceptó que sus padres adoptivos siempre vivirían en su corazón y que Jennie tenía razón, la vida le estaba regresando todo lo que le había sido arrebatado y eso incluía a sus padres biológicos.  A Lisa le sorprendió que aquel matrimonio siguiera intacto después de haber perdido a una hija.

En muchas ocasiones se terminaban separando porque alguno sentía culpa y que ellos se hayan quedado juntos hasta el final no hacía más que saber que tenía a unos padres excepcionales, escucharlos hablar de lo mucho que se esforzaron por encontrarla fue bastante doloroso, el señor Bruschweiler se sintió culpable por muchos años, ya que fue a él a quien le arrebataron a Lisa.

Él simplemente se había dado la vuelta un par de segundos para comprar un algodón de azúcar a su hija y cuando se giró, Lisa simplemente ya no estaba, recordaba la desesperación con la que había gritado el nombre de su hija, fueron los peores años de su vida, su preciosa Lily había sido tragada por la tierra.

Al ser una familia de clase baja, la policía solo la buscaron por un par de semanas, lo único que podían hacer era pegar carteles con el rostro de su pequeña Lily pero nunca lo encontraron, se prometieron que la encontrarían haciendo su propia empresa, la cual fue creciendo con el pasar de los años para cuando eso pasó, ya habían pasado 5 años y la esperanza de poder encontrarla era cada vez más baja.

La pareja se mantuvo firme, ninguno tenía planeado darse por vencidos, incluso si les llevaba otros 20 años, ellos la seguirían buscando. Algo que nunca pensó el señor Bruschweiler era que su Lily estaría en Corea siendo una empresaria exitosa pero justo ahí la había encontrado. En dónde menos lo esperó.