Realidad

1.9K 343 24
                                    


Midoriya corría desesperado, ¿Cuánto tiempo llevaba corriendo? No lo sabía, pero esa presión en su pecho solo le dificultaba las cosas. Se sentía traicionado. Fue un estúpido, estaba decepcionado de sí mismo y del villano.

Ni siquiera sabía hacia donde corría, solo quería correr y pensar que milagrosamente llegaría al pueblo y podría detener a esos hombres. ¿Cómo es que Shigaraki había sido capaz de decir que cambio una vida por otra? 

Lo había dicho de una forma tan despreocupada.

¿Acaso sería capaz de llegar a tiempo? Sentía sus ojos humedecerse al pensar en que no lo lograría. 

Llego al mismo lugar donde había confiado en el villano, pero como pensó, no había ni rastro de aquellos hombres. ¿Por dónde ir?

-Te dije que no confiaras en él.

-¿Kiseki-kun?- Kiseki se acercó y abrazo a Izuku. Midoriya no se movió, podía sentir la reprimenda en la voz de Kiseki pero también se escuchaba claramente su preocupación -Kiseki-kun dime dónde se encuentra el pueblo, por favor.

-No, ellos trataran de usarte. Creen que las personas extravagantes son los mejores sacrificios. Ya te lo había dicho ¿verdad? Tienes unos hermosos ojos y eres joven, ellos no te dejaran marchar. Solo quédate en la cueva hasta que todo pase y olvídate del exterior ¿sí?

Esa mirada. ¿Qué le trataba de transmitir? ¿Acaso decía que se resignara? ¿Le decía que había sido un inútil e iluso? ¿Cómo es que no entendía su preocupación?

-Kiseki-kun. Solo dime hacia dónde ir, te lo suplico- Ahora ya estaba llorando. Era horrible sentir impotencia y culpa. Si All Might lo viera se sentiría totalmente decepcionado, ¿Cómo pudo ser tan iluso? ¿Cómo pudo ser tan débil? –Por favor... solo dime... por favor Kiseki-kun... por favor.

-Vas a morir.

-Por favor...Por favor-

-¡Escúchame, sacrificándote no ganaras nada! ¿No lo entiendes?

Midoriya le ignoraba rogando por la dirección, Kiseki le miro triste y lo dejo inconsciente. Lo cargo y miro con fastidio a Tomura.

-¿Por qué no vienes arreglar lo que provocas?

-Me debías un favor.

-Tú sabías que se pondría en este estado, aun así le dijiste, eres cruel con él.

-Soy lo que soy. Yo le llevo.

Tomura se acercó y prácticamente arrebato a Izuku de sus brazos. Kiseki no objeto y lo siguió desde atrás sin decir nada, se había resignado

-¿Qué eres para él?- preguntó. No obtuvo respuesta y no le sorprendió.

Para Kiseki, Izuku debía ser su boleto de escapatoria. El acto que le permitiera dejar ese lugar para siempre, sin tener que mirar atrás, pero el chico lo había salvado y le habían quitado la soga del cuello sin que se lo pidiera. Estaba seguro que el tipo que lo cargaba también había tratado de hacerle algo cruel al menor. No sabía qué, pero sabía que ambos eran parecidos en ese aspecto. 

También entendía que ambos se sentían en deuda con el más bajo.

Bufo y miro la espalda de Tomura. ¿Qué podía hacer? Un lado de él le decía que fuera a entregarse -El lado estúpido e impulsivo, aunque también era su conciencia o moral, como sea- Pero otro, le decía que ignorara todo y se mantuviera lejos de los problemas.

-Cuando Izuku despierte, tratara de irse nuevamente ¿verdad?- le preguntó. El villano gruño en respuesta, una respuesta afirmativa.

Kiseki se posiciono frente al villano. Se acercó al pecoso y acaricio los cabellos del chico, Shigaraki frunció el ceño pero antes de poder quejarse el otro lo abofeteo haciendo que girara el rostro.

Inmediatamente esquivo una patada del villano, divertido por su reacción tan molesta y predecible. 

Le había golpeado despacio, o eso creía, no sabía medir su fuerza con lo humanos.

-Eso fue por haberlo lastimado- se excusó, mirando a Izuku. Se inclinó levemente y beso una de las mejillas pecosas -No me gusta que esté cerca de tipos como tú, pero se pondrá triste si te hago algo. Se preocupa por ti, deja de lastimarlo.

-No tengo que hacerte caso, maldito friki.

-No importa si no me haces caso, con el tiempo tú mismo dejaras de hacerlo llorar- le miro y sonrió burlón. Sonrió como quien sabe el secreto vergonzoso de alguien -Si no te preocuparas por él, no hubieras corrido tras él.

Shigaraki no dijo nada y Kiseki se burló. Comenzó a caminar por el lado contrario, hacia su antiguo "hogar".

-Por cierto, usas palabras muy extrañas deberías aprender hablar.

-Si se llega a despertar y no te ve, te buscara.

-Llévalo lejos de aquí. Dile que no se preocupe por mí, no soy como él, no tengo la intención de morir por otros.

No dijeron más, siguieron caminando cada uno por su lado. Shigaraki sintió al pecoso acurrucarse más cerca de él. Apenas podía verlo, no cargaba una lámpara.

Caminaba despacio para no tropezar y trataba que el chico estuviera cómodo.

Ignoraba la leve picazón por el golpe de Kiseki.

Su acompañamiento, eran los leves balbuceos que Midoriya soltaba. Le gustaban esos sonidos, pequeños y adorables.

Su inesperado buen humor desapareció cuando escucho un balbuceo demasiado claro. "All....Might" había dicho el pecoso, haciendo que su repudio y odio salieran a relucir. Tuvo la pequeña idea de soltar al Izuku y marcharse pero, realmente solo fue una idea que paso por su mente y desapareció con rapidez.

Ya había aceptado que, en el fondo terminaría regresando por él.

. . .

Siguió caminando, refunfuñaba bajo para no despertarle. Nuevamente lo sintió acurrucarse. Cada vez que Izuku hacia esa acción sentía una pequeña calidez, que le hacía querer acercarse de igual manera.

-¿Cómo se te ocurre salir corriendo sin tener idea de donde estás? Además, pides ayuda al tipo que trato de secuestrarte, y para remate no me dices nada- detuvo sus palabras y continúo luego de suspirar. Apretando inconscientemente el agarre en el cuerpo más pequeño -Estaba esperando que me gritaras, incluso que me golpearas o me regañaras. Pero en lugar de eso, te fuiste y me dejaste atrás. Es molestó, cuando me di cuenta ya estaba corriendo tras de ti con la extraña sensación de que desaparecerías.

Midoriya hundió su nariz en el suéter de Tomura, inhalando y exhalando con un suspiro que estremeció al villano. 

Shigaraki soltó un bufido y sonrió mientras llevaba al chico de regreso a la cueva, no tenían otro lugar al cual ir.

AdversidadWhere stories live. Discover now