Descuido

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Tomura se encontraba frente al yakuza, a su lado Twice hacía gestos raros. Movió sus piernas y rasco su cuello, el yakuza le observo irritado cuando coloco sus piernas sobre la mesa y tras de él uno de sus secuaces hundió una arma contra su cráneo.

-¿De este modo trataras a tu futuro aliado?- susurro, moviendo su mano para deshacerse del enano con capucha.

-No deberías hacerme enojar- replicó, haciendo una señal para que le dejarán.

-Al final vuelves hablar. Es aburrido el solo mirarte.

-¿Dónde está Eri?

-Si hablando de eso, cambio de planes. Entregaremos a la niña cuando sepamos que no nos traicionarán.- respondió, sonriendo al ver la rabia en las mirada contraria –No tengo certeza de que no volverán a cometer la idiotez de matar y lastimar a uno de los míos, tómalo como tu primer castigo.

El yakuza enano volvió a alterarse, lanzando insultos y amenazas hacia él. Chisaki movió una pieza del juego frente a él y le miro con fastidio, en cambio su voz salió "calmada".

-¿Y qué hay de tu castigo?

-Ya iba a esa parte, te prestare los servicios de Twice y Toga. Ella vendrá en otro momento pero, hey no puedes quejarte, tú lo dijiste; Nos debes un brazo.- finalizo con un tono lleno de rencor, el ambiente era completamente tensó. Incluso Twice miraba con odio al yakuza mientras se mantenía en silencio.

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Antes de poder salir del interior del "hormiguero" se dio una alerta.

Tomura y Twice fueron notificados de que los héroes habían llegado al lugar y estaban bajando con rapidez. 

Cada yakuza se movió organizadamente hacía algún lugar. Shigaraki junto con Twice fueron enviados para "apoyar" al enano. "Quiero que me muestres la confianza que te quieres ganar" había dicho Chisaki, antes de salir de la sala sin esperar su respuesta.

-Shigaraki, ¿Qué hacemos?

-¿De qué hablas Twice? Obviamente haremos lo que queramos.

-Pero ¿Y él tiempo?

-Creo que las cosas se aceleraran. No importa de todas maneras fingir esto es demasiado complicado y no es como si estuviéramos obligados hacerlo. Incluso creo que las cosas están de nuestro lado en este momento

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Sucedió en un momento, se encontraba a punto de esquivar un ataque del tipo en la pared cuando la mata de cabellos verdosos se interpuso, destrozando la pared mientras se colocaba frente a él. 

Quedo anonadado cuando Izuku le miro preocupado y le reviso la mejilla con cuidado, entonces el tiempo se acabó y su Quirk dejo de hacer efecto.

-¡Izuku-kun ¿Me recuerdas?! ¡¿Acaso me reconociste?! ¡Pero que mirada más interesante pusiste de repente!

-¡¿Hi-Himiko Toga?!

Midoriya retrocedía sonrojado, mientras la rubia trataba de cortarle con su cuchillo. Toga detuvo sus ataques luego de unos segundos, le miro con una sonrisa y un sonrojo en su rostro.

-Dime Izuku-kun, ¿te gusta Tomura-kun?

El peliverde le vio sorprendido y la pared bloqueo la vista de la rubia, esta chisto molesta viendo el techo con un puchero. El enano no dejaba de hacer ruidos mientras exigía respuestas por el engaño.

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