A tu lado ( continuación de quizás sí, quizás no)

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Esos momentos incomodos...

Si este era uno de esos, vi por el rabillo del ojo su sonrisa, ¿a que estaba jugando?, el se bajo del auto para poder recoger a Lía. Alexandra abrió la puerta envuelta en una bata, ambos entraron, me quede viendo la puerta cerrada un par de minutos, hasta que lo vi salir con un bulto bien envuelto en una manta, y un pequeño maletín al hombro

- Mi bebe- susurré cuando ella acomodo en su sillita- pobre

- Dijo mi madre que nos estuvo esperando pero se rindió

- Pobrecita- mire la carita de mi pequeña, Christopher dio vuelta al auto para subir por su sitió –

- ¿vamos?- yo asentí, así nuevamente el auto se puso en marcha, siendo altas horas de la madrugada, no conseguimos nada de carros en la carretera para mi alivio, así que llegamos bastante rápido a la casa- mientras cargo a Lía, podrías sacar mi mochila del maletero, asentí, le entregue las llaves de la casa para que vaya entrando con Lía, mientras yo sacaba sus cosas- si que vienes preparado- le dije poco rato después cuando lo encontré bajando las escaleras, ya sin Lía en brazos, el sonrió y me guiño un ojo, su pequeño maletín estaba bastante lleno para quedarse una noche – bueno vamos que estoy muerta- ambos subimos primero hasta la habitación donde se quedaría Christopher- ya sabes dónde está el baño- sin saber que más decir- buenas noches

- Dulce – el me jalo del brazo y lo miré- descansa- se acercó a mí y me abrazó.

Cuando por fin estuve sola en mi dormitorio, seguía rígida, tenía a unos cuantos metros al hombre que me hacía sus pirar hasta el día de hoy, por el cual me temblaba todo, no era normal... el me confundía, realmente lo hacía, no sabía que quería, todo en nosotros siempre fue difícil y complicado, cuando yo trato de decirle adiós ahí está el nuevamente- suspire, me senté en la cama y me quite los zapatos, poco a poco me deshice del vestido, me puse el camisón de pijama, me fui al baño para desmaquillarme- tenía unas ganas enormes de correr donde él estaba y decirle que venga a dormir acá, conmigo, como antes, como nunca debimos dejar de hacerlo.

Christopher

Había pasado por el baño para poderme poner un buzo de pijama, lavarme los dientes, cuando vi su puerta y la luz colarse por debajo de ella, tenía un impulso muy fuerte de correr, abrir la puerta y hacerla mía... la amaba, no dudaba de eso, pero tenía miedo de lastimarla, más de lo que ya lo hago... mis pies inconscientes caminaron hasta su puerta y me quede ahí, parado, escuchando murmullos desde el otro lado, la escuche tararear, cantar, suspirar... me estaba muriendo, en ese microsegundo la puerta se abrió, dejándome helado.

me habían pillado.

- ¿Qué haces acá?

- Yo.. bueno... yo, no lo sé

- Ya... ¿no puedes dormir?

- No

- Yo tampoco- susurro mirándome a los ojos, en ellos pude ver el deseo-

Dulce

Ahí estaba el, del otro lado de la puerta, había estado caminando de un lado al otro hasta que había tomado la decisión de ir a verlo, pero cuando abrí la puerta estaba ahí, parado, sin saber que hacer... pude ver como aquel buzo se le pegaba a las piernas tonificadas, y la camiseta a los músculos del brazo, solo podía pensar en que me estrujara en esos fuertes brazos.

- ¿Qué estamos haciendo?- dije por fin-

- ¿a qué te refieres?

- Christopher, parecemos dos niños, no podemos seguir así

- Sé que tienes razón, pero

- Duerme conmigo- dije, no sé cómo eso salió de mi boca, solo sabía que no quería escuchar más palabreo de su parte- solo duerme conmigo

- Pero no podemos...

- No te estoy diciendo que nos acostemos, solo te estoy pidiendo que me abraces que hagamos como que este alejamiento de mierda no existe- me sentía una idiota casi suplicando, el no dijo nada, solo tomó mi mano y me adentró a mi dormitorio, el que tanto tiempo habíamos compartido, se quedó de pie mirando todo, estaba igual a cuando él se fue, no había movido nada, ni siquiera, había podido ocupar su lado del armario , ni que decir de sus cajones... me jaló hacía la cama junto a él, ambos nos miramos en silencio, paso su brazo por mi cintura, me trajo más, sentía su respiración al compás de la mía, era como si fuésemos uno a pesar de estar separados. Pasaba sus manos por mi pelo peinándolo, yo lo tome del brazo haciendo remolinos con mi dedo, él me sonrió, habían pequeñas acciones que solo nosotros sabíamos el significado, me acomode un poco más en el, para poder apoyar mi cabeza en su pecho. Estaba mal, seguramente terminaría sufriendo más, pero ahora no quería pensar en nada más, solo respirar su aroma, sentir su piel en mis manos.

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Gracias gracias por el aguante♥ hoy estoy un poco ida porque termino examenes y el trabajo pero bueno no puedo negarles el cap♥ así que nada esperoooo que les guste, juró juró que pensaré cosas buenas jajaja como les dije a veces no se ni que escribo, pero al menos veo que les gusta.

hoy día tan especial el cumpleaños del bebe se celebra a lo grande♥