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A las diez para las ocho el teléfono de Dulce María sonó, inundando el dormitorio con una fuerte alarma, sus ojos le pesaban y definitivamente no quería salir de la cama, pero tenía que hacerlo, además debía de llamar a Lía, ayer solo habían podido chatear un poco (con ayuda de Alex, ya que Christopher se la había pasado toda la tarde en reuniones, la abuela fue al rescate). Salió de la cama con toda la pesadez del mundo, se metió en la ducha, lista para poder despejar la mente, la cabeza le dolía ligeramente, y su cuerpo estaba como peso muerto, pero hoy sería un día agitado, así que tenía que cargar fuerzas.

Al cabo de unos diez minutos bajo el chorro de agua quitada del frio, salió envuelta en una toalla y otra en la cabeza, se acomodo en su cama mientras veía en el pequeño ropero que tenía el dormitorio su ropa ya colocada, su bikini color hueso, unos short blancos, con una camiseta de tiras turquesa sería ideal para el día, se puso las sandalias planas, las más cómodas que tenía, tomó su teléfono y marco videollamada al teléfono de Christopher, mientras se terminaba de desenredar el pelo.

- ¿Dul?- un Christopher aún dormido la saludaba del otro lado

- Hola, perdón te desperté

- No te preocupes, ¿todo bien?

- Si, quería hablar con Lía, ayer no pude hablar mucho con ella

- Si imagino, ¿Cómo va todo?, tienes una cara de cansancio

- La verdad que sí, seguro hoy será peor, ya sabes como es Ani,

- ¿es un viaje para ver preparativos o de despedida de soltera?

- A este paso ambos- los dos rieron, el tipo de confianza que tenían les daba esas libertades-

- Bueno cuídate si

- Gracias

- Espérame- puso el celular en silencio y en una posición que ella podía tener una mejor vista de aquel pecho firme y descubierto, un minuto después el celular volvía a tener ruido

- Mami- chillo una pequeña ratona del otro lado

- Hola amor, ¿Cómo estás?

- Bien, ¿tu?, ¿la estás pasando bien?, ¿te estas divirtiendo? A que no, porque no estoy yo

- Así es mi vida, ya sabes que es una locura con tus tías

- Si, mi madlina y mi tía Ani están locas, y que decir de la tía Allie

- ¿te he dicho que eres una mini vieja?

- Sip, todo el tiempo mami, mami

- Si

- ¿Cuándo vienes?

- En pocos días ¿esta todo bien?

- Sip, pero ya sabes que papá a veces es medio aburrido

- Oye- escucho a Ucker quien se había echado nuevamente en la cama , había perdido de vista, se volvió asomar en la pantalla- no soy aburrido

- Tlabajas mucho papi

- Si no trabajara no podrías tener todos los gustos

- Eso es verdad- sostuvo Dul- aunque yo también te doy tus gustitos

- Si mami también- Lía le saco la lengua- aunque mami reniega más

- Lía- sostuve riendo de las muecas de mi hija- bueno los voy dejando, si, pórtate bien con tu papá-

A tu lado ( continuación de quizás sí, quizás no)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora