🔥C A P Í T U L O 5🔥

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-Te volviste loca muchacha? Exclama Adonis remeneando a Bels para que despierte del sueño y vuelva a la fría realidad -Por no llevarte de mi consejo estas pagando las consecuencias, no interfieras en el camino del Tormento, hazte a un lado y limitate solo a servir en las faenas, este es mi último consejo para ti me dolería decir te lo dije.

¿Pagar las consecuencias? así que el señor Stormy hacía subrir a sus sirvientes y a todo aquel que no estubiera de acuerdo con su ideal. Eso es tener respeto, eso es romper los derechos humanos, todos mis seres humanos tenemos derecho a see tratados con prudencia, decencia y amabilidad, por ser el patriarca no le da el derecho o el privilegio de maltratar a los demas fisíca, emocional, mental y psicologicamente a nadie pensó Bels antes de presenciar su mano tornada de un color rojo.

-A ese "señor" tienen que someterlo al patíbulo, maltrata y humilla a los demas cuantas veces quieres exclamó observando al majordomo pasando un paño humedo encima de la mano. Sus pensamientos le hicieron ceder por necesidad pero siempre teniendo en cuenta que con ella no podrá que nadie la maltratará sin pagar las consecuencias, como dice el dicho: ojo por ojo y diente por diente.

-Descuida si te llevas de mí esto no volverá a suceder y en cuanto al señor a tenido una vida un tanto complicada y solitaria.

Pero por tener una vida complicada y ermitaña no significa que tenga que desquitar eso con los de su entorno reflexionó la joven muchacha de veinte años.

Bels tenia que añorar aquellos días donde caminaba por los pasillos de la universidad, hablar con su mejor amiga Leonard o incluso aquellos pocos dias donde veía la naturaleza luego de recostarse en el suave y verde pasto del parque. Tenía que olvidar lo que hacía llamar el "paraíso" para vivir por un largo tiempo en lo que al parecer es el mismo "infierno".

La joven haciente ante el consejo de Adonis, adoctando el señor de media edad una leve sonrisa luego de varios suspiros de alivio.

Kilsy la mujer de unos treinta y dos años de delgada contextura, enormes cejas color rubio y de ojos saltones color avellana le da un tour por cada rincón de la gran mansión Stormy, observando los enormes aposentos, con los muebles decorados de tonos entre marrón y crema, a lo lejos de reposaderas cubiertas con sabanas del mismo color de los muebles, las cortinas eran crema de una tela espesa adornada con la temática de la alcoba.

La gama de colores de las habitaciones de los huespedes describian la personalidad de la Bestia, un ser sin escrupulos y lleno de exageraciones, Bels movió la cabeza para atender a las explicaciones que la mujer de abundante cabello rubio le estaba consediendo, Bels abrió los ojos al ver que el rostro y la voz gruesa de Bernardo no salían de sus pensamientos, la joven pelinegra de mano derecha vendada con un balsamo untado se paseo hasta el baño seguido de lavarse la cara con agua templada, observando su rostro en el espejo jugando en su mente con la pregunta que se hace desde la primera vez que su mirada hizo contacto con la de Mr Stormy. ¿Porqué el rostro de la Bestia no quiera salir de la cabeza de Bels?¿Porqué se imagina a ese hombre tocando su rostro y pidiendo perdón?

Bels bofeteo aquellos pensamientos tirando a la borda aquellas preguntas, mientras se decía asi misma que no puede sentir atracción y mucho menos anhelo por aquel ser lleno de odio, resentimientos pero sobretodo lleno de demonios, esta prohibido sentir algo por una Bestia sin escrupulos y sentimientos.

¿Un hermoso y atractivo hombre con genio de un animal salvaje puede llegar a sentir amor?

Pues No, era evidente que el tormento no sentiría amor por nadie que no fuera si mismo, esa entidad inexpresiva e insipída jamás tendría manifestaciones de cariño por nadie y eso era más que evidente.

El Tormento Del Infierno©/Completa/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora