Taste || Lee Jeno

taste | 38

38: marcando territorio.

Las redes sociales de Miyoung eran como un tesoro. No publicaba demasiadas fotos muy seguido. Lo usual era que compartiera ciertas cosas con/para Jaemin, o un par de comics de una comedia satírica anticuada. Esos dibujos que verías de una persona mayor que está harta de esta generación –y de la vida–, pero según Miyoung bien hechos y, en realidad, chistosos. Ese era su estilo, y de todas formas llamaba mucho la atención. Las reacciones en sus publicaciones eran demasiadas, porque todo mundo quería ser notado por ella.

Así fuera realmente una foto suya (la cual normalmente consistía en solo su rostro, del lado derecho, y con una expresión tanto seria como malditamente atractiva que hacía resaltar sus llameantes ojos redondos), de sus hermosos e inalcanzables –de no ser Jeno o Jaemin– platillos de comida, de/con su hermano y sus amigos, o hasta incluso si era de esas caricaturas de chistes malos. Siempre tenía muchas reacciones a las cuales no les daba ni una ojeada. El mundo siempre estaba a la espera de sus publicaciones, y a ella le daba igual.

Por eso, cuando ese miércoles la normalidad del perfil de Miyoung se alteró al publicar una foto suya sonriendo de oreja a oreja junto a cierto pelinegro al que habían estado viendo a su lado estos días, dentro de un auto y quizá demasiado cerca como para ser casual, el mundo bien pudo haberse acabado.

Sus admiradores no solo venían de su colegio, sino de prácticamente todo el pueblo, y la velocidad con la cual llegaron a esa foto en específico fue alucinante. Sería casi un hecho el decir que en un día Jeno había recibido suficientes amenazas mentales de muerte como para tres personas más.

Aunque, por supuesto, estaban también sus "verdaderos admiradores", de alguna manera incondicionales. Los que solo comentaron preguntando curiosos a dónde iban, lo lindos que se veían juntos –ya fuera sospechando que eran pareja o simplemente juntos–, lo hermosa que lucía sonriendo así y diciendo que debería subir más fotos parecidas, o sencillamente lanzando cumplidos a la foto y a ellos.

Cuando Jaemin comentó, solo colocó un: "No me excluyan ahora que estoy con Junnie 🥺😩", que recibió también muchas respuestas como "aigo~, es decir que ellos están solos" y esa clase de especulaciones que Miyoung ignoró para decirle "Tú nos excluyes cuando estás junto a tu enano 👊" y acabar la discusión allí.

Minnie era posiblemente la única persona con la que usaba emojis, por cierto. Puede o no que sus chats estén llenos de todo tipo de corazones.

—¿Por qué hiciste eso? —cuestionó Jeno más que todo curioso y extrañado al ver esa millonada de notificaciones que le llegaban por culpa de la chica. Sí, estaba hasta etiquetado. Le estaban llegando un par de cumplidos raros y solicitudes que por el momento dejaría ahí quietas.

—Porque no me gusta que pueda venir cualquiera a decirte "Oppa~" en mi cara —fue su respuesta, despreocupada y como si fuera la cosa más evidente del mundo. Como si el explicarlo estuviera sobrando. Luego le hizo una seña para que encendiera su carro, y se recostó del asiento con los brazos cruzados y la mirada en el exterior a través de su ventana.

—¿Qué...? Tú... Miyoung, no puedes hacer eso —negó, aunque pasando la llave del vehículo. Su ceño estaba ligeramente fruncido, porque seguía medio perdido por su comportamiento. No sabía realmente cómo debía actuar ahora. Sentía que estaba caminando sobre arena movediza, donde debía moverse para mantenerse con vida pero hacerlo significaría lastimarla a ella, lo cual honestamente era lo último que haría.

—¿Por qué no? —refunfuñó Miyoung, ahora acomodándose para tener la espalda contra la puerta y poder ver su perfil de frente. Cruzó también las piernas sobre el asiento y lo observó lo más seriamente que pudo en busca de hacerlo sentir interrogado—. ¿Acaso tú querías que esa tipa te dijera así, ir a comer la cena que hizo su mamá? ¿O es que no quieres que muestre públicamente que estás conmigo, porque las otras chicas lo verían?