Cuarentena

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Advertencia: No.

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Otro día más en esta cárcel que se hace llamar "casa". Ya van mas de 6 meses que estoy encerrada aquí junto con mi novio, ese último detalle lo hace más soportable. Desde que empezó esto de la pandemia nos han hecho resguardarnos en nuestros hogares, prácticamente estamos en cuarentena. Mi novio, Tom, acaba de regresar de filmar un día de trabajo, como siempre le pedí que se diera un baño y echará sus prendas en el cesto de ropa, no queremos que al rato nos enfermemos de Covid-19 por no desinfectarnos. Termine de meter la ropa en la lavadora y salí del cuarto de limpieza. Subí los escalones y me dirigí a la puerta del baño. Una vez frente a ella, toque un par de veces.

-¡Tom!.-Lo llame.-¿Te encuentras bien?

-¡Si!, me falta poco, si quieres ve haciendo la cena, o... podemos salir a comprar algo.

-Yo hago la cena.-Me apresure a decir.-No te vayas a caer.

-Si, mamá.-Solté una risa y volví a bajar las escaleras.

Me dirigí a la nevera y saque los ingredientes necesarios para la pasta que pienso preparar, cebolla, dientes de ajo, queso crema, crema, jamón y mantequilla sin sal. Cerré la nevera y dejé todas las cosas en la barra. Prendí la estufa y puse agua a hervir, a continuación abrí el paquete de espagueti y lo eché a la olla junto con una cucharada de sal. Debo admitir que estar en cuarentena tiene sus beneficios, como aprender recetas nuevas, es algo a lo que me dedico últimamente, aunque estudié fotografía, solo que por ahora no tengo trabajo. Saqué la sartén y me puse a freír la cebolla junto con el ajo y la barra de mantequilla sin sal, luego de unos minutos apague el fuego y lo coloque a un lado para que se enfriara. Después saque la licuadora y me puse a licuar la cebolla junto con la barra de queso crema y el consomé de pollo. Una vez todo listo, vertí la mezcla preparada anteriormente en el espagueti, cubriéndolo completamente, para darle un toquecito especial le agregue un roció de queso parmesano.

Coloque los platos en la mesa acompañada de la jarra de agua y me senté. A los pocos minutos escuche unos pasos apresurados bajar los escalones, era Tom. Me dedico una sonrisa y se acercó.

-Huele bien, ¿Qué preparaste?

-Espagueti blanco con jamón y crema.-Conteste orgullosa.

-Se ve delicioso.-Se acercó para darme un beso, pero lo aparté rápidamente. Ah, se me olvido comentarles, desde que empezó esto, decidimos que nada de besos sería lo ideal, no es que seamos payasos, es solo que queremos cuidar nuestra salud, pero aparentemente alguien lo olvidó.

-Nada de besos.

-Pero...-Lo interrumpí.

-Shh.-Coloque mi dedo índice en sus labios.-A comer que se te enfría.

-Bien.-Bufó y se sentó a regañadientes.

-Y bien... ¿Como te fue? .-Pregunté metiendo algo de pasta a mi boca.

-Hay días mejores.

-¿Osea que te fue mal?

-Ni bien ni mal,... Promedio.

-Oh, bien.

-Y a ti, ¿te fue bien sola en casa?

-Digamos que ya me acostumbre, sólo un poquito.-Dije lo ultimo en español

-Bien, sólo un poquito.-Repitió.

-¡Oye!, lo hiciste bien, veo que mejoraste en tu acento español.-Lo felicite.

-Si, sobre eso... No se que significa, solo lo repetí.-Contesto apenado.

-Bueno, solo un poquito significa un poco, o casi nada, ¿CA pichi?

-Ahh, de acuerdo.

-Pero todavía tenemos que practicar tu español, tienes mucho por aprender.

-¿Me puedes recordar porque tengo que aprender a hablar español?

-Porque cuando tengamos a nuestros hijos.-Tom se atraganto con la comida.-Les enseñaré a hablar ese idioma y si tu no lo aprendes no les vas a entender ni pío.

-...

-¿No vas a hablar?

-¿Ya tienes nuestra vida planeada?

-No totalmente, solo lo único que tengo planeado es estar contigo toda mi vida.-Le agarré la mano encima de la mesa.

-Te amo.-Me sonrió.

-Y yo a ti, Tommy.

-Te quedo delicioso.-Halago levantándose de la mesa.

-Gracias, amor.

-¿Qué tienes ahí? .-Se acercó.

-¿Qué?, ¿En donde?

-Ahí.-Se acercó a mi cara y beso.

Me quedé estática y debo admitir que al inicio me sorprendió, pero después me deje llevar, no me importó nada y le seguí el beso. No saben cuánto extrañaba besarle, sentir esos labios que me vuelven loca. Nos separamos lentamente.

-Nada de besos.-Susurre aun con los ojos cerrados y una sonrisa.

-Me lo seguiste, ¿No?.-Contestó de igual forma.

-¿Sabes qué?, Que chingue a su madre el Coronavirus.-Lo tome de las mejillas y estampe mis labios con los suyos.

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Espero que les haya encantado. Recuerden que estas historias son sólo por diversión, no todo su contenido tiene que ser real, como ignorar al nuevo Covid-19, eso no se debe de hacer, sólo lo agregue para hacerlo más divertido y temático. Tomen su sana distancia, lavense las manos con agua y jabón, y si no tienen eso a la mano, utilicen gel anticeptíco, toma estas medidas de prevención a toda costa, y sobre todo... Quédate en casa xd

One-Shots || Tom Holland.Where stories live. Discover now