El Dr. Reid está acostumbrado a investigar y resolver casos de asesinatos, secuestros y criminales, debido a su particular trabajo como Agente Especial en la Unidad de Análisis de Conducta del FBI, pero nunca antes se había sentido con la necesidad...
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Normalmente, Richmond es una ciudad bastante tranquila, claro que como en todos los lugares había complicaciones en cuestiones de seguridad, pero a pesar de eso, suele ser un agradable lugar para vivir, estudiar, e incluso vacacionar.
Era por eso que a Lauren y Louis Morrison les gustaba tanto.
Más allá de que ambos hubiesen nacido en Richmond, los dos habían coincidió al irse a estudiar a Chicago, donde a los pocos años decidieron contraer matrimonio y tras Louis heredar la empresa de bienes y raíces de su padre, regresaron a Richmond donde tuvieron a su primera hija, Cassandra.
Eran una familia feliz, no había nada que Cassandra no amara más que nadar en la piscina, leer libros en los columpios y pasar el tiempo con amigos a quienes consideraba familia, porque solo tenía a sus padres. No había tíos, tías o primas; aunque con el paso del tiempo, hubo quienes se ganaron ser llamados de esa forma.
Cuando tan solo tenía once años, sus padres le dieron una noticia en donde le informaron que tendría un hermanito o hermanita, y aunque eso al principio no había sido algo muy emocionante para ella, cuando se enteró de que serían dos (gemelos) las cosas cambiaron.
Y no solo para la familia, principalmente cambiaron en Cassandra quien cada vez se sentía un poco más perdida en el mundo ya que su padre y su madre hacían lo que podían para ajustar su apretada agenda al trabajo y a la convivencia familiar, que se enfocaba más que nada en los gemelos Michael y Matthew, quienes eran los más pequeños.
Claro que Cassandra se descarriló un poco, pero con el apoyo de sus seres queridos logró encontrar el balance que tanto estaba deseando.
Esa parte de su balance era dejar Richmond y cumplir sus sueños de irse a estudiar a Nueva York, donde sus padres le dieron todo su apoyo para que ingresara a la universidad de Columbia.
Se podría decir que vivía en tranquilidad, o al menos, ella sí lo creía, porque tenía buenas notas, trabaja medio tiempo como niñera por que le gustaba generar sus propios ingresos (a pesar de que su padre depositará cada semana una generosa cantidad de dinero), y tenía una vida social muy activa ya que Cassandra logra hacer amigos con gran facilidad.
Y eso le hacía ignorar que detrás de las sombras, había alguien que recorría sus pisadas, una persona que se sentaba en la mesa continúa en la cafetería mientras anotaba todo lo que decía Cassandra, alguien que le dedicaba sonrisa al cruzarse e incluso le había abierto puertas sin que ella lo notara por estar ocupada llamando al teléfono, pero a quien siempre le agradecía con una sonrisa.
Él sabía absolutamente todo de Cassandra, cosas que ni siquiera ella sabía de sí misma.
Y estaba dispuesto a hacer feliz a Cassandra, cueste lo que cueste.
