ARRANGED MARRIAGE | YEONGYU |

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El mayor seguía bebiendo una y otra vez hasta terminarse sola una botella de alcohol entera.

Beomgyu reconoció al joven de la video llamada por la gorra azul que continuaba puesta en él. A su costado, dos hombres y una mujer que seguían bailando a la melodía de la canción.

— ¡¿Por qué me haces esto?! — Yeonjun continuaba gritando con otra botella en la mano. — Porque cuando estaba disfrutando de tus hermosos labios.

Beomgyu cerró los ojos avergonzado y las imágenes de ese beso en la cama de aquella noche. Como tocaba su torso desnudo mientras daba tiernos besos por el cuello del rubio. Beomgyu no pudo evitar tocar su cuello recordando esos segundos de satisfacción que había tenido.

— Yeonjun-ssi nunca más te invito a tomar. — Changbin lo miraba mientras se sobaba la sien. — Mira cómo te pones.

— déjame en paz no sabes por todo lo que he pasado estos días. — sus ojos seguían más rojos que nunca.

— ¿Esta foto? — la única mujer del lugar tomo en sus manos un cuadro que a Yeonjun le llamó la atención.

Yeonjun tomo en sus manos el cuadro. Formó una sonrisa tonta al ver la foto de Beomgyu que llevaba el ramo de rosas de la ceremonia y él agarrados de la mano. Con las yemas de sus dedos, rozó sutilmente en la imagen de Beomgyu. Un dolor en su pecho crecía y se hacía mas grande que empezaba a sentir sus ojos rojos llenarse de lágrimas.

Pudo detenerlas antes de que salieran.

— A todo esto, todavía no conozco al chico que robo tu corazón. — Menciono Changbin. — ¿Me lo presentas?

— Esta molesto conmigo.

— ¿Por qué?

Changbin se paró del sofá llegando al costado de Yeonjun.

— Yo no lo sé... — comenzó. —Estábamos tan bien, pero de un momento a otro se alejo de mí y me dolió mucho. — Maldito contrato.

— ¿Contrat...?

— ¡Yeonjunnie! — Apareció Beomgyu a su costado. Le quito al cuadro de sus manos mientras posaba su cabeza tiernamente en su hombro. — Hola, soy Beomgyu. — le sonrió al chico de gorra.

— Un gusto, soy Changbin. — Se saludaron con las manos. — Creo que esta un poco ebrio. — Ambos rieron al ver como Yeonjun sonreía bobamente mientras cerraba sus ojos.

— Creo que lo llevaré a dormir. — Sonrió. — Encantado de conocerte y por favor, discúlpalo. Él está ebrio y no sabe lo que dice.

Beomgyu lo agarró con fuerza y empezó a llevarlo hasta las escaleras. El mayor pesaba mucho más que el rubio entonces el esfuerzo de Beomgyu fue bastante para poder subir las escaleras.

Empezó a respirar con rapidez mientras botaba suspiros ahogados. Estaba cansado, era muchísimas escaleras, pero ya estaban en la puerta de la habitación del pelo gris.

— Yeonjun, porque tienes que pesar tanto. — murmuró cansado.

— Beom-gyunnie. — sonrió bobamente. — No sabía que estabas aquí conmigo. — ahora sonría mostrando sus dientes.

Abrió la puerta con mucha dificultad y lo tiró en la cama. Yeonjun soltó un quejido, pero hizo caso omiso.

Tomó uno de los bordes de las sabanas con el fin de taparlo y que no le diera frio, pero el ambiente estaba lleno a licor y apestaba muchísimo. No quería dejarlo así ya que al día siguiente podría amanecer con una resaca o peor aún.