Capítulo 10

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Como el mundo puedo cambiar en un par de días tanto para bien como para mal, pero en momentos como este instante no se que sentir con todo lo que esta pasando en mi vida, todo lo que yo creía y quería se ha ido haciendo pedazos en tan solo días, la persona que más amo me ha dejado segun ella por preferir a mi bebé, se que no estoy en edad y tampoco tengo que ofrecerle en estos momentos, además de mi amor, pero pensé que ella me entendería.

Y lo que menos imagine en mi vida es que en algún momento llegaría a conocer a mi padre o el donador de esperma por que es lo que eso es lo que considero que es el,  nunca se había preocupado por mi y cuando supo de que venia al mundo salio corriendo como un cobarde, razón por la que tampoco quiero decirle a Nick de nuestro hijo, por que no quiero que como yo mi bebé se ha rechazado por su padre, aparte de que el ya tendrá su propia familia con la chica con la que se casara.

—Camila, ¿estas bien?- Salgo de mismo pensamientos y me doy cuenta que me había quedado hida viendo un punto básico de la habitación del hospital, dirijo mi vista al señor que dice ser mi padre y trato de ser lo más seria y contenerme de mostrar cualquier otro sentimiento ya que por lo que hizo no debería ni de aceptar que este aquí.



—¿Ahora resulta que sabe como me llamo ?-Digo levantando una ceja.



—Yo siempre he estado al tanto de ti y de lo que haces-Dice con una sonrisa con una sonrisa en el rostro como si le diera risa mi comportamiento.

—No entiendo que es lo gracioso, y ¿por qué si sabia de mi hasta ahora me busca ?-Con mi pregunta logro quitarle su sonrisa y cambia su postura a una que me da ha entender que se siente incomodo, como si le doliera, se que debería sentirme mal por eso pero no es la situación.

—Camila se que estas enojada peor te pido que me dejes explicarte como fueron las cosas- se acerca un poco más- Solo eso te pido, aunque se que no tengo derecho a pedirte lo —

Lo dijo suplicando, y me hace pensar que no pierdo nada con saber su punto de vista solo que no me dejare engañar por lo que diga.

—Comienze- Suspiro.

—Muchas gracias por esta oportunidad- Dice alegre.

—No se confunda, solo no quiero remordimiento y quedarme con la duda de que mentira me dira- Digo dura.

—No es ninguna mentira la que te diré, ya veras -Se acomoda en el asiento.

—¿Cuandi empezara ?- Digo impaciente.

—Ya, veras cuando tu madre y yo nos conocimos yo estudiaba y tenia grandes planes para mi futuro pero esos sueño no solo eran los míos, también eran los de mi padre, todo hiba por buen camino, estaba todo en su lugar y hiba acorde a lo planeado, hasta que llego la chica nueva a la escuela, que con una mirada logro poner todo mi mundo de cabeza y aunque en este momento no me creas, yo encerio amaba a tu mamá con todo mi corazón, no había un día que yo no quisiera estar con ella, sabia que quería estar con ella por mucho tiempo, después de un tiempo de novios, ella y yo tuvimos relaciones pero ninguno pensó en lo que podría llegar a pasar así que todo continuo hasta unos días  antes de irme y que todos creyeran que mi viaje fuera por el embarazo de tu madre, que fue cuando me dieron la noticia de que mi padre tenia cáncer y que si no lo metia a una clínica que se especializara en esa enfermedad el moriría en poco tiempo—

Por su mirada pude ver que le dolia cada cosa que hiba pronunciando, pero no quería detenerlo, quería y merecía saber la verdad.

—Investigue y había una clínica que era la mejor, pero quedaba en Londres y como se cuanto amas a tu madre se que serias capas de hacer cualquier cosa por ella, así era el amor que yo le tenia a mi padre- Aun que mi mamá me odie, el señor no se equivoco, yo daría lo que fuera pero no a mi hijo o hija- Mi padre era lo único que tenia en la vida, así que sin decirle  nada a el ,  arregle los papeles para irnos sin decirle nada a nadie, tenia pensado decirle a tu madre para ver si me podia esperar pero en mi corazón sabia que seria injusto para ella que no continuará con su vida y yo no sabia cuanto tomaria el tratamiento de mi padre y lo único que hice fue preparar una cita para nuestra despedida y ese día por más cobarde que pareciera le daría una carta donde le contaba que me iría y allí mismo le decía mis motivos- Dice con la vista perdida , como recordardando- Pero no contaba con que ella tendría una carta para mí pero no la leí—
Por un momento se quedo en silencio y en su rostro no podía leer nada, es como si estuviera y a la vez no.

Volviendo a tiWhere stories live. Discover now