¡Un senpai muy desnudo!

4.4K 504 60
                                    

Soltando un suspiro, Uzumaki Naruto observó el techo de su habitación moviendo un palillo entre sus labios. Después de haber dado de comer a casi todos los miembros del Estrella Polar, Daimio finalmente los había permitido tomar una habitación, por lo que rápidamente tanto Yukihira como él habían ido corriendo a su habitación para dejar que sus cuerpos descansaran un poco. Para ser el primer día, Naruto admitía que estaba siendo demasiado ajetreado. ¿A caso no se tomaban un descanso de las locuras en aquella academia?

Naruto se estaba arrepintiendo de haber terminado en Totsuki. De entre todos los estudiantes que vio el día de su ingreso, no pudo ver a nadie que lo atrajera a hacer un shokugeki, a emplearse completamente a fondo y sudar mientras cocinaba. Deseaba poder conocer a alguno de los Asientos y demostrarle que no todo era habilidad en la cocina.

Uzumaki Soltó un suspiro mientras usaba su lengua para remover el palillo, sintiendo como la madera se impregnaba en su boca cuando dio una chupada al pequeño palillo. Realmente se estaba aburriendo y necesitaba algo para distraerse.

Mientras que en su casa podría estar haciendo comidas a ese horario, en la academia se veía recluido en un cuarto de paredes feas, sin decoración y completamente echado sobre su cama sin poder ir a algún otro lugar por las altas horas que eran en esos momentos.

Aunque, ¿podría hacer una escapada?

Desde que fue ingresado en Totsuki, hacía apenas doce horas a lo sumo, no se contactó con ninguno de sus amigos en la escuela secundaria, por lo que estos pronto lo estarían inundando con mensajes y llamadas en la madrugada. O eso era lo más probable, viniendo de Shikamaru.

No; se dijo, soltando un suspiro. Shika es demasiado vago. A esta hora estará completamente dormido y no habrá problema con él por ningún lado, lo que me brinda unas horas antes de que me empiece a llamar.

Y era cierto. Su mejor amigo siempre fue el hijo de los Nara, compartiendo ambos el gusto por la cocina y el shogi así como pasar tiempo alimentando a Chouji, la mejor persona que él había conocido. ¿Cómo un chico que había recibido tanto bullying por parte de compañeros por su tamaño, podía terminar siendo tan bueno? De entre las personas que conocía, el Akimichi realmente era de las mejores que conocía y por la que él pondría todo su cuerpo en el fuego si llegaba el caso. Vendería todo lo que tenía y entregaría su alma si Chouji en algún momento lo necesitaba.

¿Cómo estará?

El Uzumaki cerró brevemente los ojos, dejando escapar el aliento en un suspiro.

―Naruto.

Giró la cabeza y abrió los ojos, sintiendo la penetrante mirada de Soma sobre él, con aquellos ojos que parecían casi dorados.

―¿Uh?

―Se que Daimido nos ha obligado a compartir habitación porque no había más, pero ¡¿POR QUÉ TENGO QUE SER YO EL QUE DUERME EN EL SUELO?!

Tras aquella prueba que la cuidadora de los dormitorios les puso, la señora había obligado a ambos adolescentes a compartir un cuarto, el 303 para ser exactos, indicando que el resto de cuartos estaban llenos de trastos viejos y polvo, solo contando con uno disponible para que ellos pudieran dormir perfectamente, entregando a los chicos un saco de dormir para el que quisiera dormir en el suelo, lo que había sido principalmente un palo para Naruto.

Desde que su hermano mayor Iruka lo llevó a aquella acampada, odiaba dormir en sacos de dormir. Además, lo hacían parecer una oruga como cierto profesor de su manga predilecto.

―Si quieres compartimos cama. ¡Pero te digo, no bateo para ese lado!―señaló el Uzumaki con una voz completamente plana, mirando seriamente a Soma con sus ojos de zafiro.

El ChefWhere stories live. Discover now