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Capítulo 9

- "......."

Ariel estaba tan sorprendida que no pudo ni parpadear y se limitó a seguir mirando su cara.

'¿La persona de ese momento ...... era en realidad el hijo del Gran Duque?'

'Nunca lo hubiera imaginado.'

Ya que en ese momento no se mencionaba ningún heredero en la familia La Carte.

Ella no sabía mucho de las cosas que pasaban en el mundo porque seguía a "él" y a su grupo de magos, pero incluso ella sabía eso.

La historia del Joven Gran Duque que se convirtió en el Gran Duque cuando sólo tenía veinte años.

Para entonces ya era el gran duque, la gente ni siquiera sabía que había un heredero en primer lugar.

'Y el anterior gran duque...... ¿qué le pasó?'

No era un solo un paso normal de estatus. Realmente no podía recordar qué era.

La cara del chico que tenía delante de Ariel le quitó todas las demás sospechas. Su aspecto no era para nada realista. Su pelo negro como el carbón estaba limpio, y su frente expuesta parecía dura y elegante como el yeso.

Pero el degradado de la forma de sus ojos desprendía una atmósfera peligrosa. No sólo infundía miedo a las personas que lo miraban, sino que también las hechizaba al mismo tiempo.

Sus largas pestañas cubrían sus ojos mientras miraba con arrogancia. Uno podía sentir una sensación increíble al verlo hacer esto y Ariel sintió que su corazón se detenía por un momento antes de volver a latir rápidamente.

'¿Cómo puede alguien tener este aspecto?'

Su larga nariz y sus labios rojos eran perfectos, y su mandíbula y su cuello, que no estaban lo suficientemente desarrollados como para llamarlos la de un hombre, eran blancos como los de un niño. El pequeño lunar en el borde de sus ojos también le daba un aire de niño. No sólo su rostro era diferente, sino que el aire que desprendía era sencillamente distinto al de todos los demás hombres corrientes.

Por eso podía estar segura de ello.

El chico que había visto en el pasado era la misma persona que el hijo del Gran Duque. El aspecto del hijo del Gran Duque era mucho más joven de lo que ella recordaba. Ya que era alto y tenía una fuerte aura incomparable con la de los niños normales de catorce años, pero seguía siendo un niño.

- "¿Por qué me miras así?"

Ariel respondió como si se hubiera quedado hipnotizada ante su repentina pregunta.

- "P-porque eres bastante......."

Su cara se puso roja al soltar la verdad inconscientemente. Luciano torció la comisura de los labios y sonrió.

- "Pensé que había algo malo en tus estándares de belleza, pero supongo que no era el caso".

- "¿Qué?"

Ignoró por completo la pregunta de Ariel y subió al carruaje.

- "Vamos."

En serio, sólo dice lo que quiere.

Ariel se quejó en su cabeza y se zafó de su brazo para tomar asiento en el carruaje. El asiento del carruaje era alto, así que sus pies estaban en el aire en vez de en el suelo.

Ariel movió un poco los pies en el aire. El interior del carruaje estaba en silencio. Sintió que el hijo del Gran Duque la miraba, pero no se atrevió a encontrarse con su mirada y siguió mirando al suelo.