Capitulo 12.

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No te tengo miedo.
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Todo estaba en un silencio sepulcral, nadie hablaba solo las miraban con miedo a que ellas se alejaran de ellos. Anastasia miraba a Jacob con duda en sus ojos verdes, el moreno la miraba arrepentido, ella quería una explicación pero él no sabía cómo decirle la verdad.

Evangeline miraba detenidamente a cada integrante de aquella lujosa sala,  miró los ojos preocupados de Lorraine, la mirada triste de Ernest, la mirada tensa de todos los Cullen y los lobos. Pero se detuvo en los ojos dorados de Edward Cullen, quien la miraba con, arrepentimiento, culpa y sobretodo dolor. Aquel amargo sentimiento lo sentía en todo el cuerpo. Dolor a perderla, a qué ella se alejara de él, dolor de regresar y no poder verla nunca más, dolor a qué ella no lo aceptará como era, un vampiro.

¿Quiénes son en realidad? ¿De dónde vienen?— preguntó Anastasia rompiendo aquel silencio.

>Y no salgan con que no saben de qué hablo, Porque escuchamos perfectamente lo que decían.

Edward trató de acercarse a Evangeline para tomar su mano y explicarle todo con calma, pero ella al ver lo que hacía se alejó por instinto recibiendo una mirada de dolor puro del cobrizo.

—¿Qué tiene que ver mi collar en todo esto? ¿Vienen del futuro?— preguntó temerosa la de ojos azules.

—Evangeline....

Trato de hablar el cobrizo pero recibió una mirada fría por parte de la mujer que amaba, el apuesto vampiro se alejó sintiendo como su muerto corazón se partía en dos.

—¡Queremos la verdad!— replicó Anastasia.

Todos se quedaron callados mirándose entre sí, Lorraine fue la que dió un paso hacia el frente obteniendo la atención de las princesas.

—Tu collar es como una máquina del tiempo, te puede llevar a la época que tú quieras con solo dar unos cuantos giros, nosotros terminamos aquí por un malentendido con Paul—contesto.

>También es muy poderoso.

Evangeline miró detenidamente el collar.

—Se muy bien lo que hace— murmuró en dirección a los presentes.

Lorraine se sorprendió ante la confesión que había hecho Evangeline, ella creía que la azabache no sabía absolutamente nada del poder que tenía ese collar.

—Es peligroso viajar al pasado o al futuro, si cometen algún error aquí en el pasado dañaría al futuro, y tendrían que quedarse aquí— musitó recibiendo miradas sorprendidas— o incluso podrían morir, aunque creo que eso es imposible debido a lo que son, pero tal vez puedan regresar si hacen un buen acto, aunque hay veces en las que nada se puede arreglar por más bueno que sea.

Tiempo. [Edward Cullen] ✓Where stories live. Discover now