Mingyu y Minghao acababan de salir de la oficina. Juntos cumplieron con la hora de entrega de las fotografías y además el mayor no tuvo necesidad de hablar con sus superiores, luego de que vieron el trabajo que hicieron -la mayor parte fue de Mingyu excepto revelar las películas, eso lo realizó Minghao.- Le dieron el trabajo de tiempo completo.
En agradecimiento, Minghao lo invitó a almorzar.
─ ¿y qué harás en la noche? ─ Cuestionó y tomó una porción grande de arroz con sus palillos antes de llevarla a su boca.
─ Pensaba en ir al bar del novio de Hannie, para agradecerle por ayudarme ¿y tú Mingyu-yah?
─ Voy a ir al bar pero porque me va a regalar un cartucho de juego.
Ambos se rieron.
─ ¿nos vemos allí entonces?
─ Sí pero toca llegar temprano porque el lugar se llena de gente.
Minghao asintió, no conocía muy bien el ambiente. Hannie era su amiga por correspondencia desde su último año de instituto y llevaba unos pocos meses en el pueblo, pero gracias a las fotos y lo que le contaba en las cartas desde hace ocho años, no se sentía tan fuera de lugar.
─ ¿a las cinco esta bien?
Mingyu se rio. ─ No seas exagerado Hao, a las seis y treinta esta bien.
Platicaron hasta que terminaron el almuerzo. Minghao pagó por todo, tal como había prometido y antes de que cada uno tomara su camino por separado, Mingyu le recordó que se verían más tarde para molestar a la castaña.
A las seis y treinta estaba el dúo de fotógrafos frente al bar de Seungcheol y notaron que más de la mitad del lugar estaba lleno. Mingyu tomó el brazo de Minghao para avanzar hasta la barra y no perderlo. Saludaron al mayor y se acomodaron en la mesa que les indicó.
─ Hyung.
Seungcheol hizo un sonido de afirmación mientras les preparaba las bebidas. La mesa estaba cerca así que no era necesidad gritar o levantarse para hablar con el mayor.
─ ¿dónde está Moonie? No la veo por aquí y me prometió un cartucho de juego.
Seungcheol y Minghao se rieron. El fotógrafo era muy niño con sus juegos.
─ Está en la casa de Jisoo-yah terminando los últimos detalles de la presentación de hoy.
─ ¿se va a presentar ella sola? ─ Esta vez preguntó Minghao.
─ No, los chicos le pidieron acompañamiento. ─ Respondió Jun, quien de la nada apareció y tomó las bebidas de la barra para dejarlas en su mesa.
Siguieron hablaron de cosas triviales mientras llegaban los artistas de la noche y ordenaron unos aros de cebolla fritos con sándwiches de carne. Unos minutos después entraron dos chicos, uno llevaba un estuche de guitarra en su espalda y el otro sostenía un bolso en sus manos pero detrás de ellos, venía la castaña.
Se presentaron entre todos y fueron a la tarima para arreglar los instrumentos de acuerdo a sus posiciones. Con todo listo, el chico de cabello largo y rubio llamado Jeonghan; tomó el micrófono para empezar.
─ Buenas noches.
Los clientes le devolvieron el saludo.
─ Hoy como cada jueves cantaremos para ustedes y contamos con la colaboración de nuestra linda Hannie. ─ La mencionada se levanto de la silla del piano e hizo una leve reverencia. Todos en el local aplaudieron, la adoraban. ─ Espero les guste nuestra presentación y recuerden que cualquier donativo no nos sentaría mal.
Guiñó el ojo coqueto y sonrió. La melodía del piano, los acordes de guitarra y la dulce voz del chico rubio sonaban tan a la perfección que Mingyu sintió que era llevado a un suave y reconfortante espacio donde todo su estrés y cansancio eran vaciados de su cuerpo. Tal fue la tranquilidad que Mingyu cerró sus ojos y se dejó llevar por dicha armonía.
─ Tomaremos un descanso y volveremos con ustedes. ─ Abrió los ojos y los vio bajar de la tarima. Se acercaron a la mesa de ellos y en frente de él, se sentó Jeonghan.
─ ¿qué les ha parecido nuestra presentación?
─ Maravillosa, juntos son un buen grupo. ─ Respondió Minghao.
─ ¿y a ti?
Mingyu lo miró y se dio cuenta que el chico era bastante atractivo, piel pálida, ojos café oscuro, una nariz perfilada, labios levemente gruesos y rosaditos junto a una linda sonrisa de ángel; pero no debía de pensar eso sobre un hombre, estaba mal.
─ Me ha gustado, tienes una linda voz.
─ ¿viste oppa? Te dije que vale la pena. ─ Mencionó Hannie inclinándose ya que estaba sentado y lo abrazó por los hombros.
Iba a responder pero Jun le interrumpió. ─ Recuerda que estás en falda, mocosa.
Y le dio un golpe en la cabeza. Todos en la mesa se rieron hasta Seungcheol, él cual se acercó a su novia para acariciarle la zona maltratada y regañarla por dicha acción.
─ Ustedes no me caen bien...Vamos chicos.
Volvieron al pequeño escenario y la canción que cantó el dúo Hannie, fue grandiosa.
─ " Don't worry baby
─ Just call my name I'll be there in a hurry You don't have to worry Because baby
─ There ain't no mountain high enough Ain't no valley low enough Ain't no river wide enough To keep me from getting to you, babe"
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