Capítulo 9

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Oriana

Parecía broma, pero sí, había comenzado a salir con Juan Luis, mis papás y Abril estaban felices porque ya lo conocen, Peter, bueno sabemos todos que es el boludo actual de la novela, mamá dice que mientras que yo sea feliz era lo único importante y lo soy.

-Ay falta Lali, le hubiéramos dicho que se quede a dormir -me dijo mi hermana entrando a mi cuarto.

-Si le decíamos, el boludo adoptado seguro la jodía y la pobre no se merece pasarla mal -le dije después de que se siente sobre mi cama.

-Cierto -dijo- pero ahora seguro se debe conectar para hablar por la camarita, bueno ya después pondremos al día a Lali, o sea todos sabíamos que Juan Luis y vos tenían onda increíble, pero no que él sea el que se anime para decirlo así tan de la nada -llehó la notificación de que nuestra amiga se había conectado.

-Lali! Justo -dije tras aceptar su solicitud.

-Estábamos hablando de que no pensaba al menos yo, que mi hermana esté de novia tan rápido.

-Sí, sí eso estaba pensando -dijo ella- salió rápido Juancho eh, no lo teníamos así, yo al menos que lo conozco desde que tengo 7 años.

-Ay, yo tampoco bueno vieron lo del otro día en el colegio, pero juro que me encanta, es tan lindo que no sé -les conté.

-Ayer te parecía un colombiano sin sentido del humor y hoy, terriblemente enamorada estás melli.

-No, no terriblemente, pero si me gusta, bueno basta es mi novio chicas, no sean envidiosas please.

-Era obvio que entre los dos pasaban cosas, las que se van a morir de envidia son las amigas de nuestra cuñada -habló mi hermana.

-Chicas! -habló Lali- mis papás me dijeron que Gabriela Sabatini es amiga de su mamá.

-Sí! Tía Gabi claro -le respondí.

- ¿Y cómo no me dijeron? Es un referente del tenis argentino.

-Por eso le sugerimos a mamá que les diga a mis tíos que sea ella la que te entrene amiga, tenés mucho potencial -le dijo Abril.

-Es mucho chicas, se los agradezco, pero no sé si llegue a ganarle a alguien.

-Lali, vos no solo podés ganarles a los entes del colegio -le dije tratando de despertarla.

Ese era el único defecto que tiene Lali, la inseguridad y la desconfianza en ella misma, pero no la culpo, sé que es por el entorno tan tóxico del aula de clases que no tienen personalidad propia, igual que mi hermano.

Lali

Había empezado a entrenar, a decir verdad, me gustaba, por al menos un par de horas me olvidaba de todo y era solo yo, Gabriela Sabatini es lo más como entrenadora, a pesar de ser la mejor tenista mujer argentina es muy humilde, me encantaba.

-Vas muy bien Mariana eh, de verdad para solo haber entrenado conmigo un par de veces y con tu papá, estás muy bien -me dijo.

-Gracias, estuve practicando volea que me dijo mi papá.

-Haces bien, posiblemente cuando tengas 15 podes competir en juniors.

-No sé qué tanto, para mí es solo un pasatiempo, como mi hermano entrena rugby en el colegio, no me quería quedar atrás.

-Deberías considerarlo.

Mamá me esperaba en el complejo deportivo, Gabriela le indicó sobre mi avance y cómo estaba en el entrenamiento nos despedimos y subimos al auto rumbo a pasar a buscar mis lentes, porque sí, la oculista me indicó utilizar anteojos, no era tanta la medida, pero me recomendó que era mejor usarlos seguido.

Verdadera AtracciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora