"New Angel" | NH

Capítulo 13

- Te veo el Lunes.

Estábamos en el aeropuerto, el vuelo de Alen ya había sido anunciado. 

- Envíale saludos a tu familia,  y diles que espero verlos pronto. - Sonrió con entusiasmo.

- Claro que si. - Me alza y da vueltas conmigo en brazos. Reímos. - Ahora vayan a casa y disfruten de su fin de semana. - Me extiende las llaves de su auto, no quería dejarlo aquí y pagar para que lo cuidarán así que lo dejara conmigo y por supuesto podré usarlo. - Addy. - Advierte, y me regala una de sus miradas más serias.

- ¡Oh vamos! - Hago puchero.- No le pasará nada, a parte ¿quién me enseñó a manejar? - lo apunto.

-Bueno no me considero un buen profesor. - Dice y toma la manija de su pequeña maleta. -Pero confío en ti. -Toca mi frente y me da un pequeño beso. - Nos vemos Tia, James.

Ambos se despiden con un movimiento de mano.

- ¿Y ahora...? - Dejo la pregunta al aire.

-¡Vamos por un helado!

- Un helado será.  -Sujeto su mano y salimos del lugar. 

La heladería que nos gusta se llama "Amorino Islington", es italiana y a pesar que está muy lejos de donde vivimos no perdemos la oportunidad de ir a comer algo, y que mejor ahora que estamos en verano.

El local es pequeño, con decoraciones en tonos cafés, al entrar se encuentra el mostrador y los helados, al fondo algunas mesas con bancos por si las personas desean comer su antojo ahí mismo. 

James ordeno un "Macaron al gelato", mi madre un "Gelati de coconut" y yo un "Sorbetti de strawberry".

Optamos por comerlos en el local.

Cerca de las 20:50  llegamos a nuestra calle había una SUV Ford Explored que ocupaba nuestro espacio para poder estacionarnos. Mi madre y yo compartimos miradas.

- ¿De quién es el auto?

- No lo sé.  - Apago el auto, pongo el freno de mano. - Iré a ver quién es, seguro se han confundido. 

Salgo, estaba por ir a tocar la puerta del conductor, pero visualice a una persona en nuestra puerta,  rodeo la camioneta y decido hablarle.

- Disculpa - Lo llamo.- ¿Ese es tu auto? - No estoy segura si sea de esta persona o de alguna visita de los vecinos, ya que no tenemos auto propio es normal que lo hayan estacionado ahí.

Espero por su respuesta, desde aquí no puedo verlo, pero se nota, por su físico que se trata de un hombre. Debimos dejar las luces encendidas. 

-Sí. - Responde y camina hacia mi.

Mi cuerpo tiembla.

《Me haría daño》

- De hecho estoy buscando... -  Cuando está lo suficiente cerca de mi, puedo ver su rostro.

Me reconoce y yo a él.

- ¿Qué haces aquí? - Doy un paso hacia él.  Dirijo mi vista al auto, espero que mi mamá no se preocupe y se le ocurra llamar a la policía.

-Yo.... - Empieza pero lo interrumpo.

Siento el coraje crecer a través de mi cuerpo.

Por lo que ocurrió hace 4 años, por mi descuido e ilusión,  por haber sido tan tonta,  por atreverme a viajar sin siquiera tener una base económica segura a otro país, por creer que tan siquiera eso lograría un cambio y lo peor de todo es que arrastre a mi madre conmigo a todo eso.

Ni ella, ni yo lo merecíamos. Pero al fin y al cabo fue mi responsabilidad y ahora cumplo con ella. Lo hice y sin el apoyo del hombre frente a mi.

- ¿¡Cómo te atreves a venir a mi casa!? - Grito y lo empujo.

Me olvido incluso de lo que le prometí a Alen.

Pero él no lo entiende,  y ahora mismo mi enojo me impide ver las cosas con claridad. 

- Vete. - Le pido ya con calma. - Por favor.

Es lo último que podría hacer por mi.

Alzo la mirada y él me mira confundido. Escucho la puerta de un auto cerrarse y pasos acercarse, seguro es mi madre. 

Pero los pasos son cortos y luego son rápidos como si corrieran, volteo y es cuando unos pequeños brazos rodean mis piernas, lo observo ahora nerviosa, está preocupado, sus ojos azules me lo confirman.  Acaricio su cabello negro.

- Mamá. - Susurra y observa al hombre.

"El mundo da muchas vueltas y definitivamente no esperaba que esto ocurriría así y ahora.
Es más, después de tanto tiempo esperaba que nunca sucediera,  pero eso a mi no me
correspondía."