capítulo 39

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Stiles gruño al sentir otro golpe en su rostro, pero casi de inmediato volvió a sonreír haciendo rabiar a aquel hombre que le había Estado golpeando desde que había despertó ¿cuando tiempo había Estado en ese lugar? No tenía ni la menor idea, pero suponía que más de una hora.

- déjalo - susurro sin ganas el hombre de cabello y ojos negros parecidos a los de un demonio - vamos Stiles, no te hagas el difícil, dinos como romper la barrera- sonrió con falsa calma, y le había torturado de toda las. Manera posible pero el. Chico no soltaba la lengua sin importar nada de lo que le hicieran.

Y en realidad el pecoso estaba bastante herido, su rostro ya estaba mostrando colores rojos y verdes, hasta había zonas negras, su piel estaba cortada y a nadie le sorprendería que se desmayara pronto por la pérdida de sangre, lo último que faltaba es que le quitaran alguna extremidad.

- pudrete Rafael - su voz era agitada.

- sigue y no seas suave - gruño caminando hacia fuera del lugar escuchando un grito de dolor antes de cerrar la puerta.


-¿PORQUE COÑO PERMITÍSTE QUE SE LO LLEVARÁN? - grito deán por décima vez, Peter suspiro haciendo una mueca al sentir otro dolor en su brazo derecho.

-ya te dije que el me lo pidió - dijo acercándose a Malia que se encontraba llorando a todo pulmon, los demás niños estaban a su alrededor intentando calmarla.

- es mi culpa waaaa... Mamá... Mamá - sollozos son poder evitarlo.

- no es tu culpa cachorra - dijo Peter acercándose a cargandola, suspiro mirando a los demás niños con lágrimas en los ojos. Se sento siendo rodeado de inmediato por sus cachorros - solo hay que esperar - dijo más para el que para los demás.

- ¿esperar que Peter? - pregunto su sobrino con el ceño fruncido marcado de lo habitual. Estaba preocupado, acababa de tener a su mejor amigos después de años de soledad para que a la primera el idiota saliera corriendo al peligro... Otra vez.

- al resto de su equipo, Stiles ayer me había dicho que llegarían hoy, esas criaturas no nos mataron aunque podían, no nos podemos arriesgar como si fueran otras criaturas, así que estamos esperando.

la realidad es que peter estaba igual o peor que los demas, el podia sentir el dolor que stiles estaba sufrimiento, escuchaba sus gritos en su mente como si estuviera a su lado, suspiro intentando eliminar el olor a sangre que comenzaba a llenarle la cabeza, el lobo sabia que todas esas sensaciones no le pertenecian, pero eso no les quitaba lo reales que llegaban a ser. su lobo estaba rasgando su interior, queria ir con su pareja y protegerle de todo, pero...hasta el sabia que era imposible triunfar y recuperar a stiles sin ayuda de terceros.

-¿DONDE ESTA STILES? -todos miraron a los chicos que habian llegado junto a noah. peter camino hacia ellos con malia escondida en su cuello, el instinto de ambos les estaba gritando que estuvieran juntos y en proteccion hasta que la mama de la manada llegara, los demas niños se acercaron al lobo mayor sin querer separarse mucho tiempo de el.

-¿quien de ustedes es victor? -pregunto.

un chico moreno dio un paso delante, tenia el cabello tan negro como la noche misma y tenia una mirada seria y decidida en su rostro al igual que una gran cicatriz que cruzaba toco su rostro desde su ceja derecha hasta su labio.

peter sonrio levemente. stiles lo habia descrito a la perfeccion.

-toma- dijo con simpleza tirandole un pequeño objeto que el fue capaz de sostener antes de que cayera. el hombre miro al lobo antes de abrir la mano, encontrando una pequeña gema que reconocio de inmediato, era la gema que le habia pertenecido a rafael.

-se supone que el la habia destruido- susurro una chica de cabello verde retrocediendo al igual que otros de aquel grupo.

-ese imbecil- dijo sin gracia alguna. peter gruño levemente al escuchar la mala mención hacia su pareja. el lobo de cabello negro ignoro al compañero de su alfa para luego romper la gema y tirarla en la mitad de todos.

antes de que alguien pudiera preguntar algo, los pedazos comenzaron a brillar para darla la imagen de un stiles sentado mientras sonreia nervioso.

-bueno si las clases de adrian funciona supongo que esta cosa esta funcionando- murmurro llamando la atencion de la pequeña coyote que no se habia despejado del lado de su padre.

-mama- dijo volteandose, miro con trsiteza aquel tipo de holograma que estaba delante de ella.

-tranquila malia, mama esta bien- le tranquilizo boyd mientras le tocaba el pie aprovechando ser el mas alto de los niños.

"- bien...si estan viendo esto es algo malo paso y llego el resto de mi manada- bufo mientras miraba hacia atras y se vio a un peter abrazando la almohada- no he podido dormir, tengo un maldito mal presentimiento que no me deja tranquilo...temo por mis cachorros, por peter, por mi padre, por todos...-suspiro pesadamente mientras se restregaba la mano en sus ojos- la barrera no durara mucho asi que adrian, adriana y charlott  les pido que fortalezcan la barrera, he estudiado a las criaturas del otro lado...habia un tipo que predominaban, tengo una manera para matarles, deben untar sus garras y las armas en una sustancia que tengo en el cuarto de derek, es rosa brillante y deben tomar dos gotas de una verde, es asquerosa, pero ayudara a que su regeneración se acelere mucho mas...-el chico sonrio con culpa- yo...atacare desde dentro, por favor encuéntrenseme, aun se como lo haran...pero confio en ustedes- susurro y la luz se deshizo.

-lo voy a matar- comento dean riendose sin gracia. el chico era tan suicida como el.

-creeme no seras el unico- respondio el sherrif, el amaba a su hijo y nadie lo podria negar, pero a veces se pasaba de estupido.

-primero vamos a rescatarlo- les dijo derek subiendo hacia su habitacion.

-nosotros pusimos otra barrera y creeria que por el poder demoniaco de chaltott les sera imposible entrar- comento la joven bruja rubia con una pequeña sonrisa.

de repente todos los que tenian sentidos super desarrollados se taparon la nariz al sentir un asqueroso olor llegar.

-no pense oleria tan mal- gruño victor.

-¿quien quiere ser el primero en probarla? -pregunto peter haciendo que todos dieran un paso  hacia atras, hasta su sobrino que era el que tenia aquellas botellas en mano- gallinas- 

¿¿Una manada de niños?? STETERDonde viven las historias. Descúbrelo ahora