Comida al trabajo

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Narra Tn:

Amor, ya nos vamos— Escuché la voz lejana de mi novio.

Mmju— Dije para seguir durmiendo.

¿Un besito?— Preguntó y estiré mis labios para darle un beso, sentí la presión sobre mis labios y sonreí— Descansa, nos vemos en la noche— Aún con los ojos cerrados escuché la puerta del cuarto cerrarse y dos voces en el corredor. Suspiré y me dormí nuevamente.

Desperté por una pesadilla, no la recuerdo. Odio no recordarlas. Estaba empapada en sudor, temblando y con un dolor de estómago. Tengo hambre.
Me resigné a levantarme y, aún en pijama, bajé las escaleras con lentitud. Entré a la cocina, saqué dos huevos del refrigerador, y me puse a preparar mi desayuno. En definitiva debemos comprar un reloj, no tengo idea de que hora es, y a juzgar por el sol, debe ser medio día.

Bien, ¿Ahora que?— Pregunté viendo a mi alrededor.

Comida.

Si, tal vez pueda llevarle la comida al trabajo a los gemelos— Sonreí— ¿Qué preparo?

Por mi mente pasó la cena de anoche, pero no prepararé lo mismo, muy repetitivo... ¿Qué más sé hacer? Ya lo tengo.

Tomé lo necesario y comencé a cocinar, estos dos me agradecerán.

Listo— Dije metiendo una charola al horno— Ahora, a darme un baño y a cambiarme.

Subí con emoción las escaleras, por lo menos son menos que en Hogwarts, entré a la ducha, el agua fría se siente genial cuando hace calor, ¿Verdad?

Ah— Suspiré ante el agua tan refrescante.

Cuando salí de la ducha, me enredé en la toalla y fuí a la maleta que Fred y George trajeron anoche.  Saqué un mallón negro (creo que se escribe así, no estoy segura) y una blusa holgada color celeste, me puse unos zapatos fáciles de poner y bajé a revisar la comida.

Listo— Sonreí al ver la comida lista— Ahora, ¿Dónde la llevo?— Tomé mi varita— Accio tupper— Y un traste grande vino a mi mano.

Lo destapé y puse la comida dentro, solo espero que no hayan comido esos dos. Entré en la chimenea tomando un poco de polvos flu para luego decir "Sortilegios Weasley". Bajé las escaleras del pequeño departamento de los gemelos, que llevan a la tienda. La tienda está abarrotada, como siempre. Sonreí al ver a niños de aquí para allá, hablando sobre el regreso a clases, Hogwarts, niños contando a otros sobre lo genial que es, claro, genial porque Harry ya no está ahí y el mundo mágico por están en paz.

Hey, ¿Qué haces aquí?— Preguntó una voz a mi espalda cuando llegué a abajo.

Oh, hola George, traje la comida— Sonreí— Y tenemos hambre— Dije mostrando mi pancita, cada vez el día se acerca más y más, y me aterra, además, estoy muy hinchada.

Ya veo, buscaré a Fred— Dijo riendo para dar la vuelta e irse.

¿Tn?— Una voz conocida junto con un cabello platinado se me acercaron.

Draco— Sonreí saludando al rubio, mi ex prometido— ¿Paseando por sortilegios Weasley?

¿Paseando embarazada y yo no estaba enterado?— Alzó las cejas.

Buen punto, pero... No, no se me ocurre nada— Dije riendo.

¿Qué? ¿Ya te casaste con Weasley?— Reí negando.

Hay muchos Weasley, ¿Sabías?— Pregunté aun riendo.

Celoso a la vista— Dijo Draco, me di la vuelta, los gemelos habían regresado.

Hola, cariño— Me saludó Fred algo tenso.

Hola, les traje la comida, estaba sola en casa y pues— Me interrumpió abrazándome.

Gracias, cielo— Besó mi frente.

Bien, llevaré un par de cosas , hasta luego— Se despidió Draco de mi con un abrazo, tocó mi vientre— Espero que ser el padrino de ese bebé— Y se fue.

Que ni lo sueñe— Dijo Fred en cuento se perdió de vista.

¿Quieres lasaña o pelear por quien será el padrino de este bebé?—.

Prefiero la lasaña— Dijo George.

El lo entiende— Dije riendo.

Si, claro— Me abrazó y caminamos a un pequeño cuarto, la oficina.

By: K.S

Comprometida.Where stories live. Discover now