Capítulo 19

1.5K 128 2
                                    

LA FOGATA

Elder me besaba, sin embargo, en vez de apartarlo como la primera vez, dejé que lo hiciera. Enrosqué mis brazos en su cuello mientras sentía la suavidad de sus labios. Su mano viaja de mi nuca a mi espalda, sentía los escalofríos recorrer mi espina dorsal. Admito que se sentía muy bien esto, demasiado bien. Pero su mano pasó de mi espalda a más abajo, así que rápidamente se la subí.

Elder me deja de besar para dejarme besos mojados en mi cuello, cerca de mi oído.

—Te quiero comer —susurró, fue un susurro que me dio algo de desconcierto pero se lo dejé pasar. Cuando Elder mete su mano bajo mi camisa ahí sí lo detengo y me separo.

—No debemos hacer esto —acomodé mechones de pelo sueltos atrás de mi oreja.

—No empieces con tus cosas —me dice, tratando de besarme de nuevo. Pero me alejo. Elder era extraño y además de que tenía novia.

—Discúlpame pero no soy tu juguete con quien te entretienes de vez en cuando —me crucé de brazos un tanto indignada.

Él frunce el ceño.

—¿Quién dice que eres un juguete?

—Pareciera. Solo vienes a mi cuando quieres tener algo de diversión o pasarla bien.

—Estas mal, Amara. Esto es... —tira de sus cabellos empezando a cabrearse—... No es lo que tú piensas.

—¿Entonces qué es? —espeté. No sabía por qué me besaba o por qué me decía cosas como "te protegeré" o "eres mía" si apenas lo conocía, además de que tiene novia, es un mujeriego seguramente y nos odiamos. Bueno, al menos yo lo odio.

Si lo odiaba, ¿entonces por qué le seguía el juego siempre?

"Porque te gusta" me dice mi subconsciente.

Jamás.

—No lo vas a entender. Es muy temprano para eso. ¿Nos vamos a la fogata?

Casi reí.

—¿Me llevas a la fogata de tu novia después de haberle puesto el cuerno conmigo? Sí que eres descarado.

—Melania no es mi novia, Amara —se acerca peligrosamente.

—Una de tus tantas mujeres entonces —musité.

—¿Celosa? —me inquiere con algo de diversión.

Reí.

—Ya quisieras, Elder William, ya quisieras —me separé de él y empecé a caminar— Muévete que quiero regresar temprano.

Elder camina a la par mía.

—Como quieras, francesita.

Rodé los ojos porque odiaba que me dijera así.

Cuando llegamos a la estupida fogata de la novia o lo que sea de Elder, noté que habían muchas personas. Demasiadas. Estaba ubicada en un lugar plano en el bosque, era bastante grande. Había una enorme fogata en el centro, a un lado estaban las cervezas y otro tipo de licor que no tenía idea, y la música.

Internado de lobos ✔️Where stories live. Discover now