Alguien Para Ti

Capítulo 5

Callum

Me encuentro fuera de la escuela. El manubrio de mi bicicleta está entre mis manos, el cual golpeó frenéticamente con mi dedo índice, pensando en muchas cosas.

Pienso en Rayla. En lo curiosa que me parece. En lo que hace por mi. Todo paso tan rápido, aunque también me alegra de que haya sido así.
Supongo que ella también es una de las razones por las que estoy tan nervioso o, simplemente, distraído.

Todo lo que a pasado desde que me desperté parece vago, como si no hubiera estado ahí. Despertar, desayunar, llegar a la escuela, entrar a clases... parece que solo estuve pensando en Rayla.

Me di cuenta de que habla con Soren y Claudia, ¿le habrán dicho algo de mi? ¿Aunque haya sido falso o real?

Ella ni siquiera habló conmigo durante todo el tiempo en la escuela. Sólo me miraba y me sonreía, aunque creo que hubiera sido un poco incómodo si de repente se me acerca y me habla como si nada, al menos para las personas a nuestro alrededor.

Sigo pensando en todo eso, cosas sin sentido, cuando siento una mano sobre mi hombro, ligera.

Volteo algo exaltado, solo para verla, mientras me sonríe.

—Hola— Rayla me mira— ¿llevas esperando mucho tiempo?

—Si, ¡digo! No, bueno...—trato de relajarme— acabo de llegar.

—Que bueno. Bonita bici, voy por la mía.

Ella camina hacia la entrada, donde aún permanecen un par escaso de bicicletas encadenadas a los bastidores. Se acerca a una de un color azul verdoso metálico, no es la mejor bicicleta, pero tampoco está mal.

Ella retira el seguro y lo guarda en su mochila, tardando un minuto.
Cuando esta lista, me mira y se monta en la bicicleta.

—Vamos. Voy a necesitar que me sigas el paso, así que pedalea rápido— ella se voltea y empieza a andar.

De un momento a otro, me pierdo. Ella va, habla, actúa y me ordena muy rápidamente. Quiénes me "conocen" saben que no soy muy fan de eso. Su saludo fue muy rápido y casi, sin que me diera cuenta, ya estaba algo lejos.

Me apresuro. Me pongo el casco con dificultad, subo a mi bicicleta y empiezo a pedalear, lo suficientemente rápido como para alcanzarla. Veo su cabello blanco flotando con el viento desde la parte de atrás.

Trato de mantener mi ritmo. No cansarme tan rápido, no respirar con la boca. Así que, en cuestión de segundos, la alcanzó y me posicionó a su lado lo mejor que puedo.

—Si no eres bueno en la bicicleta me lo hubieras dicho, habría encontrado otra manera de llegar— Rayla me dice.

—Claro que soy bueno, he mejorado en los últimos meses— había una buena razón para eso.

—Ok, igual no tenemos que ir tan rápido.

—¿Qué?

—Ir en auto seria muy exagerado, he ir caminando nos demoraría un poco. Así que ir en bicicleta era la mejor opción.

De repente, algo me molesta. Algo sobre ella. Por un lado, al escuchar sus palabras, me alegre ya que no híbamos a ir en auto. Pero ahora la cuestión es lo irresponsable que ella es en la bicicleta. Me preocupa que no lleva casco. Va muy relajada. Pero yo sé, más que cualquiera, que un accidente podría ocurrir y...

Me parece algo descortés de mi parte preguntarle si los elfos usan casco. Imagino que si. Nadie es inmortal.

—Hey, R-Rayla.