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Cabalgamos de regreso a la casa donde ya solo estaban Vicente, Atanasio y Axael . Supongo que los demás ya se habían retirado. Cuando llegamos a la palapa donde estaban Atanasio me ayudo a bajar del caballo. Me dio una botella de agua y estuvimos sentados ahí afuera un buen rato. Honestamente no sabía de que era la platica que tenían, estaba pensando tan profundamente que logré silenciar todo a mi alrededor. Estuve pensando un buen tiempo y me di cuenta que no tenía mi celular conmigo. Levante la cabeza y los primeros ojos que mire fueron los de Vicente que estaba sentado enfrente de mi.
Yo:"Alguien a visto mi celular."
La platica que tenían se detuvo y Axael aclaró su garganta.
Axael:"Creo que se quedó en el rancho."
Atanasio:"Para que lo necesitas?"
Yo:"Solo quería saber donde estaba."
Ovidio me miro de reojo pues estaba sentado a mi lado derecho.
Seguí en mis pensamientos distraída del ruido del exterior y mi mente regreso a los documento debajo de la almohada. Irme? Cambiar mi nombre? Dejar a mi familia y a mis amigos? Todo por que razón? Por un amor no correspondido? Se que soy más fuerte que eso, no necesito irme de aquí. Necesito tiempo para sanar por dentro. Pero no quiero dejar a todos, aunque a la vez si. Ayudan mucho a distraerme pero a la vez me recuerdan a él.
Atanasio aclaró la voz y salí de mis pensamientos dejando que el ruido a mi alrededor me consumiera.
Todos me miraban esperando una respuesta.
Atanasio:"Que si quieres cenar mariscos?"
Yo:"Claro suenan bien."
Se levantó Ovidio con dirección a su casa y Atanasio se fue tras de el. Vicente cambio de asiento enseguida de mi. Cuando Axael vio esto se levantó de la mesa alejándose un poco de nosotros.
Vicente:"Lo estás pensando, verdad?"
Yo:"Si pero ya no estoy tan segura. No vale la pena dejar a mis amigos aquí por algo que no fue correspondido."
Vicente:"Tienes razón, no vale la pena."
Pasó su brazo por mis hombros y dio un pequeño apretón.
Vicente:"Siempre voy a estar aquí para ti."
Asentí que si y recargue mi cabeza en su hombro. Me sentía totalmente en confianza aquí con ellos, completamente segura porque se que jamás dejarían que algo me pasara. Empecé a sentir los ojos pesados y para cuando menos lo pensé me quede dormida.
Sentí estar en el aire y entre abrí los ojos para ver que Vicente me llevaba cargada. No tenía la suficiente fuerza para decirle que estaba despierta para que me bajara, y ya no estaba tan segura que quería que lo hiciera. Me sentí nuevamente segura entre sus brazos.
Llego hasta la recámara donde ese estaba quedando y me dejo en la cama, me quito mis zapatos y me cubrió con la cobija. Apago la luz y salió del cuarto dejándome en duda conmigo misma. No tarde mucho en dormir pensando en que iba a pasar.
Desperté hasta el día siguiente con mucha hambre. El dolor en mi pecho aún estaba pero intentaba no pensar mucho en eso. Los documentos los había guardado en la maleta que me habían traído y ya no estaba muy segura de irme. Me bañe y después baje a desayunar. Ovidio era el único que estaba despierto, tenía un café frente a él y un cigarro entre sus dedos. Pase enseguida de el, pero no se dio cuenta estaba demasiado concentrado. No fue hasta que quite el cigarro de sus manos y lo apagué que levantó la mirada.
Yo:"Todo bien."
Ovidio:"Si, perdón. Llevas aquí mucho?"
Yo:"No, apenas entre."
Ovidio:"Tu cómo estás hoy?"
Yo:"Mejor, el aire fresco me sentí bien."
Ovidio:"Cuando gustes. Quieres almorzar?"
Asentí que si y ocupé el asiento enseguida de el mientras el se levantó.
Ovidio:"Huevo en salsa?"
Asentí que si y empezó a cocinar mientras yo lo miraba.
Me levante a tomar una botella de agua y el me sonrió de lado.
Ovidio tenía una sonrisa muy bonita y algo sobre verlo concentrado me hacía feliz. Cuando termino de hacer el almuerzo comimos entre platicas sin sentido. Retire los platos y el tomo si caja de cigarrillos para prender otro.
Yo:"Porque fumas?"
Ovidio:"Me ayuda de cierta forma. Me quita los nervios."
Yo:"Pero te matan a largo plazo."
Ovidio:"De algo me tengo que morir."
Puso su cigarrillo en la esquina de su boca y yo se lo quite.
Yo:"No lo hagas, te haces daño."
Sonó el radio de Ovidio:
-Patron acaba de pasar el Chino-
Mi corazón se detuvo por el momento y Ovidio se levantó rápido y salió de su casa. En pocos minutos escuché como venía una camioneta a toda velocidad por la entrada. No sabía que hacer, para pronto bajo Vicente con cara de enojado.
Vicente:"Sube a tu cuarto mientras arreglamos eso."
Sacudí mi cabeza que no y seguí hasta la puerta.
Abrí la puerta y vi a Ovidio hablando con Rodrigo. Pareciera que Ovidio explotaría su cara roja como tomate y Rodrigo se miraba irreconocible. Sus ojeras marcadas y sus ojos tristes como nunca lo había visto.
Volteo su mirada hacia la puerta después de escuchar la puerta cerrar tras de Vicente.
Rodrigo:"Amor yo."
Yo:"Que huevos los tuyos para venir aquí después de todo."
Rodrigo:"Es que yo-."
Yo:"No. Me vas a dejar hablar a mi. Que te faltó Rodrigo? Te di todo de mi y no te importo. En donde quede yo? Nuestra relación? Que no te di? Que hice mal? Porque? Que te faltó?"
No note que estaba llorando hasta que sentí el aire en mis mejillas.
Rodrigo intento acercarse y Ovidio le puso la mano en el pecho.
Aún tenía el sentimiento en el pecho y no me pude aguantar. Me le acerque con todo el coraje del mundo. No llegue ni a la mitad del camino cuando empecé a ver los hoyos negros en mi vista.
....
*Punto de Vista de Rodrigo*
No se cuanto llevo sin dormir. Me está matando. Que hice? La lastime. Lo arruine todo. En que momento pasó? Que hice?
Cuando volví a reaccionar tomé las llaves de la camioneta y me subí. Directamente me fui al rancho de Ovidio. Pase seguridad como si nada y le pide a la troca. La necesito ver no puedo dejar las cosas así.
Llegue al frente y estaba Ovidio con la radio en mano esperándome.
Ovidio:"Que haces aquí Rodrigo? No te queremos aquí. No sabes que tanto pinche daño le hiciste a Reyna. No se lo merecía. No se ni porque vergas lo hiciste y no me importa. Aquí los dos sabemos que ella no lo merecía. Al chile la cagaste."
Rodrigo:"Crees que no se que la cague? No supe ni cómo fue. Me arrepiento de todo pero no voy a dejar las cosas así."
Ovidio abrió la boca para responder y en eso se escuchó la puerta de enfrente.
Ahí estaba mi vida entera. Con una mirada triste. Atrás de ella Vicente con la cara de empurado.
Yo:"Amor yo."
Reyna:"Que huevos los tuyos para venir aquí después de todo."
Yo:"Es que yo-."
Reyna:"No. Me vas a dejar hablar a mi. Que te faltó Rodrigo? Te di todo de mi y no te importo. En donde quede yo? Nuestra relación? Que no te di? Que hice mal? Porque? Que te faltó?"
Las lágrimas caían como cascada de sus ojos.
Que hice?
Intente acercarme y Ovidio me detuvo con su mano.
Mi princesa se acercó y a medio camino su mirada cambió. Se va a desmayar. Quite la mano de Ovidio y la time antes de que cayera al suelo.
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Vieja FresaWhere stories live. Discover now