when I kissed the teacher [intenabo]

Diciembre, hace 8 meses.

Habían pasado poco más de tres semanas desde que empezaron la dinámica de las tutorias. Tres semanas en las que Conway no se había podido sacar de la cabeza la conversación que tuvo con el rubio. Le había otorgado un pedacito de él, depositó su confianza y decidió abrirle el baúl de sus recuerdos. Y todo eso a cambio de nada, simplemente de alguien que le escuchara.

No le parecía justo.

Llevaba sopesando una idea todos esos días, tenía que hacer algo por Gustabo. Necesitaba hacerlo, de forma sutil, pero necesitaba ayudar al joven de la forma que fuera y aquello que traía en mente era lo único que se le había ocurrido de momento para llevar a cabo su cometido.

Con ese pensamiento se levantó ese miércoles por la mañana y enfundandose uno de sus trajes para poner rumbo a su destino, el cual no era otro que la cafetería en la que trabajaba Gustabo.

Tardó un cuarto de hora en llegar al lugar puesto que fue en coche. Una vez allí aparcó prácticamente en la puerta del local y se quedó ahí sentado, pensando. ¿Qué coño hacía ahí en realidad? ¿Por qué no había podido sacarse de la cabeza al rubio y la conversación que tuvieron? Y por último pero no menos importante, ¿por qué le nacía ese sentimiento de protección hacia su alumno? Agobiado por su propia mente, salió apresuradamente del vehículo dando un portazo sin fijarse en que se aproximaba un coche por el carril contiguo al suyo, provocando que frenara en seco a la vez que hacía sonar el claxon.

-¿Es que no tienes ojos en la cara o qué? Te podría haber llevado por delante imbecil, -gritó desde la ventanilla el otro conductor.

-¿Y a ti te han dado el carné de conducir en la tómbola? -preguntó sarcástico Conway a pesar de saber que el tenía la culpa, sintiendo aún latir su corazón desbocado en su pecho. -Puto gilipollas, -acabó añadiendo por lo bajo.

-¿Como me has llamado? -preguntó el sujeto al tiempo que se bajaba del coche con cara de pocos amigos. -¿Estás buscando pelea?

Conway se preguntaba como había llegado a esa situación tan rápido, el simplemente quería ir a tomar un café y ahora estaba a nada de llegar a las manos con un desconocido.

-Mira amigo yo solo quiero ir a tomarme un café antes de ir a trabajar, no busco pelea ni nada parecido así que yo me largo.

-Yo creo que no, -afirmó el contrario empujando a Jack contra su propio coche, dejándolo acorralado. La gente se había empezado a acumular en la calle para mirar el espectáculo que estaban dando, pudo ver incluso a algunos sacar el móvil para, supuso, llamar a la policía en caso de que todo fuera a más.

-Oye, lo digo en serio, no quiero hacerte daño así que dejemos esto aquí antes de que nos arrepintamos, -intentó apaciguar, una vez más, la situación.

-No creo que me arrepienta de esto, -dijo a la vez que propinaba un puñetazo en la cara a Conway, dejándole un tanto aturdido.

-Bueno, tu lo has querido, -afirmó el profesor, negándose a quedarse quieto y pegándole en el estómago para dejar a su rival sin aire.

A partir de ese punto los dos se enzarzaron en una pelea, puñetazos y empujones iban y venían desde ambas partes, dando el espectáculo a todo aquel que se encontrara yendo a su trabajo o a la escuela. Esta duró unos minutos más hasta que alguien se interpuso entre ambos hombres.

-Ya está bien por hoy Freddy, ¿qué hablamos la última vez sobre las peleas en la calle? -preguntó Gustabo al otro sujeto.

-No me jodas... -dijo por lo bajo Jack al ver que el que les había separado había sido precisamente el rubio, su reputación había quedado por los suelos en cuestión de minutos.