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- Argentina

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- Argentina... ¡Argentina!

- ¡Ya voy, ma! - exclamó asustado, levantándose de su banco con exaltación. Tuvo que terminar de despertarse al oír las risas de sus compañeros e incluso la de su profesor de literatura. Estaba avergonzado, pero más estaba dormido.

- Pagina 12 - indicó con suavidad el docente, todavía sonriendo, al ver que Argentina estaba tan perdido que no sabía que hacer ni dónde estaba. No lo regañó, por lo general el niño le hacía la tarde con sus ocurrencias y torpezas.

Algo adormilado, abrió su libro y escuchó como su compañera volvía a retomar la línea en la que había dejado su interpretación.
Estaban practicando para una obra y de hecho él también tenía un papel, pero en estas escenas no aparecía, así que se había dado el lujo de descansar los ojos.

Si sabía que iba a rememorar ese recuerdo tan bonito, se hubiera escondido mejor para que no le interrumpieran.

Para cuándo volvió a cabecear del sueño, el timbre sonó y con ello, todos se prepararon para salir al recreo.

- Bien chicos, la obra se acerca. No olviden para la próxima clase. Nos vemos - saludó, mientras todos se apresuraron a salir como bestias presas de su libertad. El docente se rió de la hiperactividad de la juventud y guardó sus cosas con tranquilidad. Había notado a los adolescentes que se quedaron, por lo que agitó su mano para despedirse - adiós chicos, pórtense bien.

- Chau profe - saludó Uruguay por Argentina, quien solo agitó su mano, la otra la usaba para frotar su ojo y despertarse.

Uruguay no perdió el tiempo y caminó hasta el fondo del aula, junto con Argentina, justo donde estaba el gran ventanal que iluminaba hasta sus almas en días soleados.

- Argentina ¿Vos no dormis en tu casa o qué? - cuestionó desenroscando la tapa de una gaseosa de naranja, para darsela a Argentina y que se despierte - Estuviste durmiendo en todas las clases. Agradecé que la de matemáticas no te vió.

- Si me veía, igual no iba a decir nada, soy su preferido - replicó distraído, observando hacía el patio a la espera de que aparezca su razón de despertarse a las 7:00 todas las mañanas. Literal, se despertaba temprano solo para observarlo por su ventana.- Además, no tuve tiempo de dormir hoy.

Porque su vecino había tenido inesperadas visitas ayer.

- ¿Que? ¿Estabas imaginando tu vida ficticia con tu esposo ficticio y no hiciste tiempo para dormir? - se burló descaradamente de él. Acercándose por detrás para abrazarlo y observar, por sobre su hombro, como el patio se llenaba de más y más gente. Pudo escuchar el bufido de Argentina, pero lo ignoró.

- Mirá, primero el no es ficticio. Segundo, no dormí por otra cosa - Murmuró abultando sus labios. Descontento, sujeto la reja de la ventana, observando cómo UK abrazaba por los hombros a su novia, Francia, y hablaba con sus amigos. Ella había sido la razón por la que no pudo pegar un ojos a la noche. Tenía celos, claro que sí.

 ¡Marry Me! [ ᵁᵏᵃʳᵍ ]Where stories live. Discover now