13

2.6K 250 3
                                    


Hice una verdadera mueca.

¿Por qué la vida me seguía restregando a ese idiota?

—¿Así que tú eres enfermera? — preguntó para después tomar de su vaso de vino

—Aun sigo estudiando pero...sé muchas cosas

—Cierra la puerta — ordenó

—¿Para qué?

Volteó a verme

—Cierrala — repitió — tranquila, Matías está abajo, si tanto te doy miedo, puedes gritarle y listo, subirá de inmediato

Rodé los ojos.

Lentamente, fui cerrando la puerta.

Lo miré, él alzó su mano y con sus dedos me indicó que me acercara, y lo hice, pero a paso lento.

Pude ver más de su estudio, la parte de adentro era más acogedora, todo el piso era de alfombra roja lisa, tenía sillones de piel negro pero se veían muy cómodos, tenía una pequeña chimenea, una gran pantalla plasma y al fondo su computadora en su escritorio, sin mencionar que tenía muchos libros en sus estanterías.

Me impresionaba.

—Puedes tomar una foto, te durará más — comentó algo burlón mientras se sentaba en su sillón individual

—Es lindo, no lo niego — respondí mientras dejaba mi pequeña caja — aunque hace algo de calor

—Pues también traes tremenda cobija encima

—En casa y afuera hace mucho frío — respondí mientras lo fulminaba con la mirada.

Dirigí mis manos hacia mi cierre de la chamarra, me la quité y la deposité en el mismo sillón.
Tomé mi caja y me dirigí hacia él.

—¿Puedo acercarlo? — pregunté mientas apuntaba a una pequeña mesa de vidrio

Él asintió
Dejé la caja y la acerqué.

Él estaba sentado, yo me tuve que incar, apenas quedaba de mi vuelo.

Abrí la caja y saqué mi gel antibacterial, me puse un poco en las manos, y mientras lo hacía, lo miré.

—Vaya — suspiré — te dieron tus buenos puñetazos

—¿Me ayudarás o no?

—Uyy — susurré

🌹🌹🌹

Ya estaba terminando, en ningún momento él trató de hacer algo pero sí me miraba mucho y me hacía sentir incómoda, es decir, nuestras caras quedaban algo cerca.

—Debes tener más cuidado — dije serene mientras le limpiaba la poca sangre que tenía al lado de su ojo — me di cuenta de que tienes varias cicatrices....— pausé — listo, todo bien.

Me separé un poco de él y me voltié para poder guardar mis cosas.

—Dices que sigues estudiando...¿cuánto te falta para salir?

—Medio año — lo miré

Él alzó las cejas, se veía sorprendido.

—Tal vez debería contratarte como mi enfermera personal

Empezé a reír

—¿Cada cuándo curaría tus heridas? ¿Cada noche?

Él bufó riendo para después pararse y dirigirse a su escritorio

—Eres buena en lo que haces pero eres muy tardada

—Idiota

—Ve la hora

Abrí los ojos como plato, me dirigí al otro sillón y busqué en mi chamarra el teléfono.

Ya era casi media noche.

—Mierda — susurré

No le había avisado nada a mi mamá, me mataría seguramente.

Peace |Cillian Murphy| Donde viven las historias. Descúbrelo ahora