Capítulo cuarenta y siete.

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{Penúltimo}; maratón 4/4
''Ella sonríe, pero tiene algo dentro que le esta matando.''

Sonreí al escuchar su voz con sueño y enfado por haberla despertado a través de la otra línea. Suspiré y reí levemente.

—Hola dormilona, vamos, son las... —hice una pausa, viendo la hora—... cuatro de la tarde y tú sigues durmiendo.

—Agh, ______, me dormí muy tarde por problemas personales, no me vengas a joder ahora. —Gruñó.

—Lo siento. —Susurré tímidamente y corté por los nervios.

Vaya, sí, soy una idiota. Quise pegarme mentalmente pero el ruido del teléfono resonó en mi habitación y con mi voz temblorosa, contesté—: ¿D-diga?

—Perdón por gruñir así —alargó la 'i'— de verdad, amor mío.

Reí por su apodo.

—Está bien, perdóname por despertarte no era mi intención. Sólo te tenía una buena noticia y te quería pedir un favor. —Expliqué y ella chilló emocionada, haciéndome reír.

—Cuéntame, nena. —Habló como hombre, haciendo que riera nuevamente. Ella era única, a pesar de tener millones de problemas de igual manera podía sacarte una sonrisa, a pesar de la distancia.

—Bien, el sábado es mi cumpleaños y también el baile de primavera. Adivina quién me invitó.

—¿Sebastián estúpido Villalobos?

—Hey, no le digas así. —Reímos. —Sí, exactamente él. Y no tengo pu'ta idea de que ponerme, joder.

—Tranquila, para eso estoy yo, a la distancia, pero bueno. —alargó— En fin, mándame por twitter o por un mensaje directo fotos tuyas con las prendas que más atención te llamen, usándolas. ¿Está bien? Te espera tu estilista. —Mandó un beso y reí fuertemente.

—Oks. —Confirmé y sonreí levemente a pesar de que ella no pudiera verme. —Luego me llamas.

Corté y me dirigí al armario que tenía cerca de mi cama, sacando un vestido color celeste con bordes amarillos, tenía dos flores en la cascada que caía por arriba de mis rodillas. Me lo probé y disgusta me tomé una foto para enviársela a Marcella. Seguí probándome distintos vestidos primaverales hasta que uno llamó mi atención más que los otros. Este tapaba a la perfección mis cortes que cicatrizaban exitosa-mente. Sonreí triunfante y le mandé la foto a Marcella.

“Sin duda con ése te vez fantástica, como eres de tez blanca, se acomoda a tu piel. Me encanta, hazte un peinado alocado y te verás perfecta. :)”

Chillé de emoción.

Ya tengo lista mi vestimenta y peinado para la fiesta, ahora sólo queda esperar. Las ansias crecían y los nervios me consumían descontrolados. Sólo dos días para lo mejor, inexplicable.

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Hola 
Lo siento por no subirles este cap ayer u.u bueno es que cai en una depression mi bebe ya tiene 21 ya es "Maduro" "Normal" jaja :( bue pero aqui esta u.u 
Que tengan un buen dia :) 

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"Depression" Sebastián Villalobos y tu-1° TemporadaWhere stories live. Discover now