Capitulo 1

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- Ya sabes que día es mañana-dijo Jungkook con un tono de voz duro, apareciendo por la espalda de Jimin el cual se encontraba en la cocina preparando la cena-Espero que le hayas avisado a tu madre que se quedan con ella.

Jimin bajo la mirada, aun sin darse la vuelta para mirar a su esposo. El ya estaba a acostumbrado a quedarse todos los finde semana con su madre y los niños, debido a que Jungkook traía a sus amantes a casa para pasar la noche, ya que en un hotel no podía porque los paparazzis lo podrían pillar.

-Si, la he avisado ayer- murmuro en bajito Jimin ya que a su marido no le agradaba el sonido de su voz.

Jungkook se da la vuelta en dirección al salón, donde se encontraban sus hijos para poder jugar con ellos como acostumbraba al volver del trabajo.

-!Papi¡- hablaron sus hijos a la vez, para después saltar encima de él.
- Hola pequeñajos ¿que tal os lo habéis pasado hoy?-pregunto Jungkook a los gemelos, los cuales se encontraban colgados en sus piernas- Y mi princesa no viene a saludarme- el peli negro se agacho para coger a su pequeña con los dos niños aun en sus piernas.

-Ppapa- dijo la niña dandole un abrazo por el cuello a su padre.

Sus hijos eran lo mas hermoso que tenía Jungkook, para el eran su razón de vivir. Los gemelos tenían el pelo castaño y los ojos negros y pequeños, como los de un gatito. Mientras que su hija tenia el pelo negro y los ojos azules y grandes. El azul de los ojos de sus hija dedujo que pe pertenecían a su "marido", pero no estaba seguro ya que nunca se tomo e tiempo de mirarlo a los ojos.

-Papa, hoy Appi nos ha preparado galletas de chocolate y nos ha llevado al parque, donde hemos conocido a un nuevo amigo- contó su hijo Soobin muy emocionado.
Jungkook sonreía con cada ocurrencia que le contaban sus hijos mientras se encontraba sentado con ellos en medio de la inmensa sala, con su pequeña en medio de sus piernas, haciéndole mimos en su largo cabello negro.

-La cena ya esta lista- dijo Jimin entrando a la sala y empezó a dejar platos los platos de la cena en el comedor que se encontraba al lado de la sala.

- Vamos mis niños- levanto Jungkook a sus hijos del suelo y se dirigió a la mesa, sin ni siquiera dirigir la mirada a su esposo.

Jimin se sentó en la esquina mas lejana de la gran  mesa, debido a que a su marido no le agradaba para nada tenerlo cerca. Jungkook por el contrario se encontraba con sus hijos riendo y dando de comer a la pequeña.

El castaño miraba feliz a su esposo e hijos reír y pasarlo bien mientras comen, a pesar de que no estuviera incluido en su diversión.
-Api , la comida esta deliciosa- se dirigió su hijo Soobin con una gran sonrisa a su padre Jimin.

El de gafas levanto la mirada mirando a su hijo- Muchas gracias mi pequeño, espero que lo disfrutes mucho-le regalo una gran sonrisa y el pelinegro bufo por dentro al escuchar la voz de su marido. No toleraba escuchar su voz, siempre lo culpaba por hacer su vida infeliz.

Despues de la cena los niños y Jungkook se dirigieron al baño a cepillarse los dientes para ir a dormir, mientras que Jimin recogía la mesa y lavaba los platos que habían usado en la cena. Al terminar se dirigió a su habitación, esta era distinta a la del pelinegro, se ducho y se metió en la cama.

-Hola princesa... Si ,mañana nos vemos..... oh me tienes una sorpresa, pues ya estoy deseando verte- Jungkook se mordió el labio- Chao guapa nos vemos en la noche .-colgó la llamada y se metió en la cama, con una gran sonrisa , ya que mañana venia su chica favorita de la semana pasada, a darle lo que tanto necesitaba esta semana.Esa chica se llamaba Lisa y después de dos semanas viéndose se estaba empezando a pillar por ella, el sexo que tenían era fantástico y ademas tenían muchas cosas en común.

En la mañana Jimin se encargo de prepara todo para dirigirse a la casa de su madre, y los niños se despedían de su padre con abrazos y besos. Media hora mas tarde Jungkook se encontraba solo, se fue a dar una ducha, se puso unos bóxers y se fue a por una copa de vino. Cuando bajo escucho el timbre sonar y se dirigió hacia allá, encontrándose con la pelinegra.

- Hola guapo- saludo la chica rodeando al pelinegro con los brazos, este no dudo en poner sus manos en el trasero de la chica y atraerla para besarla con fuerza.

-Hola guapa-respondió Jungkook con una sonrisa traviesa, mientras metía las manos debajo de la falda de esta , para apretar su trasero.
-Ah!-gimió Lisa-veo que me has echado de menos.
-No sabes cuanto- sus besos bajaron al cuello de la chica, mientras sus manos levantaban a la chica para dirigirse al sofá y comenzar a desvestirse.

Pasado un rato en donde el pelinegro se encargo de embestir a la chica, para despues acabar dentro de ella. Se quedaron recostados en el sofa con Jungkook rodeando la cintura de la chica.

-Cariño, te tengo que decir una cosa, pero no se si te va a gustar mucho- dijo la pelinegra un poco nerviosa.

-Dime bebe , sabes que yo contigo nunca me podría enfadar- respondió dandole un beso en la cabeza.

-C-Creo que estoy embarazada-soltó de golpe,dejando al pelinegro en shock.
-¿e-estas s-segura?

-Me hice la prueba la semana pasada ¿Estas enfadado?- pregunto la chica mirando el rostro del hombre.

-No,cariño claro que no. Solo estoy un poco sorprendido- beso el cuello de la mujer con cariño.

- Entonces ¿quieres que tengamos este bebé de los dos?- pregunto esperanzada.

-Por su puesto nena, no hay cosa que me haría mas feliz- dijo con una gran sonrisa. A Jungkook le gustaba mucho esta chica y no dudaba en que en poco se llegaría a enamorar de ella como un loco.

-Pero como lo haremos para estar juntos, si estas casado- la chica dijo con un puchero, pero por dentro tenía una gran sonrisa.

-Eso no es problema, ya llevaba un tiempo queriendo divorciarme y ahora con mayor motivo lo voy a hacer. Cuando llegue Jimin me encargare de dejárselo claro, pero por supuesto mis hijos se quedan con nosotros.

-Nada me haría mas feliz que poder criar a tus pequeños- dijo la chica de manera falsa con una mueca en el rostro que intentaba simular una sonrisa.

Pasado el finde semana,en el cual Jimin estuvo en casa de sus padre y donde su gran amigo Taehyung le había visitado, se dirigió a su hogar con sus hijos. Hoy Jungkook no estaría por la mañana ya que trabajaba.

Al llegar a la casa se llevo la gran sorpresa de que su marido aun se encontraba ahi, despues de saludar a sus hijos les dijo que se fueran a sus cuartos que tenia que hablar con su Appi.

Jimin sentía su corazón latir muy fuerte en su pecho, pensaba que Jungkook le iba a dar una oportunidad como tanto había deseado, porque no estaba acostumbrado a que le pidiese  hablar a solas.

-Sientate -dijo el pelinegro  de manera seca.

Jimin se sentó en el sofá aun sin ser capaz de levantar la cabeza para mirar a su marido.

-Quiero que firmes esto y te vayas cuanto antes- soltó de golpe El mas alto, pasándole los papeles al castaño.

-¿Q-Que es esto?-pregunto Jimin nerviosa por hablarle a su esposo.

-Son papeles de divorcio, ya no quiero seguir contigo. Adema estoy esperando un hijo de mi amada.

Jimin sintió que el mundo se le venia encima y no sabia que hacer. Sus lagrimas empezaron a bajar por sus mejillas y no podía detenerlas. Las esperanzas que tenía de que Jungkook lo amase se fueron, dejando solo su corazón roto.

Sin ni siquiera mirar lo que ponía en los papeles del divorcio, lo firmo para complacer por ultima vez a su amado, cometiendo el gran error de cederle la custodia completa de sus hijos al pelinegro. Pero el error no solo lo cometió Jimin sino también Jungkook por no saber valorar lo que tiene delante.

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Fingir (kookmin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora