◜𝐦𝐚𝐠𝐚𝐳𝐢𝐧𝐞 | 𝐜𝐡𝐚𝐧𝐤𝐰𝐚𝐧◞

XXIX

SeungKwan esa tarde decidió no comer, fingiendo que se había quedado dormido cuando SeungCheol fue a su habitación para avisarle que la cena ya estaba lista y debía unirse al resto, pero mantuvo sus ojos cerrados y guardó silencio a pesar de haber oído al mayor llamándolo a través de la puerta, soltando un suspiro cuando SeungCheol decidió abrir la puerta para luego marcharse en silencio al verlo dormir.

Había decidido ir al día siguiente a la empresa para disculparse personalmente con WonWoo e inventar alguna excusa para poder negarse a continuar participando de las sesiones y sabía que debía prepararse porque se conocía y lo más probable es que si escuchaba a WonWoo insistirle tan solo una vez, acabaría aceptando porque así era él y siempre había tenido el mal hábito de querer complacer al resto.

Él iba a renunciar por lo que no era necesario comenzar a restringir su dieta ahora, pero aún así decidió saltarse una comida, sólo era una y lo más probable es que no importaba, no afectaría en nada hacerlo sólo una vez porque así sería, algo de una sola ocasión, algo que fue provocado al revivir las imágenes en su mente de su propio cuerpo capturado en esas fotografías una y otra vez porque durante las horas en que se encontró sólo en su habitación eso fue lo único en lo que pensó.

❐

JeongHan no quería ir a ese lugar, desde que se había encontrado con JiHoon el año anterior y supo a que se dedicaba en la empresa, se había vuelto parte de su rutina ir hasta ese piso y rondar en el área de la editorial e inmiscuirse en el trabajo que los escritores y editores realizaban ya sea yendo momentos antes de iniciar su propio trabajo o después de acabar sus sesiones fotográficas.

Muchas veces pensó en dejar de ir, sabiendo que probablemente eso era lo que JiHoon también quería porque el menor nunca había sido especialmente discreto en mostrar su rechazo, JeongHan intentaba ser su amigo y mostrarle su interés y en realidad no tenía idea sobre cómo coquetear ya que nunca lo había hecho, pero no le daba tanta importancia a los inexistentes avances en su relación como compañeros de trabajo porque el simple hecho de estar a su lado y observarlo trabajar lo hacía formar una sonrisa en su rostro que duraba por el resto del día.

Pero el recordar a JiHoon asumir que se había acostado con un alfa debido al aroma sobre él para después mirarlo tan despectivamente provocó una sensación horrible en su cuerpo, en ese momento ni siquiera fue capaz de hablar correctamente y a pesar de que fue el omega quien lo malinterpretó, él sólo quería aclarar que así no fue porque JeongHan nunca haría eso.

JiHoon formó una mueca de desagrado ─Ugh apestas a alfa─ Se quejó alejándose.

─¿No... no te gusta?─ Preguntó JeongHan intentando forzar una sonrisa.

─¿Qué?─ JiHoon lucía confundido ─Por qué habría de gustarme el olor del alfa con el que te acostaste o lo que sea que hayas hecho─ Respondió.

La sonrisa de JeongHan cayó ─Yo no, JiHoon yo no... yo nunca haría eso─ Aclaró.

Su conciencia repetía que él nunca haría eso, nunca podría siquiera pensar en... sus manos temblaban de sólo imaginarlo, de recordarlo y sentía arcadas amenazar con devolver el contenido de su estómago junto a sus piernas que apenas resistían su peso. ¿Por qué nadie le creía cuando decía que él no quería eso? si luego del incidente ocurrido en su época escolar JeongHan nunca fue capaz de permitirse ser tocado por otra persona de manera sexual, si quiera romántica.

JeongHan simplemente se obligó a mover sus piernas para salir del lugar y la sensación sólo empeoró cuando se percató de que JiHoon no dudó ni por un segundo al acusarlo de haberlo hecho y él en reacción solo pudo huir al baño a llorar como un cobarde porque eso es lo que era.

Se encerró en uno de los cubículos y su estómago se retorcio aún más cuando olisqueo su propio aroma que provenía del perfume artificial que se había roceado con la intención de impresionar a JiHoon, el olor causando náuseas que se forzó a contener y se levantó con sus piernas débiles para luego abrir torpemente la puerta que él mismo había asegurado antes, caminando hasta el lavabo para tomar el jabón entre sus manos y limpiar su cuello, hundiendo su cabeza para dejar el chorro de agua caer sobre él, pero no era suficiente.

El olor persistía en su nariz y se vio obligado a deshacerse de su abrigo, lanzándolo en el lavabo para empaparlo de agua y frotar la tela con el jabón hasta eliminar cualquier rastro del aroma tan fuerte, pero pronto se encontró frotando con agresividad sus propios brazos también, arremangando su camisa hasta sus codos para mojar su sensible piel que estaba volviéndose roja rápidamente al rasguñarla con sus uñas, pero debía limpiarse, él sólo quería sentirse limpio, no quería hacerse daño claro que no, sin embargo, no podía detenerse porque el dolor de alguna manera lo hacía sentir mejor consigo mismo, era reconfortante el ardor en su lastimada piel.

Ignorando su visión nublada por las lágrimas y el dolor que a cada momento parecía aumentar, no pudo evitar encontrar la similitud de lo que ahora ocurría con lo que sucedió esa vez cuando hace años también se encontró llorando en un baño solitario mientras intentaba de alguna manera quitarse la suciedad de encima.

Tenía miedo de siquiera cruzarse en el edificio con JiHoon y recibir sobre él otra vez esa mirada de juicio, la misma mirada que recibió de su padre, de sus supuestos amigos, de sus profesores y de sus compañeros.

JeongHan había seleccionado ese perfume con la única intención de agradarle a JiHoon y quizás atraerlo con el aroma artificial, había leído cada etiqueta y analizado cada descripción en los costosos envases mientras pensaba en cuál de ellos sería de la preferencia del omega, rociándolo sobre su cuerpo al encontrarlo luego de asegurarse que las
píldoras que tomaba habían neutralizado su repulsivo aroma natural.

Un aroma que odiaba y que le hacía mortificarse de sólo imaginar que alguien pudiera olfatearlo porque a pesar de que hace años atrás recibió tantos elogios por tener un aroma tan agradable siendo un alfa, todo cambió y ya había recibido tanto rechazo debido a la esencia en él ya que como se sabía gracias a ciertas historias, en concecuencia de aquel incidente, su olor se convirtió en uno que resultaba repulsivo tanto para alfas como para omegas.

Su destino se había vuelto solitario, JeongHan ya nunca podría entrelazar su alma a su omega destinado, no con su lazo roto porque cuando un alfa es marcado por otro alfa, la unión con su alma gemela muere provocándole a ambos una gran depresión y una persistente sensación de vacío para su parte animal y el tiempo en que el dolor se mantuvo en su corazón, sólo logró atenuarse cuando conoció a JiHoon, el omega simplemente tenía un aroma tan singular y una personalidad tan peculiar que se vio rápidamente atrapado por él y a pesar de no querer crearse falsas esperanzas, pensó que está era su oportunidad de amar y ser amado o eso creyó.

Sucio. Sucio. Sucio. Asqueroso, tan arruinado que nadie querría tocarlo nunca, su mente ahora se lo repetía una y otra vez, señalándole que por supuesto que JiHoon sabía, había visto a través de él lo que tanto intentaba ocultar y por eso no estaba interesado en él porque, ¿quién lo estaría?, sólo era un alfa asqueroso que ya ni siquiera podía ser llamado como tal, ahora era defectuoso.