el dueño de la revista más reconocida en corea decide unir a la empresa a dos de sus hijos; el mayor de ellos siendo un alfa y el menor un omega.
chan, que ha trabajado como modelo durante bastante tiempo en la revista, comienza a sentir una innega...
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SeungKwan se encuentra en este instante aferrado débilmente a la espalda de JunHui con evidente desgana y es que, si es honesto, la idea de apartarse de Chan no lo entusiasmaba para nada, sin embargo, la peor parte de separarse del menor ya había sucedido hace apenas unos momentos atrás.
Recuerda haber despertado envuelto por los brazos cálidos del alfa, siendo sostenido protectoramente contra el pecho contrario y apenas tuvo el impulso de levantarse para depositar un beso en sus labios como saludo de buenos días, oyó la puerta de la habitación ser golpeada y luego ser abierta ─Que bueno que encontré las llaves─ Canturreó en tono alegre JunHui entrando con una bolsa de papel en sus manos ─Hola, bonito─ Saludó al notar la pequeña cosita despierta que se asomaba, al contrario de Chan que dormía profundamente, pero en el momento en que intentó acercarse al omega, éste soltó un gruñido enfurruñado en su dirección lo que provocó que el alfa más joven despierte y aun adormilado, envolvió su brazo aprensivamente alrededor de la cintura de SeungKwan con recelo.
─¿Qué quieres?─ Cuestionó Chan en voz baja, pero profunda, casi gutural mientras inconscientemente ocultaba el pequeño cuerpo a su costado de la vista del alfa mayor.
JunHui alzó sus manos rendido y detuvo los pasos que había avanzado con el propósito de acercarse al omega ─Tranquilo, traje lo que me pediste─ Avisó dejando sobre la mesita de noche la bolsa que llevaba consigo.
Y luego de eso JunHui fue enviado fuera de la habitación, Chan rápidamente se puso de pie y levantó al omega de la cama, haciéndole tomar uno de los supresores mientras se encargaba de vestirlo, viéndose obligado a permitirle mantener la sudadera de la que no quería desprenderse y sin siquiera despedirse, SeungKwan también fue enviado fuera de la habitación.
Así que ahora se encuentra de camino a casa siendo llevado en la motocicleta de JunHui y a pesar de que la bruma que mantenía su mente nubosa poco a poco se desvaneció gracias al medicamento, no pudo evitar soltar un sollozo mientras hundía su naricita en la tela suave de la sudadera de Chan.
SeungKwan no se había atrevido a formular palabra alguna, demasiado confundido como para comprender en qué situación se vió envuelto junto a Chan, solo sabiendo que lo que sea que haya sido, lo extrañaba hasta que percibió un olor que lo distrajo de sus pensamientos e inconscientemente soltó un quejido en signo de disgusto.
─¿Te molesta?─ Quiso saber JunHui ─Normalmente los omegas se relajan si un alfa expande sus feromonas de esta manera, noté que estás algo inquieto─ Aclaró.
SeungKwan asintió ─No, esta bien así─ Respondió en voz bajita mientras luchaba por acomodarse, era mentira, no hacía más que causarle rechazo ─Gracias─ Dijo antes de cerrar sus ojos, quería ver a Chan y quería hablar con él, sentía que merecía una explicación porque él mismo no lograba dar con el significado de lo que había ocurrido.
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Al llegar, JunHui apagó el motor para detener la motocicleta y al voltearse levemente, notó que SeungKwan se había quedado dormido tras su espalda ─SeungKwan, ya llegamos─ Avisó, observando un rastro de lagrimas ensuciando sus suaves mejillas.
