.78.

3.7K 363 205
                                    

-Wanda... - Gimo mientras mi esposa salta una y otra vez sobre mí. Su sexo roza el mío y eso está volviendome loca. - Mierda, brujita... Necesito hacerte mía.

Veo como ella me da una sonrisa traviesa. Lo distingo incluso con la poca luz que ingresa a mi oficina. Estaba trabajando y Wanda no quiso que lo haga. Ahora estoy en el sofá y ella está rebotando sobre mí, ambas estamos desnudas.

-Te vas a quedar con las ganas... - Murmura contra mis labios y yo mantengo la presión en su cintura. - Mía... - Murmuro comenzando a lamer uno de sus rosados y pequeños pezones.

De pronto siento una lengua en mi cara, intengo quitarla. Abro los ojos y veo a mi cachorro disfrutando de verme despierta, me entrega una pequeña pelota.

Todo fue un sueño. Otro jodido sueño. Por increíble que parezca, desde que mi esposa no está, en lo que menos pensaba era en el sexo... La extraña, sí. Pero estaba acostumbrada a llorar casa vez que algo se relacionaba a ella, la perversión pasó sin más.

Ya son cuatro años sin haber tocado sí quiera un seno, supongo que está comenzando a afectarme, ya que la última semana sólo he tenido sueños follando a Wanda, en cada rincón de la casa.

Me levanto rápidamente para ir a la ducha, necesito una ducha de agua fría. No pienso bajarme la calentura de otra forma, no me excita acariciarme, necesito que... Sea ella. Es horrible.

Amaba tanto el sexo.

//...//

-¿Clint? - Sonrío al ver a mi mejor amigo de espaldas. - Oh, al fin estás aquí.

Nos abrazamos fuertemente bajo la atenta mirada de Pietro y Dasha.

-Decidí volver, no puedo estar lejos de ustedes. - Nos sonríe.

Recuerdo lo de Pietro, me siento culpable, por Clint y por Wanda. Estoy soltera hace 4 años y eso... En realidad soy viuda. Es un luto corto, me siento una cualquiera.

-¿Clint? - Él pelinegro me mira. - ¿Podemos hablar de algo? - Asiente.

Debo decirle. Sí bien aquél beso con Pietro no prosperó y he evitado pasar mucho tiempo a solas con él. La culpabilidad me carcome.

Caminamos fuera de la casa hasta que yo me decido a hablar.

-Tengo que decirte algo, y no sé como vayas a tomartelo. Ante todo quiero que sepas que me arrepiento muchísimo y no volverá a pasar... - Mi voz se ahoga en el final, creo que voy a llorar.

-Hey, hey... Nat. Relájate, somos hermanos, nada que no podamos solucionar. - Su voz es tan comprensiva, tengo un rayo de esperanza, sin embargo conociendo a Clint, dudo que no se ofenda. - Dime que sucede.

-Okay... Pietro y yo hace unas semanas nos besamos, no pasó a mayores, pero... Necesitaba decirlo. - Clint agacha la cabeza. - Lo siento...

-Está bien, Nat. Notaba que... Se traían algo. - Está molesto. - Voy a mi cuarto. - Murmuro dándose media vuelta.

La he cagado.

//...//

5 años han pasado, desde que... Mi esposa no está. Dasha y los ocho años han sido difíciles, ella simplemente está triste todo el tiempo, el terapeuta dice que no hay explicación para eso, Dasha habla de lo que siente pero ni siquiera ella sabe que la pone triste.

Pietro sigue en nuestras vidas, ha sido difícil. Él me atrae y yo a él, pero... Seamos sinceros, me gusta sólo porque mi esposa es idéntica a él. No hay otro motivo, nunca habría volteado a verlo sí... Wanda siguiera aquí.

Redhead ; scarletwidow / Wandanat.Where stories live. Discover now