Redhead ; scarletwidow / Wandanat.

.93.

Wanda's pov:

-¿Amor? - Un susurro en mi oído me despierta. Me duele la cabeza, anoche me quedé dormida llorando y no estoy de ánimos para ver a Natasha. - Cariño, te traje algo.

Me cubro con las cobijas y la ignoro. Siento que se mete bajo ellas y me abraza.

-Que te den. - Murmuro alejándome.

-Bebé... ¿A dónde vas? - Ella me observa extrañada.

-A ducharme. - La veo reír y noto que está en pijama.

-Son las 3 de la mañana. - Observo nuestro ventanal, y efectivamente está oscuro fuera. - Antes de que te crees ideas equivocadas, fui a poner combustible al auto... Y pasé por helado para ti y Dasha.

Me siento en la cama alejada de Natasha y suspiro.

-Te odio. - Murmuro y ella se acerca a mí.

-Ya lo sé. Lo lamento... - Esconde su cara en mi cuello y deja un beso en el. - No quería reaccionar así, tienes razón. Que le den al mundo y a Steve.

Eso me causa gracia, pero evito reírme, no puedo ser tan fácil de doblegar.

-¿Volverás a irte? - Ella niega. - Debes pensar en tus hijos, no te pido que lo hagas por mí.

-Lo sé, amor... Lo pensé mientras iba a por combustible y... ¿Qué me importa a mí el mundo? Mi mundo eres tú... Sólo tu y nuestra familia, cariño. - Natasha se aferra a mi cuerpo y yo sonrío ante eso. - Tú siempre vas a ser mi mundo, y sólo a ustedes debo protegerlos.

Me giro en dirección a Natalia y la jalo para juntar nuestras bocas. La necesito.

-Te odio tanto cada vez que te pones así de terca, Natasha. Quiero golpearte. - Murmuro y ella ríe besando mis labios con suavidad.

-Prometo que no volverá a pasar, cariño... - Ella suspira y toma mi cintura. - Tenía miedo de que... Sí no los ayudaba, pudiese perderlos a ustedes. Eso me volvió loca, necesitaba tomar aire.

Asiento y suspiro. No solemos pelear a menudo, ésto me había preocupado. Realmente sí.

-Ven aquí, amor. - Murmura Nat recostado su cuerpo en la cama. Gateo hasta llegar donde ella y me siento en su regazo, mi espalda reposa en su pecho. Nat dibuja con su dedo en la palma de mi mano. - Prometo no volver a escuchar a Steve...

-Prometeme que no te pondrás en riesgo. Ya no somos sólo tú y yo, somos tu, los pequeños y yo... - Ella asiente y besa mi cabeza.

-Lo prometo. Te amo, brujita. - Giro mi rostro y la beso, ese beso se transforma en algo muchísimo más apasionado.

Nat me recuesta en la cama y sube sobre mi cuerpo. Mis manos van a su trasero y ella sonríe comenzando a acariciar mi sexo sobre el pijama.

-¿Tienes ganas? - Murmura mi esposa contra mi boca.

-Muchas... Me hiciste llorar hasta dormir, ahora deberías recompensarlo. - Murmuro fingiendo tristeza.

Ella muerde su labio y puedo notar que se remueve incómoda. Eso la excitó, calentar a Natasha es tan fácil como poner voz de tonta y carita de cachorro. Ella cae rendida en nada.

-Te haré sentir mejor, bebé... - Murmura besándome. - Lo juro...

La ropa nos estorbaba, y cuando quedamos absolutamente en la nada.

Natasha comenzo a acariciarme sin preparación alguna. Sus dedos yacían en mi interior de manera lenta.

Su lengua y la mía jugaban, trataba de acallar mis gemidos con sus besos, pero era imposible.

Ella ama que yo grite lo más fuerte que pueda, pero con una pequeña de 9 años es imposible disfrutar como nos gustaría.

-Nataska...-Mi voz sale grave y ella incrementa el movimiento de sus dedos en mi interior, como la necesito. - Más rápido...

Natasha busca contacto contra mi pierna y eso me excita mucho más. Se ve jodidamente sexy cuando está necesitada.

//...//

Mi esposa me sonríe traviesa mientras bebe café desde la mesa, ambas tuvimos una gran noche. El sexo de reconciliación es increíble siempre...

-¿Mami? - Dasha come sus panqueques con crema mientras observa a mi esposa. Natasha quita su mirada coqueta y se dirige a nuestra pequeña.

-Dime, cariño. - Vuelve a beber café y yo le entrego a los gemelos su leche en los biberones.

-¿Anoche mamá y tu pelearon? - Pregunta mi pequeña y Nat se encoje de hombros.

-Cosas de adulto, tesoro. Discutimos por que cereal compraríamos. - La pequeña pelirroja la mira extrañada.

-¿Por eso mama decía "oh, mierda, Natasha, sí."? - Mi rostro cae 6 metros bajo el nivel del infierno al igual que la mandíbula de mi esposa.

Dasha continúa comiendo sus panqueques con tranquilidad y Natasha no sabe que decir. Evito cruzar mi mirada con la suya, estoy consternada y mi rostro está caliente al igual que mi abdomen debido a la vergüenza que me genera ésta situación.

-Uhm, bueno... Cariño. - Nat rasca su nuca y Dasha la interrumpe antes de que siga hablando.

-¿O jugaban videojuegos? Es que mamá decía "Oh, Natasha. Maldita sea sigue asi" - Mi pequeña golpea la mesa como ademán para demostrar la emoción con la que escuchó todo. Natasha ríe levemente y tapa su rostro. - Mami, contesta.

-Cariño, no debes imitar las groserías que escuchas. - La regaño y ella se encoje de hombros.

-Entonces no deberías decirlas mama. - Murmura y yo asiento. Tiene razón. - ¿Qué jugaban anoche?

-Bueno, cariño. No es que precisamente tu mama estuviese con un joystick en la mano, ella más bien... - La interrumpo antes de que siga.

-Estábamos jugando al uno. - Trago saliva y Nat sigue riendo.

-Pero nunca dijeron uno. ¿Nadie ganó? - Pregunta mi pequeña preocupada.

-Oh, claro que sí, amor. Ganamos ambas. - Murmura mi esposa a mi pequeña mientras me observa pasando su lengua sobre sus labios. - Mama fue la que más victoriosa salió.

-Oh, me alegro por ti, mama. Eres increíble. - Mi pequeña acaricia mi antebrazo feliz por mi aparente triunfo.

"Voy a matarte" Natasha lee mis labios y ríe.

Ella no es precisamente un aporte cuando se trata de éstas cosas. Es justamente lo contrario.

-¿Mami? Yo recuerdo a alguien que se llamaba Visión, te caía mal... ¿No? - Dasha vuelve a hablar y Nat asiente.

-Casi fue tu papá... - Murmura Nat riendo y yo la fulmino con la mirada. - Eso fue cuando tu mama recién llegó como ilegal y necesitaba casarse con alguien, entonces él se ofreció... Fue todo un asunto. Luego llegó tu sexy mami a salvar a tu mama, ella se enamoró perdidamente de mí y me amarró con... - Mi pequeña abre los ojos emocionada al oír aquella falsa historia. Oh definitivamente voy a matarla. - Me amarró con amor, y luego te tuvimos. - Natasha sonríe levantándose, besa la frente de mi pequeña y se va riendo.

-Mama no deberías haberte querido casar por interés. - Murmura Dasha con la boca llena de crema, algo muy de Natasha. Ninguna sabe comer sin ensuciarse. - ¿Visión está bien?

-¡Murió! ¡Yo lo maté! - Escucho a mi esposa gritar desde dentro.

-Es broma, él fue a criar alpacas al cielo. - Murmuro y Dasha asiente.

-Mama pero...

-Luego haces más preguntas, amor. Ahora come... - Murmuro asustada por lo curiosa que puede ser ésta niña.

Maldita sea, Natasha no puede ser normal ni siquiera por sus hijos...

Aún así la amo, pero quiero matarla.

Nota de autor:

93/100

¡Nos leemos mañana! Habrán 3 capítulos.

-Codex.