- Diecisiete -

83 18 35
                                    

• JinHee •

Volví a mirar mi celular por octava vez, hace unos minutos le había enviado un mensaje de texto a JungKook, iban tres días que no nos veíamos. Nos llamábamos en la mañana para desearnos un bonito día y luego en la noche para contarnos lo que había pasado.

Pero hoy mi despertador no funcionó, extrañé oír su ronca voz mañanera dándome los buenos días.

Cuando ya me di por vencida, tristemente salí del baño de la academia dispuesta a volver a mi clase de canto, Ange debe de estar preocupada.

Pero...

-¡Si! -grité viendo como en mi pantalla se reflejaba una llamada entrante por parte de él, por suerte no había casi nadie en los pasillos.

-Hola, bae -saludó dulcemente cuando contesté, contuve la respiración y me mordí los labios al escucharlo, era todo lo que necesitaba- ¿bae?

-Oh Dios, que bueno que me llamaste, pensé que algo había ocurrido, estuve preocupada toda la mañana, ¿que estabas haciendo?, tenía miedo de que te hubieras olvidado de mí... -solté todo de golpe junto a la respiración que había contenido antes.

Escuché su risa suave y un chasquido de lengua.

-¿Como crees que te iba a olvidar? pasé toda la mañana en JinHeelandia -reí junto a él- lo siento si te preocupé, tenía que venir a un lugar importante con los chicos, ¿que haces ahora?

-Oh -miré al frente, en lo último del pasillo estaba mi salón- en la academia, voy a mi clase, salí un momento al baño para hablarte -dije.

-Ah... ¿te falta mucho para llegar?

-¿A mi clase? -emitió un sonido de afirmación con su garganta- no, unos muy lentos diez pasos... -sonreí y suspiré con nostalgia- te extraño, y quiero verte...

-¿De verdad? hagamos un truco, cuenta los pasos que te faltan para entrar a tu salón... -reí confundida.

-¿Para qué? ¿para despedirme de ti?

-Solo hazlo, confía en -suspiré aceptando y miré mi salón, la puerta estaba abierta, podía ver a varios de mis compañeros prestar atención al frente.

-Cinco... cuatro... tres... dos... uno-

-Sorpresa, bae -y colgó.

Yo me quedé estática cuando lo visualicé frente a toda mi clase, quienes me miraban con atención apenas pasé la puerta, y él no estaba solo.

-Kang JinHee-ssi, por favor pase, la hemos estado esperando, tenemos una especial visita -me dijo mi profesor invitándome a salir de mi trance, pero no pude.

Mi cara era un completo poema, sorpresa, confusión, emoción, todo junto y ni siquiera había bajado el celular de mi oreja, cuando pude reaccionar, tragué en seco y miré a Ange, y ella... no me estaba mirando.

¡Maldita, ayuda!

-JinHee-ssi -volvió a llamarme la atención el profesor, todos mis compañeros seguían ahí, mirándome, carraspeo nerviosamente mi garganta y hago una reverencia dirigiéndome a mi puesto, no sin antes chocar miradas con JungKook.

𝒀𝑶𝑼𝑹 𝑬𝒀𝑬𝑺 𝑻𝑬𝑳𝑳 / 𝗝𝗝𝗞Where stories live. Discover now