El mafioso

Cita

Me despierto ya que me ha empezado a dar un poco de frío me giro y veo que Erick no está, en el lugar de donde debería de estar su cabeza hay un folio doblado con mi nombre, lo cojo y pone,

Buenos días, he dormido mejor que nunca a tu lado pero he tenido que salir a solucionar algo y preprarar la cita que tenemos esta noche, ponte lo que te he dejado a los pies de la cama, te amo.
E, tu mafioso

Me levanto y miro a ver que hay en los pies de la cama abro la bolsa y dentro encuentro un vestido largo de color rojo intenso y me encanta , es sin tirantes y en escote corazón, lleva unas piedras en todo el contorno del pecho y en la cintura formando un cinturón, la falda es suelta y con una raja en la pierna, sin duda es precioso.
Bajo a desayunar y solo está la cocinera,

-Buenos días Natalia

-Buenos días mi niña, que quieres de desayunar

-Me apetece algo de chocolate

-Pues justamente he preparado una tarta de chocolate

-Hay mi Natalia, como no quererte

-Te parto un trozo, y que deseas un zumo, café

-Zumo porfavor

-Aquí tienes mi niña

-Nati y mi hermano

-Ha bajado temprano a desayunar y está afuera, antes lo he visto hablar con una chica, parece que es la hija de la familia de al lado

-Vale, parece que está haciendo amiguitas, y Nati y yo nos echamos a reír.

Me paso todo el día en mi habitación, cuando subí de desayunar cojo la nota que hice con los materiales que necesitaré para empezar el nuevo curso y se los llevé al empleado que se encarga de traer las cosas a la casa.

Baje a almorzar con mi hermano y me volví a subir a la habitación ya que me quería duchar, me tire como unas dos horas en la ducha ya que me quería relajar estaba muy nerviosa, me puse el albornoz y salí de baño, ya lo tenía todo preparado en vestido, los zapatos y la claqueta ya que empieza ha hacer un poco de frío en las noches.

Me siento en el escritorio y saco el estuche de maquillaje, veo que son las ocho tengo tiempo suficiente, me pongo un poco de música para distraerme y empiezo a pintarme no muy excesivo ya que no me gusta ir muy cargada, cuando miro al espejo para echarme el corrector veo a través del espejo que en el marcó de la puerta está Erick mirándome,

-Cuanto tiempo llevas hay, le digo girandome para mirarlo

-El tiempo suficiente para saber que no se te ha olvidado nuestra cita, dice acercándose a mi

-Me gusta ese color de ojos te hace que sean más grandes, pero lo único que te ha quedado mal es esta mota de rimel que te has echado dice acercándose más a mi, ya está, te la he quitado.

Cuando Erick me toca me pongo muy nerviosa más de lo que estaba por su cercanía y sin darme cuenta me besa, cuando reaccionó se lo sigo ya que cuando ectoy con el se me olvida todo lo que pasa a mi alrededor, lo de mis padres, que dentro de un día volveré a salir a la calle a estudiar lo que quiero... Y se me sale una gota de lágrimas sin darme cuenta, Erick al darse cuenta se separa de mi y me mira preocupado,

-Que tienes, que te ocurre, he echo algo mal

-Noo todo va bien

-Emma no va bien estas llorando que te ocurre dímelo, es por el beso

-No, el beso a sido perfecto digo poniéndome roja de la vergüenza, lo que pasa es que todo lo que está pasando me viene muy grande, de tener una vida tranquila, y ahora mírame, todo es surrealista no me lo creo.

-Te entiendo como tienes que sentirte pero quiero que sepas que estoy aquí para ti, nada te pasará ni a ti, ni a tu hermano, si estáis con migo.
Sabes que te amo, eres y serás siempre mi reina.

Y por un impulso le beso, no hace falta que me diga que con el estoy segura porque lo se cada vez que lo tengo cerca, se que con el estaré mejor que en cualquier sitio.

Cuando me doy cuenta de que he sido yo la que lo ha besado me separado de él muerta de la vergüenza, no le miro a la cara ya que tengo que estar más roja que un tomate.

-Hayy Emma te has convertido en un tomatito que mona

-Erick no me mires, sal de la habitación tengo que terminar de arreglarme y vestirme si no quieres que lleguemos tarde.

-Y porque no me dejas que me quede aquí, además ya te he visto en ropa interior, por una vez más no pasará nada, no Emma

-Erick salte ya, le digo más roja creo que no tardará mucho en mi cara explotar ya que cada vez me pongo más roja.

-Vale, vale me salgo, no tardes te quiero, me dice dándome un beso antes de salir, te esperaré en el salon.

No le digo nada me siento en la silla, no he sido capaz de decirle nada, este tiempo que he estado pasando con el me he dado cuenta de que estoy mejor a su lado pero no se si es por atracción física o por qué me gusta, no quiero que se ilusione para nada ya que yo no soy de esas personas, cuando yo le diga que lo quiero también tengo que sentirlo.

Me termino de maquillar, me hago una cola y me rizo el pelo un poco, me dejo dos mechones fuera y también los rizo, me pongo mi vestido y los zapatos, cojo un bolso negro y meto la barra de labios y algo de dinero lo poco que me queda, y lista salgo para bajar al salón.

Cuando bajo las escaletas para llegar al salón veo a Mike viendo la televisión y a Nati dándole la cena a mi hermano, cuando me ve se lleva las manos la boca impresionada,

-Mi niña que guapa estas, estas preciosa

Cuando Erick y Mike la escuchan se giran y al verme los dos se quedan mirándome de arriba a abajo,

-Yyyy, que os parece, voy mal

-Hermanita si que has crecido me dice mi hermano

-No tengo palabras estas preciosa, me dice Erick

Termino de bajar las escaleras y me pongo al lado de Erick, me fijo en el y va como siempre con su traje negro y camisa blanca y como suele hace los dos botones sin abrochar, dandole ese toque especial.

-Nati nos haces una foto antes de irnos

-Claro que si mi niño

Erick me coge de la cintura y me hace que me pegue a él.

Cuando Nati acaba nos la enseña y Erick veo que la pone de fondo de pantalla.

-Bueno, nos vamos Emma, si no llegaremos tarde.

Salimos de la casa y nos montamos en un coche, dentro de el hay tres dos personas, el que será nuestro conductor y el que estará al pendiente de nosotros, es decir, nuestro guardaespaldas y el coche es blindado me ha dicho Erick.

A ver como pasamos la noche.