The Demonic King Chases His Wife [Parte 6] [Trad. al español]

Capítulo 1099: El Quinto Desafío (9)

Capítulo 1099: El Quinto Desafío (9)

Li Yaoyao estaba decidida a ganar contra Su Luo.

El tiempo pasó gradualmente.

Al final, Li Yaoyao no pudo poner más huevos de buitre en su bolsa improvisada.

Hablando en serio, los huevos de buitre todavía ocupaban mucho espacio.

"Sería genial si también tuviéramos una bolsa espacial". Li Yaoyao recordó la bolsa espacial de Nangong Liuyun, y no pudo evitar sentirse extremadamente envidiosa.

"Creo que Su Luo también tiene una". Los ojos de Situ Ming brillaron levemente.

"¿Qué? ¿Su Luo, esa pequeña zorra, también tiene una bolsa espacial?" El corazón de Li Yaoyao inmediatamente se sintió desigual.

"Debe habérselo dado Nangong, de lo contrario, con su fuerza, es imposible para ella obtenerla". Situ Ming asintió con la cabeza con certeza.

Sin embargo, cuando estaba hablando, su mirada se fijó en Li Yaoyao, prestando mucha atención a la expresión de su rostro.

A Nangong claramente no le gustaba Li Yaoyao, debido a estas circunstancias, Situ Ming decidió no darse por vencido con ella.

Lo que tenía que hacer ahora era sacar a Nangong del corazón de Li Yaoyao poco a poco, para limpiarlo. Posteriormente, se valdría del vacío para entrar.

"Su Luo, esa zorra, no sé cómo, pero consiguió que el Tercer Hermano Mayor quedara embrujado y que diera vueltas en círculos. ¡Incluso le dio una valiosa bolsa espacial!"

Ella, como la majestuosa princesa de la familia Li del Lago de Jade, ni siquiera tenía una bolsa espacial, ¿por qué Su Luo, esa pequeña zorra, debería tener una?

Li Yaoyao estaba casi enojada por los celos.

Si supiera que lo que Su Luo tenía no era una bolsa espacial, sino un espacio completo, no sabría si Li Yaoyao fallecería en el acto por los celos.

Sin una bolsa espacial, Li Yaoyao y Situ Ming solo podían tomar tantos huevos de buitre como pudieran llevar en sus brazos y en su espalda, antes de retirarse usando su ruta original.

Ya habían usado su Hierba Escarcha, si no se iban ahora, serían envenenados nuevamente.

Los últimos en retirarse fueron Su Luo y Nangong Liuyun.

Su Luo vio la pila de huevos de buitre a los pies de Li Yaoyao, y sus ojos parpadearon levemente por la sorpresa.

Li Yaoayo vio el asombro de Su Luo, su sentimiento de estar orgullosa de sí misma, se volvió cada vez más clara en sus ojos.

¡Esta vez, Su Luo, esa pequeña zorra, perdería seguro!

Justo en este momento, el espacio se retorció y esa enorme cara apareció en el aire.

"Uno de los equipos entre ustedes realmente completó la tarea mejor, por encima de la cuota, no está mal, no está mal".

Li Yaoyao enarcó una ceja, orgullosa de sí misma.

El equipo que completó la tarea por encima de la cuota era definitivamente ellos.

"El método de sacrificio de sangre es el mismo que la automutilación. Tratarse a uno mismo con tanta crueldad, sin embargo, me gusta. Jajaja--"

Este rostro que estaba en el aire estalló en una risa loca.

El espacio que los rodeaba atravesó un período de confusión. Momentáneamente, la tierra tembló y las montañas temblaron, con sonidos estrepitosos resonando.

Con gran dificultad, dejó de reír.

"Ven, entregad los bienes de esta tarea, dejad que este maestro del palacio eche un vistazo para ver quién ganó esta vez".

Los huevos de buitre eran fáciles de contar, se podía hacer de un vistazo.

Los hermanos Luo solo tenían tres.

Beichen Ying y Zi Yan solo tenían seis.

En este desafío, lo más importante era buscar en los equipos de Li Yaoyao y Su Luo el ganador.

El ganador surgiría entre estos dos equipos.

Al ver esas dos bolsas enormes junto a Li Yaoyao, el corazón de Su Luo también se sintió inseguro.

Pero, el asunto ya estaba en este punto, no había forma de cambiarlo.

¿Quién le dijo a Li Yaoyao que tuviera a Situ Ming a su lado, quien no dudó en usar su vida para pagarlo todo?

Su Luo agitó la mano y los huevos de buitre que recogió se amontonaron en el suelo frente a ella.

Estos huevos de buitre, cada uno de ellos era brillante, traslúcido y puro. Sobre ellos, una débil energía espiritual fluía por todas partes.

Si mirabas con atención, descubrirías que los huevos de buitre que se habían quedado en su espacio, eran un poco más blancos que otros que no habían estado en su espacio.

Sin embargo, nadie estaba al tanto de este minucioso detalle.

"¡Cincuenta huevos de buitre!" ¡Zi Yan gritó de sorpresa!

Con esta comparación, Zi Yan inmediatamente sintió ganas de llorar.

Su equipo solo tenía seis, ¡ah, solo seis, ah!