The Demonic King Chases His Wife [Parte 6] [Trad. al español]

Capítulo 1189: Nangong Liuyun despierta (4)

Capítulo 1189: Nangong Liuyun despierta (4)

Muy rápidamente, apareció una fina capa de sudor en la cara de Su Luo, el sudor se condensó en gotas más grandes y rodó hacia abajo.

Ahora, la cara de Su Luo estaba muy roja, roja como nubes de fuego que ardían intensamente. La temperatura de su cuerpo era terriblemente alta, hasta Beichen Ying y Zi Yan que estaban a tres metros de distancia, aún podían sentir el calor debido a su temperatura.

Su Luo apretó los dientes para soportar el dolor, con crujidos saliendo de su boca. Ella casi hizo rechinar sus dientes en pedazos.

Se sentía como si la hubieran izado en un marco y el fuego la estuviera cocinando, con ráfagas de dolor abrasador saliendo de todo su cuerpo. El dolor violento se había asentado en sus cuatro extremidades y huesos hasta llegar a lo más profundo de su corazón. Hacia el final, su cuerpo estaba casi entumecido.

¡Ella no podía rendirse! Nangong Liuyun todavía estaba esperando que ella se fusionara con la Hierba de Higo Ningpo de Sangre Escarlata para salvarlo, ¡ah!

Su Luo tenía una fuerte intención en su corazón. Ella hizo todo lo posible por soportar el dolor inhumano. Su Luo apenas logró hacer circular una parte de su fuerza espiritual, haciendo que la sangre hirviendo se comprimiera ligeramente, bajando su temperatura.

Por cada circulación que completaba su fuerza espiritual, Su Luo podía sentir claramente que su cuerpo se fortalecía.

Aun si sentía que estaba sufriendo la muerte por miles de cortes, los labios de Su Luo aún se curvaron en una sonrisa satisfecha, porque finalmente encontró la manera de abrirse paso.

Su Nangong podría salvarse.

Con el paso del tiempo, la sangre hirviendo se enfrió gradualmente. Ahora, apenas estaba tibio, fluyendo en el cuerpo de Su Luo como un espíritu vivo, infiltrándose en sus huesos y músculos, fortaleciéndolos poco a poco.

La piel enrojecida originalmente volvió gradualmente a una tez brillante, translúcida, como el jade. La sangre hirviendo se calmó, la energía espiritual transparente fluyó de ella en ondas, envolviendo a Su Luo en una niebla similar a una nube.

De repente, se pudo sentir una ligera fluctuación en el aire.

"Esto es..." Los ojos de Beichen Ying se abrieron con sorpresa.

"¿Está rompiendo?" Él y Zi Yan se miraron sin palabras.

El maestro de los Nueve Salones del Palacio diferentes miró a Su Luo con tristeza, soltando un profundo suspiro. Una plántula tan brillante y él no podía usarla. Originalmente, tenía que destruirla, pero luego, le hizo una promesa al Séptimo Joven Maestro... este maestro traicionero y astuto de los Nueve Salones del Palacio Diferentes, solo de pensarlo, se sintió enredado.

Su Luo se sentó allí con las piernas cruzadas, rodeada de energía espiritual, con una sonrisa pacífica, tranquila y satisfecha en su rostro.

Así es, justo ahora, había llegado al séptimo rango.

En un corto tiempo de dos años, de ser un material de desecho en el rango cero al séptimo. Su Luo había creado un milagro sin precedentes en este continente.

Justo cuando todos miraban con los ojos abiertos de par en par con incredulidad, ¡una fluctuación aún más fuerte vino del aire!

"Este... ¿quién se está abriendo paso?" Beichen Ying miró a su alrededor y solo vio a su grupo de personas presentes.

"Parece ser..." El delgado dedo de Zi Yan señaló a Su Luo con incredulidad.

Los dos de repente se quedaron sin palabras.

Ella acaba de atravesar un rango, ahora, ¿atravesó otro rango? ¿No era esto... ahora, no debería Su Luo haber alcanzado el octavo rango?

¿Un corto tiempo de dos años, de rango cero a octavo rango?

¡¿Cómo era esto posible?!

Beichen Ying parecía haber sido golpeado por un rayo, se quedó en su lugar aturdido, con los ojos mirando fijamente a Su Luo.

Zi Yan también pensó que esto era irreal, pero cuando recordó el talento natural de Su Luo, muy rápidamente, se sintió aliviada.

"Realmente admiro la vista del Tercer Hermano Mayor, ah". Zi Yan levantó el pulgar en señal de aprobación.

En ese momento, Su Luo todavía era una buena para nada, pero su percepción le dijo que ella era una perla. De una pila de rocas rotas, escogió una jadeíta tan preciosa. Con un talento innato tan fuerte y una velocidad de avance, Zi Yan se dio cuenta de que nunca había oído hablar de esto.

La mirada con la que el maestro de los Nueve Salones del Palacio Diferente solía mirar a Su Luo estaba aún más enredada, ahora, su corazón todavía tenía un hilo de esperanza afortunada. Apostaba a que Su Luo no conocía el método de tratamiento.

Rodeado de energía espiritual, uno no podía ver claramente la cara de Su Luo.