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Tranquilo, sólo vas, le dices que An Yu-Jin que la odias, le dices a ______ que te gusta y listo, nada complicado, repetía mentalmente Beomgyu.

Tras su gran episodio de cobardía, sólo le quedó poder actuar en el momento que ambas pudieran estar, y eso sólo podía ser en la escuela.

Su cabeza iba agachada, meditando mientras caminaba por el pasillo repleto de estudiantes, sin siquiera notar cómo todos murmuraban mientras lo miraban pasar.

—¡Beomie! —escuchó que gritaron desde el pasillo, y de inmediato supo quién era.

Algo irritado volteó, mientras más rápido lo dijera mejor.

—An, tengo algo que decirte. —habló una vez que la más baja estuvo frente a él.

—Bien, pero yo también tengo algo que decirte. —le dijo sonriendo.

—No, tengo que decirlo cuanto antes y-

—Wow, felicidades por el nuevo novio Yu-Jin, nos vemos después. —hablaron un par de chicas pasando por su lado, y la mencionada sólo sonrió.

Beomgyu se quedó desconcertado, también molesto, y por naturaleza, su entrecejo se frunció.

¡Novio! ¡Tú no eres su novio estúpido! Si Yu-Jin ya tiene novio, no hay más problema, pensó, y una sonrisa asomó en sus labios.

—Oh, tienes novio An, no lo sabía, bueno, tal vez no le guste que hablemos, así que no lo haremos más, ¡adiós! —dijo el castaño, pero antes de que pudiera irse, la más baja lo detuvo, mientras reía.

—Beomie tonto, tú eres mi novio. —aclaró sonriendo.

Y Beomgyu rápidamente se safó del agarre, y de nuevo su semblante cambió.

—¡¿Estás loca?! ¡Tú y yo no somos novios! —habló fuerte, llamando la atención de muchos en el pasillo.

Yu-Jin miró a los estudiantes, sintiéndose exhibida.

—Beomie, tú y yo sí somos novios. —reclamó cruzando los brazos.

—Mentirosa, no somos novios, ni siquiera amigos. —soltó en defensa, serio y sin indicios de arrepentimiento.

—¡Beomgyu! —chilló. Suspiró, sintiendo las miradas sobre ella, y escuchando murmullos.

Todos los demás creían que se trataba de una pelea de pareja, cuando claramente no lo eran.

A Yu-Jin jamás le negaban algo, y el amor de alguien era algo que tenía que ganarse.

El castaño la miraba con frialdad, mientras ella lo veía enojada, con los brazos cruzados.

Ni siquiera notaron cuando los hermanos Hwang llegaron al lugar, observándolos a ambos.

La castaña se sentía decidida a descubrir sus verdaderos sentimientos, aunque aquella situación y su enamoramiento por Eunwoo lograban confundirla.

—Olvídate de que nos conocemos, eres sólo una mentirosa, una hija de papi berrinchuda. —espetó sin piedad.

La estaba humillando, eso era seguro, pero ella no bajaría su ego.

—¡Eres un imbécil! Dijiste que te gustaba. —defendió en un chillido.

—Pues fue un error. —articuló, y todos susurraron más cosas. —Fui un imbécil, lo sé, pero no contigo, lo fui por no confesarme a la persona correcta. —explicó, sin restar su genio defensivo.

—¿Y quién es esa estúpida? O, no me digas, ¿a caso es varón? —retó.

—Es ______. —respondió sin titubeos.

Todos miraron a la mencionada, quien se congeló al oírlo.

Inmediatamente la vista de Beomgyu viajó a ella. Mierda, pensó, sin querer acababa de confesarse ante toda la escuela a la chica que le gusta, misma que no tenía reacción alguna.

El corazón de Beomgyu empezó a latir con rapidez, y su respiración se agitó de los nervios. Sus manos sudaban, mientras que Yu-Jin los miraba a ambos, una y otra vez.

Sin perder un poco de tiempo, se acercó rápidamente a la castaña, propiciando una fuerte bofetada en su mejilla.

—¡Eres una zorra! ¡Me quitaste a mi novio! ¿Oíste? ¡MI NOVIO! —gritó enojada.

La chica se mantenía sobando la parte golpeada, que probablemente estaría roja un rato.

An iba a lanzarse a golpearla, era evidente, pero antes, un par de estudiantes la sostuvieron. Eran entrometidos, pero sabían qué estaba mal.

Rápidamente, el castaño se acercó a la chica, sosteniendo su mejilla libre, revisando que todo estuviera bien.

Sus miradas se conectaron, desviándolas con rapidez.

—¿Estás bien? —preguntó, ocultando su nerviosismo.

—Sí... Estoy bien. —contestó en voz baja.

—¿Ustedes qué miran? ¡Largo! —gritó Hyunjin, y todos, algo ausutados, se retiraron.

Hasta An se fue, hecha una furia cabe resaltar.

Los castaños se miraron unos segundos más, para luego, cada quien alejarse por su lado.

La chica no podía dejar de bombardearse con preguntas. Bueno, Beomgyu ya había aclarado perfectamente lo que sentía, ahora faltaba ella, y no sería para nada fácil...


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Dedicado a Kiiiimiiii y kimyanit disculpen la espera <3

⇝丂卂ㄒ丨́尺丨匚ㄖ༅  讽刺的 𓇽︎ϲнοι ϐєοмgγυ᯽︎Where stories live. Discover now