Capítulo 9

105 5 0
                                    

Mi mirada se centró en la puerta que marcaba las escaleras de emergencia casi al tiempo en que la alarma  por el fallo del ascensor resonó por el edificio.

Entré en el lugar, apenas iluminado y, como había visto en los planos, sin ninguna cámara en aquel piso. Bloqueé la puerta y de inmediato, abrí la que resultaba la única ventana disponible luego de que toda la estructura colindara con un edifico que terminaba al menos unos 4 metros más abajo. 

Con un punto de apoyo en la baranda, no demoré en atar una soga retráctil que me permitió deslizarme hasta la siguiente azotea. Guardé los elementos en mi bolso, reajustando el dispositivo de pulsos magnéticos para que interfiriera la nueva señal y de inmediato desabotonando la parte superior del vestido rojo que le permitía convertirse en uno negro, un poco más largo que el anterior.

Continúe avanzando mientras recogía mi cabello con rapidez  y una vez alcancé la puerta, terminé mi atuendo con un par de gafas. Un par de escaleras más y lo siguiente en mi visión fue el comienzo de unas oficinas vacías.

— Rápido y seguro—alardeé para mi misma, observando con disimulo las cámaras al apagarse a mi paso, conforme tomaba algunas carpetas con documentos de alguna de las mesas.

Alcancé el ascensor con tranquilidad, retocando un poco mi aspecto hasta llegar al primer piso. El hombre en la recepción giró con el sonido de mis tacones.

— Creí que ya todos se habían ido— musitó para si mismo, probablemente tratando de identificar mi rostro.

— Sí, lastimosamente no tengo a nadie en casa que se enfade porque no haya ocurrido—comenté con gracia, acercándome a su puesto e inclinándome lo suficiente para que el escote de mi vestido captara su atención. Puse la carpeta justo en uno de los costados — Puedo dejar esto aquí ¿Verdad? Olvidé entregarla y no quiero volver a subir.

— Sí sí, claro—comentó el hombre casi al tiempo en que en un fingido error, mi mano provocó que todos los papeles cayeran junto a su silla.

— Lo lamento yo...

— ¡No te preocupes!— me interrumpió con animo al tiempo en que se agachaba a recogerlos y yo aprovechaba el momento para oprimir el botón que desbloqueaba la puerta de entrada— Es casi un milagro que estemos usando nuestros cinco sentidos a esta hora. De hecho, es increíble ver una chica tan dedicada...

Su voz se perdió en la lejanía a medida que seguía hablando y yo salía del lugar. Suspiré con cansancio, girando por la primera esquina hasta alcanzar una calle repleta de consumidores.  Me deshice de los guantes, aventándolos a una caneca incendiada donde algunos hombres se calentaban y guardando las gafas de nuevo en mi bolso. 

—¡Hey, muñeca!

Ignoré el grito a mis espaldas, agregándolo a la larga lista de comentarios que se fueron sumando con mi paso. 

— Detente— La ultima palabra, de quien parecía ser un sujeto completamente fuera de su cabales, se acompañó de su mano al agarrarse de mi hombro. 

Giré de inmediato, tomándolo de la muñeca y obligándolo a que me soltara con un poco de presión. Una sola mirada bastó para que mi empuje lo hiciera caer contra una de las paredes con una expresión de terror.

Giré ligeramente tras mi hombro al sentir que alguien me observaba, dando un recorrido rápido al lugar antes de volver sobre aquellos que intentaban auxiliar al compañero caído. 

— ¿Algún otro voluntario? —cuestioné con algo de desprecio, tomándome un segundo para mirar a algunos directo a los ojos y luego dedicando una sonrisa al público expectante — eso creí— sentencié y justo cuando me disponía a irme, un ruido provocó que girara de inmediato. 

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Dec 21, 2021 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Kiss or killWhere stories live. Discover now