•Emiliano•
Sabía que era su auto, pero comprobarlo al entrar me dejo un sabor amargo en la boca, como podía esa perra estar en mi casa sonriendo como si se hubiera ganado la lotería me enfermaba el solo verla así que de inmediato le dirigí mi mejor mirada de desprecio, quise saber que hacía en mi casa y cuando lo supe exigí que se largara aunque de respuesta solo obtuve un intento de reprimenda de Ernesto lo que provoco que rodara los ojos decidí subir a mi habitación, pero antes alcancé a escuchar como Ernesto pedía perdón en mi nombre como si fuese un niño pequeño iba a enfadarme por eso, pero un nudo enorme se creó en mi estómago cuando ella respondió llamándole Amore.
Vamos que en ese momento quería decirle unas cuantas cosas a esa bruja, aunque al final decidí que no era lo correcto, ya que sabía que todas las palabras que saldrían de mi boca de alguna manera decepcionarían a mamá y no quería decir algo de lo que ella se sintiera decepcionada a pesar de ello estaba furioso fue como si me golpeara la desesperación, al abrir la puerta de mi habitación mis manos temblaban, era una sensación horrible como si me estuviera hundiendo me sente en el piso a esperar que pasara un poco, toda esa sensación al final fue remplazada por ira una que ya no podia contener, quería romper algo, no solo eso quería destrozarlo y que no quedara nada, nada que me recordara a ella,nada que me gritara que me habia quedado solo,nada que me dijese que no importaba, nada que me gritase una y otra vez que nada volveria a ser igual pero como podía hacerlo si todo este lugar era ella y más que eso me recordaba lo que ya no tenia al final toda esa ira contenida vencio a mi razón no lo pensé más y lo hice comencé pateando el buro, destroce la mitad de las cosas que había en mi escritorio primero rompí los lápices, luego arranque las hojas de los cuadernos lance todo lo que pude al suelo rompí prácticamente todo lo que tenía a mi alcance, tire el estante de libros que estaba a un lado de mi cama y se sintió tan bien ver como toda esa basura caía, mire el stand con todos esos estúpidos trofeos que no hacían más que recordárme la basura que yo era por eso los tire uno a uno estaba harto de esa sensación de ahogo de todas esos ruidos en mi cabeza tome los reconocimientos diplomas no pude evitar soltar una pequeña risa cuando lei, al mejor promedio, al mejor jugador, ganador del torneo de ajedrez, ganador del concurso de quimica, ganador del concurso de matematicas esas y más estupideses decia cada papel, la mayoria los arrugue en una especie de bola de papel otros que ya no estaba dispuesto a ver los tome y busque mi encendedor mi mirada se detuvo en el espejo por un momento, pero al mirarlo no me reconocí no sabía si quien estaba viendo era mi yo real uno que siempre había estado oculto dentro de mí o solo era una basura más que quedaba en mi cuarto.
De alguna manera me enojo ser consiente de que nisiquiera entendía quien era ahora estaba apunte darle un golpe a mi estupido reflejo, pero entonces lo escuche, eran los pasos de Bash que se dirigían a mi habitación y fue como si dentro de mí se hubiese activado un botón el cual me hizo reaccionar sabía que no podía arreglar las cosas tan rápido pero por lo menos podia apagar el fuego para que él no viera que me salí de control, él no podía verme así.
Fingí que no pasaba nada me recosté sobre la cama y comencé a ver mi celular, al entrar a mi cuarto pude ver su sorpresa por verlo en ese estado, estuvo a punto de decir algo pero mejor lo ignoro y se recostó a mi lado con Loki en sus brazos.
-Emms ¿Por qué?- pregunto triste
-¿Por qué, qué?- quise saber
-¿Porque fuiste a casa de Max?- a eso que se suponía que le respondiera
-Quería darle una lección para que no molestara a mi hermanito nunca más- conteste sin rodeos porque de hecho ese era mi proposito inicial el cual cambio debido a que Iván se comporto como un completo idiota
-No te hubieras molestado, no vale la pena, no me gusta que te metas en problemas, el tío Iván está hablando con papá- me informo algo preocupado, si claro que estaban hablando, pero suponía que era sobre otra cosa aunque Bashi aún no sabía eso
