Evie Branwell es una de las mejores shadowhunters del Instituto de Nueva York, siempre sigue las leyes y hace bien su trabajo. Pero, ¿qué pasará cuando un familiar suyo del pasado venga a provocar muchos problemas? ¿podrá superar los obstáculos? ¿qu...
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Había terminado mi llamada con Isaac, pidiéndole que se quede con Magnus, él me contó rápidamente que también estaba Simon y Raphael peleándose por Camille y no se que cosas más, cuando sentí una mala sensación, me empezó a faltar el aire.
-Lydia - susurré antes de caer de rodillas. Varios Shadowhunters se acercaron a ayudarme - busquen a Lydia - pedí mientras me llevaban hasta mi habitación.
Minutos después, Alec entró apresurado a nuestra habitación, lo miré.
-¿Lydia está bien? - le pregunté con rapidez.
-Raj fue poseído, casi la mata, pero está bien - dijo - John pidió que le trasladen a Idris para atenderla.
-Es mi culpa, nunca debí dejarle con Raj - dije arrepentida.
-No es tu culpa, amor - dijo acercándose y tomando mi rostro entre sus manos - tranquilizate - dijo para abrazarme.
-Quiero verla - dije en un susurro.
-Primero descansa un poco - dijo con suavidad y me recostó por la cama - ¿por favor? - pidió y sonreí, asintiendo. Una hora después ya me encontraba bien y me fui a la enfermería.
-¿Estás bien? - pregunté ingresando en la enfermería, haciendo que mi melliza sonría grande.
-Me dijeron que tuviste un ataque de psicosis, creo que yo debería preguntarte si estás bien - dijo divertida.
-Fue tu culpa - dije sonriendo. Me senté en su camilla y estuvimos hablando por unas horas - ahora que se que estás mejor, debo irme a ayudar a encontrar al demonio - dije y me estaba por levantar, pero ella me agarró de la mano.
-Evaline, ten mucho cuidado, por favor - pidió y sonreí, luego dejé un beso en su mejilla, para luego irme de la enfermería. A mitad del camino, me encontré con Alec sentado en la puerta de Jocelyn, con resaca de posesión.
-Alec - dije acercándome a él, éste me miró y miraba sus manos cubiertas de sangre, y así sucesivamente - ¿Alec? ¿amor? - dije poniendo mi mano en su mejilla.
-¿Qué hice? - preguntó suavemente.
-Tranquilo, si - dije y me levanté acercándome al cuarto, viendo lo que no esperaba ver, Jocelyn estaba muerta. Clary llegó segundos después, viendo la escena y se recostó por la puerta llorando, yo me acerqué y la abracé con todas mis fuerzas.
Minutos después, fuimos a la sala de control para ver las grabaciones del cuarto de Jocelyn.
-Clary, yo... - empezó a decir Alec, pero la pelirroja levantó la mano en señal de que se calle, y yo tomé la mano de mi esposo, dejando caricias en esta para que se tranquilice.
-Tengo que matar a un demonio - dijo retirándose de la sala, Alec me miró y yo lo abracé acariciando su cabello.
Estaba en la sala de entrenamientos buscando a mi Parabatai para asegurarme que esté bien, cuando ella entró poseída.
