𝐋𝐀 𝐍𝐈𝐍̃𝐄𝐑𝐀 𝐃𝐄 𝐌𝐈 𝐇𝐈𝐉𝐀. | 𝐉𝐌 𝐘 𝐓𝐔.| •𝐓𝟐•

Día 129.

Después de aquel beso desayunamos juntos para luego irnos a dar un baño, minutos después ambos ya estábamos vestidos. Jimin debía irse a otro hotel ya que debía cambiarse al igual que yo aunque era algo temprano pero debía arreglar algunas cosas y ver los preparativos.

Nos despedimos con un beso y un abrazo, no nos queríamos soltar, ambos estábamos nerviosismos, pero fuimos separados por la fuerza ya que Taehyung se lo llevó de la oreja. En ese momento miré mi reloj y vi que aún había tiempo para poder ir a ver a los niños, la maquilladora vendría más tarde así que quería ir con ellos.

Salí de nuestra habitación y caminé por el pasillo mientras trataba de recordar en que habitación y piso estaba Felix y todos los demás... ¿Era el cinco? ¿El dos? Maldición, no lo recordaba. Le envié un mensaje a Felix y este en vez de decirme dónde era su contestación fue "Déjate de molestarnos, los niños están bien, ahora déjanos seguir durmiendo", mi hermano seguía siendo igual de odio que en la adolescencia... Aún no cambia.

Los pisos del hotel eran diez, nosotros estábamos en el último con Jimin, el había reservado todo el piso porque quería que nuestra intimidad fuera... "Privada", ya saben, las paredes son finas y se escucha todo así que prefirió hacer eso antes de pasar vergüenza en el elevador o en el pasillo. Después en este hotel se alojaba la gente que conocíamos, amigos y familiares. Mi hermano Felix, nuestros hijos, el señor Park y Amanda, Seung y Jihyun, Taehyung con Junior y Vanessa, también estaban los amigos de Jimin con sus parejas o invitados que ellos trajeron, sus nombres son Jungkook, Hoseok, Jin, Namjoon y Yoongi, mi relación con ellos es solo de conocidos, desde aquella vez en la inauguración de la empresa de uno de ellos jamás volvimos a tocar el tema y sólo nos saludamos por educación... Aunque haya pasado un tiempo no puedo olvidar aquellas palabras que me dijeron en ese entonces.

En fin, no era difícil encontrar a mi hermano, pero opté por algo más fácil. Volví a la habitación y llamé a recepción, allí pedí información sobre la habitación de Felix y me la dijeron... "Cuarto piso, habitación 492", prepárate hermanito, ahora te mataré por haberme ignorado. Tomé una almohada y fui directo hacia el ascensor, en cuando este se abrió entré y oprimí el botón para luego esperar a que se cierre y bajar. Al llegar al piso cuatro, fui hacia la habitación que decía y quise abrirla pero no pude... Aún así escuché un grito desde adentro preguntando quien era.

__: Servicio a la habitación, señor.

Dije poniendo la voz grave mientras apoyaba mi oreja en la puerta.

Fx: Pero yo no pedí servicio a la habitación.

__: ¿Usted es Felix?

Fx: Si, soy yo.

__: La señorita __ le envío este desayuno a usted y a sus sobrinos.

Fx: Oh, esta bien, ya voy.

Quería matarme de la risa, el hecho de hacer fuerza con la voz para no parecer yo y que mi hermano me haya creído me causaba risa. Mientras esperaba con la almohada en mis manos escuchaba pasos dentro de la habitación, supuse que se estaba cambiando o algo. En cuánto abrió la puerta le tiré la almohada en la cara y este se sorprendió mientras se caía hacía atrás.

__: ¡Idiota! ¿Por qué me ignoras?

Fx: Tú eres la idiota... ¿Que es esta forma de despertarme?

Dijo mientras se quejaba y se sobaba mientras estaba en el suelo, en eso una pequeña niña se asomó y al verme corrió hacía mi gritando "¡Mami!".

__: Bebé... Hola amor, ¿Cómo estás?

Dije mientras la cargaba y le daba varios besitos en su carita.