C A P Í T U L O 38

576 79 2
                                    

N A R R A A I D A N

Y de nuevo nos encontrábamos en una situación así, no me molestaba en lo absoluto, sólo que en ese momento no quería estar tan cerca de ella. La solté dando un paso hacia atrás manteniendo la distancia entre ambos.

Necesitaba pensar en todo, no podía quedarme callado; necesitaba decirle nuestra historia, cuando empezó y cuanto "terminó".

—Aidan—empezó hablar haciendo que inevitablemente yo la viera de inmediato, estaba mojándose al igual que yo, pequeñas gotas de lluvia caían en su rostro, su pelo estaba todo echo un caos pero no se veía desarreglada si no todo lo contrario, se veía espectacular.

Pude ver como sus labios empezaban a temblar, mierda...

—A...Aidan, ¿Qué pasa?—no me había dado cuenta que me estaba acercando de más a ella.

—Nada, sólo no se que estoy haciendo—respondí.

—Pues yo si.

No me dio mucho tiempo para pensarlo cuando junto sus labios con los míos, a diferencia de los otros besos que nos habíamos dado, esta vez se lo tomo mas con calma, disfrutando del momento, mis brazos rodearon su cintura apegándola a mi lo mas que podía. No soportaba tenerla alejada de mi ni un minuto mas, ya no podía volver alejarme de ella.

—Aidan...—murmuró ella con nuestros labios apuntó de volver a unirse.

—No digas nada, te amo, ¿lo sabes?—ella me dedico una cálida sonrisa.

—Si que lo se—respondió, su respuesta hizo que mi corazón se encogiera.

—Quiero estar contigo.

Un silencio se hizo presente entre nosotros dos por unos segundos que se me hicieron eternos, (T/n) me volvió a regalar una sonrisa, sus mejillas estaban rojas, no sabía si de vergüenza o de nervios.

—A mi también me gustaría estar contigo.

Sus ojos no se apartaron de los míos, la sinceridad se oía en sus palabras, la mano de ella se deslizó por mi mejilla antes de depositar un beso en ella, mis manos apretaron su cintura evitando que se apartara de mi una vez más.

— Entonces... ¿Qué estamos esperando?

Mi pregunta hizo que ella posara sus manos en mis mejillas con dulzura sin apartar su mirada de la mía, poco importó que la lluvia nos estaba empapando, no me importaba tomar un resfriado.

— No lo se, sabes...— ella me regaló una sonrisa- —aún no he podido recordarte, se que lo haré ha medida que pase el tiempo, ahora sólo... sólo quiero estar contigo.

— ¿Estás segura que quieres estar conmigo?, han pasado tantas cosas...— posó sus labios sobre los míos antes que continuara.

— Aidan quiero estar contigo, como una pareja, ¿Lo entiendes?— yo negué.

—No puedo aún, deseo eso, deseo estar contigo eso quiero que lo sepas— le asegure— pero no ahora, quiero darte tu tiempo aún...

— Aidan, ¿Recuerdas cuando me preguntaste si estaba bien el nombre Blue Neón?— la mire sorprendida, no pensé podría recordar eso.

— Si, lo recuerdo.

— Me mostraste la letra, en ese tiempo salías con una chica no recuerdo su nombre...

Salía con Madd, la chica que también fue responsable de tu accidente —pensé mientras la escuchaba.

— Y dijiste que te inspiraste en una chica... esa chica era yo— y no estaba equivocada.

—No lo se— respondí inseguro.

—Si claro—ella se inclino un poco hacia mi uniendo nuestras narices, mas yo quería besarla y jamás soltarla. Vi como sus ojos brillaban, brillaban al verme y se que los míos también brillaban al verla, como no sabía que era la mujer de mi vida.

—Te quiero (T/n)— murmuré cerca de su oído haciéndola estremecer.

—Yo también te quiero Aidan.

N A R R A _ _ _ _

Después que ambos tuviéramos claro nuestros sentimientos, no pude esperar mas.

Lo acerque a mi de nuevo uniéndonos en un beso, pegó mi cuerpo a la parte trasera del auto mientras rodeaba mis brazos en su cuello y el mantenía sus manos en mi cintura. Me encantaban sus besos, eso estaba claro, amaba tenerlo conmigo. Me sentía protegida en sus brazos.

No voy a mentir, un recuerdo llego  a mi mente, como el día de su cumpleaños, nadie lo había saludado excepto yo, pero un recuerdo fue el que me hizo darme cuenta lo que sentía por el.

14 de Febrero.

Cuando me dijo que tenía que irse a Toronto, pude recordar cada detalle de ese momento, como ambos nos miramos unos segundos para luego mancharnos con el helado, mierda el odiaba el helado, eso lo había hecho por mi.

Ahora lo único que quería era abrir ese maldito baúl donde todos los recuerdos de mi pasado estarían, hay... hay estaba toda mi historia. Ya ansiaba llegar a California.

Aidan y yo nos habíamos separado por falta de aire, me había olvidado que estaba lloviendo, en cuanto me di cuenta un miedo se apodero de mi haciéndome que me aferrara a el como si la vida dependiera de ello. Lamentaba si eso arruinaba el momento pero aun tenía que lidiar con los fantasma de mi pasado, ese accidente. Seguía en mi memoria.

—Ven entremos, te estas helando—susurro contra mi oído.

Mierda me estremecí por completo.

—Por favor—hundí mi cabeza en su cuello, su piel se erizo por completo ante mi contacto.

Me cargó como una princesa para luego ponerme en el asiento del copiloto, cerró la puerta de inmediato para luego el subirse al auto.

—Dame tu mano—me pidió con una sonrisa. Yo no lo dude ni un segundo, poso mi mano contra la palanca de cambios e hizo partir el auto de nuevo. El ambiente era cómodo entre ambos, mas después de lo sucedido, el lo notó, me miraba de vez en cuando, lo sentía y eso me hacia poner nerviosa.

Después de cuatro largas horas, con todas las paradas que hicimos sumamos cuatro horas, llegamos a Las Vegas.

SOL Y LUNA AG #2 [Aidan Gallagher&Tu]Where stories live. Discover now